
¿Qué tal todo? Media España está de puente y no sé si toda en Madrid. Es increíble cómo está todo de lleno.
Hay mucha gente que ha aprovechado y se viene unos días para ir de compras, a ver un musical u obra de teatro, etc…
La pena es que hoy no ha parado de llover en todo el día, con lo bueno que hizo ayer. Pero en fin, sarna con gusto, no pica.

Por la mañana, hemos ido también de compras con Almudena y Pablo, sobre todo a equipar al último, que no tenía casi nada y hemos regresado como Papá Noel.

Almudena ha aprovechado y se ha comprado también varias cosas… Entre ellas, un pantalón para Nochevieja. Es ancho y original, pero no tiene nada para arriba, así que no sé si encontraremos lo adecuado, pero se ha empeñado, y claro, a ver quién le dice que no…

Primero, felicito desde aquí a mi queridísima amiga Macarena, que hoy es su cumpleaños. Ya vamos cayendo las de diciembre…¡Un beso a la mejor amiga que alguien pueda tener! Un sol, un encanto, buena, generosa, en fin, que lo tiene todo y estoy orgullosísima de ser su amiga. ¡Desde que nacimos somos íntimas!

Bueno, y siguiendo con los modelitos para estas fiestas, hoy nos toca hablar un poco de las mayores, es decir, de adultas.

Muchas me lo pedís (es increíble lo que os vais a arreglar algunas) y yo, a cumplir y a daros ideas. Me decís que cosas muy arregladas. No sé, a lo mejor no sirve para todas, pero desde luego, me habéis dicho que necesitáis algo despampanante…
Recuerdo mis Nocheviejas de ir muy arreglada… Ya no. Ahora prefiero quedarme en casa, tomando una copa y con una buena charla.
Os voy a hablar, sobre todo, para las más jóvenes, de Silvia Navarro, donde encontraréis modelos arregladísimos y apropiados para ese día tan especial que es la Nochevieja. También hay diseños para las no tan jóvenes que lo sepan llevar y que luego, se pueden poner en cualquier ocasión que se requiera. Todos especiales, desde luego. Todos de lujo y no excesivamente caros, al menos algunos.

Nos propone diseños de vuelo, cortos, espaldas al aire… En fin, yo los veo más de jóvenes, por razones obvias. Hay algunos muy monos, aunque en general, mi estilo es de menos vuelo y más tubo.
Pero como me pedís de todo, os enseño el vestido Marta, en un rosa muy bonito, de tul bordado y organza de seda. ¿Es o no es arreglado? Vamos… Como os decía, no se lo puede poner cualquiera evidentemente, pero sí muchas jovencitas que tienen todo muy “bien puesto”.


La espalda, no defrauda a las amantes de este estilo. Dulce y romántico. Sería genial que tuvierais boda, porque también es idóneo para ella.
Otro precioso para Nochevieja es el vestido Paloma, en mikado y tul rojo. Un poco más modosito por delante, pero de vuelo y espalda sugerente.
Estaréis encantadas con él. Las veintiañeras mueren por cosas así. Y treinteañeras, por supuesto. Muchos se están

agotando, por lo que tendrías que entrar en su página y preguntar si lo van a reponer.
Es un vestido, que no me hubiera importado ponerme cuando era más jóven. Lo veo monísimo y sin mucho recargamiento.
Lo justo para un día tan especial.
El vestido Belén, más abajo, otra joya en rojo, de plumas y tul invisible.

Te sentirás la reina del baile, desde luego. No deja indiferente a nadie. Éste también me lo hubiera puesto yo a esa edad. Las plumas me pirran.

Escote de escándalo y favorecedor, muy favorecedor.

Más rojo, que es el color de la Navidad y sobre todo, de la Nochevieja, con el vestido Carolina, de guipur rojo con base de mikado color crema. Otro de los que aún me pondría ahora…

No sé para qué, pero si tuviera ocasión… Ceñido y elegante. Super apropiado para ese día y para bodas, como os he dicho.

Miradlo por detrás, ni que fuera la Preysler ¿No os parece? Con unos zapatos de taconazo rojos, irás impresionante, no cabe duda.

El vestido Lucía, bárbaro. Bicolor en lila y rosa, de crepe y con pluma natural, en un rosa más subido.
De nuevo, la espalda sugerente y como remate, la chaqueta Adriana, que completa el modelo.

Tweed con detalle de organza rosa empolvado, queda un conjunto fetén. Éste, ideal para más mayorcitas que estén bien y seguras de sí mismas. Hay que llevarlo con mucho aplomo, pero reconozco que es un señor conjunto.


