¡Menudo jueves!  Tenía pensado ir al mercadillo solidario que os dije ayer, pero con el día que he pasado con la muela, ¡imposible! Me ha dado una rabia espantosa, tenía muchísimas ganas de ir y, de paso, conocer marcas, ver a la gente… En fin, que no ha podido ser. Ya me enteraré de qué tal ha ido.

Además, hoy ha hecho un día malísimo, con lo cual, era un plan perfecto el  ir de compras y más si es por una buena causa. Podía haber hecho ya alguna compra navideña…

Como os digo siempre, este año voy retrasadísima en todo. A estas alturas, otras veces ya había comprado varios regalos. Luego, se junta todo y los últimos días, compras por comprar algo para que nadie se quede sin regalo.

Mi hermana desde hace días ya tiene comprado lo de mis hijos… Me pongo nerviosa sólo de pensar lo que me queda. Esta semana próxima os daré algunas ideas para regalitos monos, detalles…Os gustarán, seguro.

Y hoy os cuento cosas de Tutto Piccolo. Supongo que muchos ya conocéis la marca, y a mí este año me parece especialmente bonita. Tiene una colección enorme para poder elegir y para todos los gustos, ya que, además de los modelos clásicos, de colores de toda la vida, cómodos, elegantes, bien sean lisos, rayas o cuadros, me encuentro con un estallido de colores en unos looks más modernos y no menos bonitos. El rojo intenso, el amarillo brillante… Desde luego, al ver la colección, no me he quedado en absoluto indiferente, me ha conquistado.

Voy a intentar enseñaros lo que más me ha gustado, que ya sabéis que, como no me centre, puedo escribir mil folios. ¿Qué tenéis que decirme de éste look maravilloso y con un gusto de estremecer? Camisas de cuadros y blazers informales beige, ribeteadas en azul marino. De verdad, que cuando vi la foto, casi me desmayo. Sé que os parecerá exagerado, pero soy una clásica. Me alucinan éstos conjuntos. Estilo, clase, elegancia, gusto a raudales.

Un vestido chiflante es, sin duda, este rojo de punto con abertura de botones y cuello blanco tipo polo; con el detalle de bolsillo delantero. Sencillo pero que lo tiene todo. Me la imagino con el resto en marino y ¡buaaa!, lloro…

Siguiendo con los rojos, son divinos estos dos de lunares: el uno con pecherita de tres botones y volantito con los lunares al revés del vestido. Me parece divino. Y el

otro, en punto, es muy coquetón con su flor plantada. Por favor, los complementos en marino quedan de muerte.

Y el niño, con este conjunto informal y monísimo, a juego.

Igualmente monísimos, más informales también, son el vestido de punto de la niña y el jersey del niño, en rayas crudas, rojas y gris. Queda una combinación ideal y con los complementos en gris ni te cuento. Para cualquier día, van divinos.

Sigo ahora con un vestido gris y rojo, más arregladito, ideal, con sus pliegues en el escote y esas tres flores de lunares rojos y blancos.

 

¿No es espectacular? Me imagino a esta niña con una capa o abrigo rojo y ¡Navidad, Navidad, dulce Navidad…! Idóneo para esos días.

Otro especial, y con el jersey del niño a juego, es el vestido de tejido de tweed y tricot con tonalidades “Dusty Blue”. Me parece super elegante para cualquier día de fiesta. El niño va también monísimo con su camisa y pantalón. Todo a juego.

Lo mismo ocurre con este vestido de lunarones en azul marino y blanco ¡Cómo es! Con ese cuellito de pana y también super ad hoc para un día especial.

Y ¿para qué disimular mi pasión por éstos modelos de blazer y abrigo en marino? Me parecen de revista, no he visto a ningún niño así últimamente por la calle, lo que me lleva a pensar si seré rara, ya que yo se los hubiera

comprado de inmediato. Es de lo más bonito de la colección, y eso que me encanta casi todo, pero estos conjuntos son de morir. Vamos, que vas con estos dos niños por la calle y o te miran por rara, o te contratan de personal shopper, jajaja.

Bueno, os he dicho que éste año, Tutto Piccolo está sembrado: el vestido beige de lunares con volantes para

un día especial me parece exquisito, con su lazo gris… aunque sabéis que yo se lo pondría muchas más veces. Otra versión más para todos los días, y delicioso también, es el vestido crudo con motas irregulares en gris y camel. Tendencia total. ¡Qué estilazo, con su plumas beige! También lo tenéis coordinado para el niño.

Un vestido normal, desenfadado y estiloso es el de cuadrotes grises, azules y blancos. Me parece una monada, con todos los complementos en gris. Una versión

más chic es el otro de punto, con el volante en el escote de los mismos cuadros y el volante de abajo igual. Parisino total. ¡Ah! Y no os perdáis al niño con las bermudas en el mismo azul.

Para las más atrevidas, os dejo éstos conjuntos, en un amarillo reventón. El color de la temporada. El niño va clásico y monísimo. Es la niña quien se atreve con este look… que, desde luego, está monísima, pero, como digo, hay que tener mucho estilo y garbo para llevarlo.

Y os dejo con estos conjuntos de bebé, sobre los que no hay nada que explicar, sólo que van de bebotes comestibles. El jersey de ochos del bebé me priva y a la bebota dan ganas de darle un mordisco con su vestidito de punto. ¿ Sí o no?

Hay muchas más cosas y todas ideales, así que podéis ir echando un vistazo a su página web y veréis todo detallado.

¡Ayyy! Qué buen sabor de boca… ¡Qué ganas de comprar un conjuntito a alguien! Aprovechad, que cuando son adolescentes son insufribles y dices: ¿dónde están mis niños que iban cual primores? ¡Buaaaaaa!

Cada cual que decida, pero esta colección de Tutto Piccolo no tiene desperdicio.

Un beso entre clásico y moderno.