
Y vuelta a la rutina. Yo, como siempre, encantada. Me gustan mucho las fiestas pero la rutina casi me gusta más.
Además, en esta casa, aún no han terminado, porque hoy es el cumpleaños de Almudena y el día 10, el de mi marido…

Os digo que nos hemos puesto todos de acuerdo para nacer en esta época del año.

Pasaron los Reyes, las comilonas, regalos y demás. Este año parece que he acertado con todos, lo cual no creáis que es tarea fácil en mi casa… Que mi madre esté sin un solo vale en el billetero es casi un milagro divino. Así que, encantada.

Ayer fuimos únicamente a cambiar unas zapatillas por una talla menos y yo aproveché las rebajas y me compré un vestido ideal. No lo necesitaba, pero…¡Fue un flechazo!

Pues ahora tocan las rebajas. A mí me admira la gente que deja todo para rebajas y se hace con cosas estupendas a la mitad de precio. Yo nunca he podido evitar comprar cuando más caro está.

Cuando veo a alguna amiga o conocida con unos zapatos ideales y me dicen que les ha costado “tanto”, digo: “pero seré tonta”…. Pero una y otra vez hago lo mismo.
Y digo zapatos, porque cada vez, como os he dicho muchas veces, doy más importancia al calzado.

Unos zapatos buenos y bonitos dicen mucho de la persona. Al igual que un buen bolso o complementos.
Hacen que cualquier modelito sea mucho más bonito.
¿No estáis de acuerdo?
¡Seguro que sí!
Así que hoy nos vamos de rebajas con Puntapié: una zapatería infantil, donde encontraréis las mejores marcas, a precios de fábula. Me encanta porque tiene una inmensa variedad de calzado, desde bebés hasta tallas para adultos en muchos casos.

También me gusta, porque siempre tiene algo mono y asequible en plena temporada. Es decir, una tienda completísima, porque, además de zapatos, botas y demás, tiene ropa de marcas buenas para nuestros hijos.

Me voy a centrar ahora en las rebajas de invierno, que son de muerte, aunque si entráis en su página web, podréis ver también maravillas de primavera-verano, para gente previsora.
No faltan nunca en Puntapié, las clásicas botitas de bebé, estilo inglés, como éstas: de ante de primera calidad, pala picada y el detalle de las borlas en los cordones. ¡Me chiflan! Son de la marca Eli, siempre un acierto y con la suela de goma, me parecen divinas para los primeros pasos de los más pequeños.


Al igual que estas otras en ante camel, también con borlas de ante. ¡Cómo me gusta este estilo de toda la vida!

También para bebotes, monísimas, más arregladitas, estas botitas combinadas en ante y charol. Las tenéis en camel o en verde botella. Eso sí, ya los últimos números, a unos precios fascinantes.
Te solucionan el resto del invierno en un pis pás. Y con un gusto exquisito, claro.

Para niñas, las clásicas merceditas de bebé, disponibles en azul Francia y burdeos.
Dos colores bárbaros para invierno. De napa de gran calidad y festón en ante. Para vestidos, lo más bonito.

Y también, los inglesitos, que nunca han faltado en mi casa. Eran imprescindibles. De ante, forrados en piel y suela de goma. Para ir arregladitas, son divinos. Ya veis también, en varios colores. Si tienes suerte, haces una compra de fábula y la niña va como un sol.

¡Mira qué es fácil ir con zapatos bonitos y cómo se complica la gente con cosas realmente insufribles para la vista!

Además, algunas cuestan un Congo belga… Yo no los puedo ni mirar. Siempre pienso que dónde estaría su madre, cuando Dios repartió el buen gusto.

En fin… si ellas están contentas y piensan que sus polluelos van divinos de la muerte, pues ya está. ¿Para qué me voy a preocupar yo? Pero es que me da una pena verlos con tan mal gusto calzados, que no lo puedo evitar.
Ideales las Merceditas Parisittas, para mayorcitas. Para ir arregladas, divinas. Quedan pocos números, pero probad, las hay en 7 colores y podéis tener suerte.


Me parecen maravillosas: el diseño, la calidad, todo. Para vestidos, lo mejor. De charol y ante combinados, forradas en piel y con suela de goma flexible. ¡Una maravilla!

También muy pocas tallas en estas botas estilo montaña, unisex. ¡Me encantan! Ideales para ahora, súper ponibles y prácticas. De un color mostaza precioso, de ante y suela de goma, con cordón cruzado y lengüeta de una pieza.

¿Y qué me decís de los preciosos botines mohicanos? En marino y gris, divinos para niñas mayorcitas. Desde luego, mi hija los tiene y se los pone muchísimo.

Hay hasta la talla 38. Si tenéis suerte, un bombazo. A mí me costaron el doble.

Las niñas van como locas con ellos, les encanta y nosotras también, así que, todos contentos. Quedan ideales con pantalones, shorts e incluso con alguna falda cortita y calzas, si te las sabes poner con estilo.
Dos tipos de botas que me privan para el frío de sitios, que, como en mi querido Burgos, nunca sobran. Unas son las botas esquimal, de piel de primera calidad y forradas enteras de borreguito con suela de goma. Se quedan a un precio estupendo y me parecen preciosas. ¿Qué os parecen?