El rojo irrumpe otra vez con el vestido Macarena. Corto, con un vuelo ideal, de guipur, mikado y tul invisible bordado. ¿Quién se atreve con éste?
Si con el otro hay que tener seguridad, con éste, aún más. Claro que hay niñas muy seguras que se lo pueden poner.
Pero también hay que tener estilo y clase, ya que si no, es un vestido que, depende de cómo lo lleves, puede resultar un poco… chabacano, con perdón de la marca.

Para aquellas que dicen que el rojo no les favorece, el vestido Paula, en un azul Klein intenso, puede ser su elección: en tul bordado, corto y realmente favorecedor, vamos, que levantas a un muerto… Ideal con los zapatos salón a juego, también de la marca.

Miradlo por detrás ¿Qué opináis?

Originalidad de nuevo con el vestido Andrea, del mismo estilo que los cortos de la marca, pero con colores diferentes: guipur lila y mikado.

Ya veis que va mezclado con azulón y blanco. Una mezcla atrevida, para la que habrá fanáticas (hay fanáticas de Silvia Navarro, os lo aseguro) y detractoras, por ser quizás el menos navideño… A mí esto me parece una tontería. Yo me compraría el que mejor me sentara y punto. Como si es amarillo limón.

Éste no es mi favorito, pero no por los colores, sino porque os he dicho que soy más de otro estilo.

Como, por ejemplo, el vestido Miranda, jajaja. Me río, porque no tengo ocasión de ponérmelo, pero éste es más de los míos.
La espalda es un lujo, con detalle de pedrería (el vestido es de crepe coral). Para morenas, un cañón de vestido.

Más modosito, pero también coquetón, el vestido Leticia, con fondo azul, corto de mikado estampado con orquídeas rosas. Un contraste muy bonito. Y un vestido más ponible en otras ocasiones. A mí me parece muy mono.

Lo mismo que el vestido Vanesa, también con estampado y más tapadito, en azul con orquídeas… Ha gustado muchísimo. Muy ponible también para más ocasiones. El vuelo es delicioso.

Hay que ver hasta dónde ha llegado esta chica, que empezó como bloguera y ha terminado con su propia colección y varias boutiques.
Además, tiene también zapatos, joyas, tocados y ahora va a lanzar su perfume. ¡Como las grandes, vamos!
Otro vestido con el que dejaréis mudos a todos: el Daniela, largo, de guipur, gasa y tul bordado.

Tonos malva, azul Klein, lila y blanco. ¡Los colores me encantan! Y el vestido también, por supuesto. Desde luego, para una Nochevieja antológica, de esas de no olvidar. Si quieres

impresionar, te sienta bien, y además, puedes permitírtelo, no lo dudes. Pero también depende del sitio donde vayas. Esto hay que tenerlo muy en cuenta, ya que si vas a estar con una multitud y casi no se te va a ver, mejor ponte otra cosa.

Este vestido requiere su sitio, sin agobios, un sitio especial, un lugar elegante, vamos de sitios exclusivos a las que vais a ir muchas que me habéis dicho. Está claro, ¿no? Si no, te sentirás fuera de lugar, por mucho que quieras llevarlo.

Lo mismo opino del vestido Amanda, corto, en otomán marino y con detalle de flores realizadas a mano. El escote asimétrico. Vamos, no le falta detalle, con el tul oscuro en el bajo. Otro que es para que te miren. En realidad, todos lo son.

Son vestidos de los que me ha pedido mucha gente, pero reconozco que no sé si muchas de las que me leéis iréis tan arregladas ese día.
También se puede ir ideal con otras cosas, por supuesto. Pero ya hablaremos de ellas. Además, hay modistas fabulosas (en Burgos hay unas, dos hermanas, que son de traca) que enseguida captan la idea, por si os ha gustado alguno y no queda o no podéis permitiros el lujo de gastaros lo que cuesta.

¡La imaginación al poder, como os digo siempre! Hay gente que con 4 pesetas, va de lujo, porque sabe, tiene estilo y todo le queda bien y otras, que, por desgracia, se tienen que gastar más dinero, aunque seguramente vayan peor.
Esto siempre ha pasado…¡que me lo digan a mi, que no sabéis qué cosas de auténticos dinerales he visto y casi mejor que lo hubieran dejado en el armario!

Algunos de los modelos de los que me estoy acordando aún me persiguen en pesadillas, jajaja.
Es la verdad. Así que, todas tranquilas, que aunque no os podáis comprar estas joyas, siempre podréis ir bien con gusto y recordando que la elegancia y la sencillez van de la mano y que menos siempre, siempre es más…
Un beso de rojo