
¡Hola a todossss! ¿Qué tal el Ciber Monday y demás? Pues qué queréis que os diga. Yo, el sábado, estaba muy contenta por todas las super compras que había hecho, pero hoy tengo cargo de conciencia de la cantidad de cosas que compré al final.
Entre el “Black Friday”, que dura una semana y el Ciber Monday éste, al final, pues dices: “pero, si tiene un

25% y después me va a costar más en Navidad”… Y claro, van cayendo cosas…

Lo que os digo, ¿a quién le amarga un dulce? Lo cierto es que te ahorras bastante y adelantas compras navideñas, pero… ¡En números rojos voy a terminar el mes!

¡Hala! Como dice mi madre: “a patatas y anchoas el resto del año”.
Además, me ha llamado Juan al mediodía, para decirme que viene este fin de semana y que tenemos que ir “de compras”… ¡Alegríaaaa!
Bueno, espero que sean estos dos meses un poco alocados, porque, además, en mi familia somos casi todos Capricornio, de finales de diciembre y hasta mediados de enero,

Entonces, los regalos “tienen que ser mejores”, porque nadie tiene la culpa de nacer en plena Navidad”.

Pero si todos los años me pasa lo mismo. Lo que pasa es que se me debe de olvidar.
Eso sí, lo del “Black Friday”, nunca lo he aprovechado tanto como este año. De hecho, creo que el año pasado no compré nada. Lo compré todo sin descuento, jajaja.
Bueno, qué os voy a contar, si muchas estaréis igual o parecidas.
Son fechas de mucho gasto, muchas comilonas y mucho de todo.
Tenemos mil cosas en la cabeza, vamos.
Os voy a hablar hoy de ropa para adolescentes, porque muchas me lo pedís y siempre decís que no hay nada de nada, que son unas edades horribles, etc. “Antimilk” siempre nos lo pone fácil, con modelos estilosos, genial de precio y con los que las niñas están estupendas y monísimas y no con pinta de tener diez años más de los que tienen.

Como siempre, esta marca portuguesa, que cada vez es más conocida en España, nos propone conjuntos de dos piezas, vestidos, monos…. Ellas se sienten identificadas, se ven ideales y yo también.

No son vestidos choriceros ni ordinarios, nada vulgares. Son niñas que se están haciendo mayores, pero con estilo e inocencia.
Tampoco son vestidos o camisas opusinas, si es lo que pretendéis. A partir de los catorce o quince años, ellas ya no quieren eso y aunque a alguna le vaya ese estilo, no les pongáis muy rancias, que, como os digo, esta marca es cañera, pero llena de gusto y actual.

De ponerse mucho, muchísimo. Y como os digo, con precios fantásticos. ¿Qué más queremos?

Os enseño algo de su colección de invierno, donde veis, por ejemplo, este mono jaspeado en verde, que queda formidable. Con pantys, calzas y botines, lo teníais que ver… Todo, con un poco de buen gusto e imaginación, como os digo siempre.

También lo tenéis en mostaza, que es el color del invierno, sin duda, aunque yo no sigo mucho las modas. Prefiero el que mejor me siente a la cara y punto.

Jerseys oversize, como éste negro, con una raya amarilla que queda ideal con los pantalones de cuadritos en gris y negro. ¿No creéis?

Pantalones negros de lazo, con camiseta de terciopelo gris y pañoleta… Pues va monísima, con estilo. Un abrigo o chaquetón gris o negro y perfecta, de adolescente de primera.


¡No me las pongáis con vestiditos

rancios con estas edades! Por mucho que queramos alargar su infancia, ya es otro momento y como mejor van, son con estas cosas, de verdad.

Hay excepciones y vestidos maravillosos hasta para dieciséis años, pero sin ser vestidos de niña, con “algo” que hace que las veas ya de otra manera. Claro que hay. Sólo digo que, a la mayoría le gustan más estas propuestas de “Antimilk”.

Ideal también, la idea del pantalón de terciopelo gris con el top negro.
¡Con cualquier cosa de estas, puestas con gusto, van ideales!

