¡Buen lunes a todos!  ¡Cómo cuesta arrancar la semana, madre mía!

Hemos estado tranquilos, sin niños y ahora acaba de llegar Pablo de Valladolid, que se ha ido a pasar los dos días con sus amigos de Burgos.

Juan llegará dentro de poco de Sevilla y

Almudena… ¡Quién sabe!

Como está preparando un evento del trabajo para el martes, lleva desaparecida todo el fin de semana. Desde luego, a esta niña no le da la vida para todo lo que tiene que hacer…

Y nosotros, pues aprovechando que estábamos sólos, nos hemos dedicado a la vida placentera, dejando de hacer muchas cosas que debíamos… Pero es que además, ha hecho un tiempo tannnn bueno, que yo he seguido

saliendo al porche a tomar el sol.

En fin, aprovecho que estoy relajada y apeteciéndome tener algún evento u ocasión especial, para hablaros de la nueva colección de  «DosP”, que ya os presenté hace un par de años y que me sigue enamorando por su calidad, exclusividad y maravillas sin igual.

Claro, añado que no es apta para todos los bolsillos, pero ¿a quién no le gusta ver ropa bonita? ¿Acaso no leemos las revistas mejores de moda y luego no nos lo compramos?

Pues con esta colección ocurre igual y además, llegado el caso, siempre hay gente que puede o que hace un esfuerzo por tener una de sus maravillosas creaciones con motivo de su cumpleaños, las próximas Navidades, etc.

Yo os doy ideas, que para mí, ya lo tengo elegido. Otra cosas es que después me lo compren, jajaja.

En fin, hay modelos que no se puede poner cualquiera, eso está más que claro y si se lo pone quien no debe, pues irá haciendo el ridículo, que de todo hay en la viña del Señor.

Pero, por ejemplo, la ropa de abrigo, como chalecos, abrigos, capas… nos las podemos poner todas. A unas nos sentarán mejor que a otras, pero todas las podemos llevar.

No os podréis resistir a maravillas como este chaquetón o abrigo corto de piel negro con esos bolsillos tan especiales de hilos metalizados… ¡Muero por alguna prenda de éstas!  Sólo llevarla encima tiene que ser una gozada increíble. Sé de su calidad y buen hacer y la verdad, no puede ser más bonito… ¿Qué os parece?

Como exquisito este chaleco de piel blanco con bolsillos con la piel en dos colores, mis colores precisamente. Yo me decanto más por estos tonos por mi color de piel, pero con cualquiera de los negros me conformo, jajaja.

¿Quién sabe si nos toca la lotería? ¿O por qué no un regalazo de Reyes? Mi cumpleaños es a finales de diciembre, así que…

Otra delicatessen es este chaleco capa increíble y estiloso como nada, también en los colores de mi alma…

Con una falda lápiz y un sencillo jersey de cuello alto, impecable. ¡Por Dios, qué joyaa! Ya os veo que se os ponen los dientes largos…

Y si no os lo podéis permitir, ya os digo que al menos veis lo que hacen para alguna ocasión imprevista o para recrearos la vista un poco.

De nuevo, la chaqueta blanca de piel (arriba), perfecta con el pantalón de cuero negro, pero también con mil cosas más. Yo, ya de comprar algo de “DosP”, compraría algo versátil, es decir, algo que no fuera muy marcado para ponérmelo mucho.

Todo lo que os voy enseñando, lo es.

¿Y esta chaqueta Tribal en tres colores? Uhmmmm… Se me hace la boca agua. Más caprichosa, porque es menos ponible, es la idónea para mí, que como os digo mil veces, de práctica tengo poco y de calurosa, mucho. ¡Chiflanteee del todo!  Tiene un gusto y una clase que no puede con ella.

Divinísimo el conjunto  de chaleco y mini falda Tribal… Sí, es para alguien jovencita y delgada, pero cómo es… Yo me atrevo con ello. Y de jovencita ya tengo poco, pero es mi estilo totalmente. Todo depende de con qué te lo pongas, los complementos, accesorios, etc.

Le puedes dar un toque más exagerado y juvenil  o todo lo contrario.

Los vestidos y conjuntos son de muerte, si bien, repito, no son para todo el mundo. Lo que pasa es que os los hacen a medida, si queréis. Todo dentro de un orden, claro.

Por ejemplo, divino para casi cualquier edad la falda y capa Navy, casi de lo más normalito y clásico y siempre un acierto. Te lo puedes poner con estas botas si eres alta, con otras más normales o con zapatos de salón de tacón. ¡Chapeau!