Las del Sur diréis que qué exageración, pero creédme que no es así. En Burgos y otros muchos sitios, das la vuelta de una esquina y te puedes quedar instantáneamente helado, como una estatua. Es un frío seco, que se mete en el cuerpo, difícil de describir si no lo has vivido…

Y otras que me pirran son éstas, unisex, de piel engrasada y forro completo de pelo natural. Me encanta su estilo inglés y su estilazo en general… ¡Poquísimas tallas ya!

Las botas Panama Thousand, divinas, con clase, siempre me han encantado. En camel y en chocolate, me privan los dos colores.

Sabes que tu hijo va abrigado y elegante. Estas botas nunca fallan, siempre es acierto seguro. Y lo que duran…

Súper apropiadas y también estilosísimas para estos meses, el botín de la marca Eli, en ante gris. Ideal su estilo inglés de nuevo y su pala picada. Forrado en piel y cierre con cremallera. Además, comodísimas.

El estilo inglés (cómo me puede gustar tanto), lo vemos de nuevo en estos preciosos blucher de niña mayorcita.
Los negros, de la marca Eli, son una maravilla. De ante y charol combinado. Exquisitos y estilosos como nada. Ponibles, preciosos, con clase. ¡Increíbles!
Y los grises, también marcando elegancia. ¡Cómo me gustaría saber andar con planos! Me parecen divinos. De nuevo con clasón. Hay (o había desde el número 30 al 39). ¿No os requetechiflan?


Impresionantes para los looks más urbanos y para mayores, los blucher en marino oscuro que veis aquí arriba. De charol y glitter y forrados en piel. ¡Un lujazo! Me encanta su pala decorada con lengüeta y hebilla.

Tanto con pantalones, como con falda, quedan de cine. ¡Ayyy, lo que me gustan los zapatos bonitos!
Coquetones como nada, estos otros, de charol y en dos colores: camel y rosa viejo. Del número 26 al 36, forrados en piel y con suela de goma antideslizante.

El detalle coquetón lo remata el lazo de terciopelo. Un capricho que ahora te puedes permitir, ya que se quedan con un precio bárbarooooo.
Para niños, de lo más bonito, además de las botas y botitas que os he enseñado, son los mocasines. De cualquier estilo, pero mocasines.

Como éstos de bebé, en burdeos o chocolate, de ante, con suela de goma y comodísimos para los niños que empiezan a andar. ¡Me privan!

O super prácticos, estos otros, también de ante, pero con cierre de velcro y suela de goma. También comodísimos y prácticos. En tres colores.

Ideales para mayores, los mocasines Chico, en color chocolate, que me pirra, de piel de primerísima calidad, forro en piel y suela de goma. El talón, decorado con tacos, tipo los Tod´s.

Pues qué queréis que os diga… para mí, un niño con estos zapatos, ya dice mucho, pero mucho.
O estos otros, los mocasines Driver de la marca Eli, de la que deben quedar tres números… pero si os coincide ¡Cómo son!

Una maravilla en ante marrón chocolate, con piso driver y forro en piel. El detalle en la pala de la banda bicolor y estribo metálico, no me puede gustar más. Ni menos. Lo veo perfecto. También perfectos los grises y marino.

La elegancia se repite en estos otros mocasines, también de ante chocolate, con detalle en la lengüeta de lazo metalizado platino. De una calidad indiscutible. ¡Un caprichazo para ir como un Dandy!

Y ¡cómo no! Las famosísimas pascualas sin las cuáles ya muchas madres no pueden vivir…

Unas, en charol y ante, con suela de vestir en goma antideslizante. Detalle coquetón de borlas en el lateral y cremallera para facilitar la entrada y salida del pie. Lazo de raso. ¿Qué, cómo las veis? Sé de alguna que este invierno las tiene en todos los colores…

Y estas otras, monísimas, de ante y forradas en piel. Cordones con lazo de terciopelo y otros de algodón de repuesto. En 3 colores deliciosos.

Perfectas para cualquier ocasión, las botas de serraje, en 4 colores y forradas en piel con suela de goma. Me encantan, porque son sencillas y estilosas.

Las llamadas “pisacacas” pero de calidad. Mis hijos las han tenido y las tienen.

Otros botines que han chiflado son los Glitter: en 3 colores, con pala en ante y trasera en glitter. Forro en piel y lazo de terciopelo. Arregladitas, pero muy ponibles. Ideales con pantalón y con falda para niñas estilosas, incluso con algunos vestidos.

Si tienes una niña con personalidad y estilo, no lo dudes, incluso para nosotras, ideales. ¡Pena de no llevar planos! Cada día me gustan más…

Como os podéis imaginar, sigue el surtido en la zapatería Puntapié, pero tengo que terminar.

Podéis ver todo lo que tiene haciendo click en zapatos infantiles y veréis las magníficas rebajas; y para las previsoras, precioso calzado de oportunidad para la temporada de primavera-verano. Algunas cosas las compraría ya mismo, porque vienen idénticas, pero el doble de caras.

Ya sabéis, cuando dudéis sobre qué tipo de calzado poner a vuestros hijos, mirad primero aquí. Ya veis la gran variedad que tiene. No la perdáis de vista…
Un beso sin traspiés