Leggins de rayas, con blusa cruda y chaqueta negra. Otra monería.


Se ponen su gorra militar, boina o similar y niñas con estilo de hoy en día.

Monísimo, y más arreglado, este pantalón de abajo, bordado en negro con el top de terciopelo gris. Pensando en estas fiestas…

Me encantan con la parka de espiga, el jersey mostaza y el pantalón verde de polipiel. ¿No es un conjunto sensacional? ¡Y qué colores tan ideales!
No cabe duda de que saben perfectamente lo que les gusta a estas teenagers de nuestro corazón y nuestra vida…

Bárbara también la parka con el vestido verde de polipiel, lleno de gusto. Otra combinación

colosal. Bien sea con zapatos, botines, zapatillas. Lo que os digo: con buen gusto, todo se admite.

Otro que me chifla: el peto negro de rayas con la sudadera de pelo rosa. No me digáis que no está mona la niña…
Se puede combinar el peto con mil cosas e ir por separado, si es que no es delgada o no les convence junto.

Pero tal cual, a una niña normal, ni gordita ni delgadísima, le hace un tipo monísimo y un encanto increíble. Ya veis, la gorra, un cuello… De los complementos, ya se encargan ellas, no os preocupéis.

De nuevo, estilazo con estos pantalones de tirantes un tanto peculiares, ideales, con las camisetas Rock, ésta en gris, pero las hay de más colores.

La niña está divina. A mí me encanta este estilo para ellas. Sobre todo, para las que están más cerca de los dieciocho años.

También monísima la camiseta con los pantalones de polipiel grises con pata ancha. ¡Deliciosa esta niña! Actual, con buen gusto, ni ñoña ni hortera, que es de lo que se trata.

El peto vichy, de moda total, ideal también para las más pequeñas. Oscuro, pero con mil complementos que se pueden poner, dándole una nota de color. ¡Probad!

Monísimas como siempre (en esto, las portuguesas son expertas), las sudaderas con capucha, como ésta en gris antracita y shorts de polipiel o también la cruda, que a mí ya sabéis que más no me puede gustar.

Para una niña morenita de piel… ¡la bomba!
¿Y este jersey tan mono de rayas anchas en blanco y

negro? Chiflante, con esas mangas tan estilosas y el pantalón negro de polipiel. ¡Ojo! Con mini falda, también chipén.

Más modernito, el vestido malla brillo, asimétrico, ya lo veis… Lo lleva con pantys muy tupidos y botas, ¡Mezclas de nuestras adolescentes! Bufandón y a la calle…

Dadles el capricho, que con esta marca, es difícil equivocarse en estas edades.


El vestido lencero de terciopelo gris, se lleva muchísimo, bien para ir a la calle con mil cosas por encima (mi hija ha tenido su época lencera) o bien suelto, para estos días de Navidad, con una americana, también queda
de cine.

O el de terciopelo negro, mini y perfecto, sencillo por delante y con una espalda llena de encanto, en pico pronunciado y con una tira negra. A ellas les chifla. Y como

es muy cortito, con unas medias muy tupidas, les queda formidable.

El vestido verde de polipiel me gusta especialmente. Lo veo muy versátil y me chifla el color. Esta niña lo lleva con jersey negro por debajo, pero con camel o beige, estaría ideal también. O con chaqueta oversize por encima…

Jerseys básicos pero con algo, como éste jaspeado en color caldera, que combina con el pantalón de rayas gris y blancas…

Están requetemonas. ¿Sí o no?
Y también estilazo con la falda

larga gris, que lleva top a juego y por encima, un jersey beige. ¿No queda bien? ¿No está estilosa? ¡Pues claro que sí!

Miles de cosas más para ellas y otras marcas similares, de las que hablaré pronto.

Os dejo, que tengo mil cosas por hacer.
Otro día, más y mejor.
No se os olvide que esta marca la vende la tienda “Tonos”, de Burgos y que hacen envíos y lo que necesitéis.
Un beso a Lisboa, que visitaré en marzo con muchísimas ganas