O el abrigo Navy, con aire más moderno, pero muy adaptable también para cualquiera. Mangas farol, solapas grandes con detalles joya y cinturón. Yo me lo pondría a modo de vestido, porque hay que tener en cuenta que es de manga corta.

Tampoco me importaría nada tener este vestido chaleco de ante en camel con esta maravilla de blusa blanca con lazada y mangas interminables… ¡Qué preciosidad!

Tiene lo que muy pocas cosas tienen… clase, sofistificación y atrevimiento a la vez. ¡Me privaaa!  Con botas en el mismo color, un cañón.

O el vestido Suede, también de ante marrón, con tachuelas plateadas. No me puede gustar más, aunque si tengo que elegir, me quedo con el anterior, no por nada, sino que como éste, tengo más del estilo… Como soy de estos colores, los marrones y camel predominan en mi armario.

Mezcla de tejidos y soberbio diseño en el vestido Paisley… Ya lo veis, sobran las palabras. Para delgadas, una auténtica obra de arte. Telas traídas de la India, hecho entero a mano, no puede ser más especial ni más exclusivo.

¡Qué maravillas de mangas!  Para combinar con marrón, delicioso.

Para las que sois más de negro, mirad qué bombonazo de vestido: el Seventees chic. Minifaldero y con mangas de gasa amplias y estilosísimas. Tal cual lo lleva la chica, me lo pondría con las botas altas negras. ¡Espectacular!

Otro conjuntazo de aúpa es este pantalón con el estampado en marrones de cachemir, como el vestido de antes y la blusa mostaza asimétrica… Imagináoslo para una boda de invierno.

Con un clutch, el toque malva del cinturón y taconazos, no habrá quien te supere, desde luego. Un señor conjuntazo en toda regla.

Seguimos con mostaza con este vestido asimétrico, estiloso y con una tela que no hace falta ni describirla, porque ya se ve. Espléndido, medio vestido, medio capa. Para chicas jóvenes que lo sepan llevar, colosal.

Y me reservo para mí (jajaja), el largo.

¡Oh la lá!  Ya estoy soñando… Porque no tengo ni la altura ni el cuerpo de esta chica. Sólo que soy morena, me van los moños y los aros de pendientes… pero me encantaría llevarlo, no os voy a engañar. No creo que me quedara mal… Ayyy, jajaja.

Y como estamos en la era de los Kimonos, os enseño esta joya de abrigo, que, desde luego, éste sí que no es para mí, pero para una fiesta o boda y para alguien alta y que le vaya este estilo, es otra maravilla. Yo es que soy más de lisos.

Pero mirad qué espalda y cómo sienta… He visto a chicas en revistas o en la televisión totalmente espectaculares con cosas similares.

El vestidito corto, tipo lady, para una chica joven con piernas infinitas, también queda de película para un día especial.

Todo es ponerse. No penséis que es para unas pocas privilegiadas. Se lo puede poner más gente de la que pensáis. Lo que pasa es que muchas no se atreven.  Si tenéis algún evento, probad y veréis…

También de flores, en verdes, precioso y ponible, el vestido Gipsy largo. Me encanta y como os digo, no requiere ningún evento. Con un abrigo o chaquetón camel más corto, queda ideal, como hippie… ¡Ideal!

Y si preferís corto, vuestros deseos son órdenes… Diseño especialísimo y vestido único de nuevo. En los complementos, está el secreto para que vayáis impecables.

Termino con los vestidos joya, que me chiflan pero reconozco que no son para mí… No me veo tan corta, aunque, como os digo, lo pueden hacer a medida y lo alargarían.

Éste, con terciopelo verde, es una monería, una coquetada y más. Lo veo más bien para mi hija en una boda, pero ideal, no puede ser más.

El midi, otra joya y valga la redundancia. Elegante, sofisticado, señorial… Lo tiene todo. Para una boda, Nochevieja, una fiesta… Para mil ocasiones y para  guardarlo como fondo de armario, desde luego.

Más invernal y en tonos marrones, éste otro, de nuevo espléndido. Fijaos en cada detalle… No tiene desperdicio, la verdad.

Ved la cantidad de modelazos que os estoy enseñando. Y a mí, con excepción de los estampados de flores azules, que no me van (hay gente que es todo lo contrario, claro), me chiflan todos y casi todos me atrevería a ponérmelos.

Termino con el conjunto de pantalón joya y la divina blusa blanca, exagerada a la par que extraordinaria.

¿Quién se atreve? Por favor, si alguien compra algo, que me mande una foto…

Será un placer ver que vais con gusto a cualquier momento importante de vuestra vida.

De Santander tenía que ser esta marca maravillosa y espléndida.

Como todo lo de allí… Como mis recuerdos, mi pasado, presente y espero, futuro.

Un beso resplandeciente