
Seguimos con el fin de Año… ¡Harta estoy de comilonas y aún faltan! Además, estos días, que vamos de compras, también estamos comiendo fuera, así que la báscula va a llorar cuando termine todo…
¿Tenéis ya lo de Reyes? Imagino que habrá de todo. A mí me faltan varias cosas aún, sobre todo las de mi marido, ya que, como voy con él, pues no se lo voy

a comprar, y encima quiere sorpresas. La sorpresa puede que sea gorda…

En fin, nos comeremos las uvas, si Dios quiere (yo nunca me las como, tarea imposible), y ya estaremos en 2017.
Y ¿sabéis lo que pasa desde ese mismo instante? Que todas las que tenéis bautizos, comuniones, bodas y demás eventos, os empezáis a poner nerviosas (muchas ya lo estáis, a juzgar por vuestros mensajes) y a pedirme que hable de todo esto.

Así que, hoy os voy a hacer caso. Vamos a hablar de Comunión de niña. ¡Qué raro! Sí, tenéis razón, los niños tienen menos y por cierto, casi todo más feo, con algunas excepciones.
Pero no os preocupéis, que algo siempre es idóneo para vuestros hijos y lo encontraremos.

“Petritas” es nuestra protagonista hoy. Primero, porque me chifla la sencillez. Segundo, porque los precios están fenomenal y casi nadie está para tirar la casa por la ventana. Tercero, porque tiene un estilo clásico, normal, romántico y de niña que me encanta. Cuarto, porque las niñas no tienen que dejar de ser ellas ese día, y con estos vestidos van divinas y no disfrazadas y Quinto, porque a mí me gusta y escribo de lo que me gusta, aunque a veces, escribo también de lo que me pedís y doy mi opinión.

Prefiero mil veces estos vestidos que os voy a enseñar a esos, de los que no me cabe la más mínima duda de que son obras de arte, derroche de imaginación, vuelos asimétricos, tocados imposibles, botas, etc… pero con los que las veo más para una revista que para hacer la Primera Comunión.

Que los hay muy bonitos ¿eh? Y sobre todo, si tienes varias niñas en la familia y los aprovechas, pues bienvenido sea, pero es que ni por esas lo veo, ya que, cuando le toca hacer la Comunión a la siguiente, a lo mejor, el vestido ya está pasado de moda, además del dineral que suelen costar.


En fin, os enseñaré de todo. Pero esta es mi opinión. Y cuando hable de ellas, lo siento si a alguna marca le sienta mal, pero ya os he dicho mil veces que no me considero una bloguera que dice que todo es bonito, porque sería mentira. Intento ser crítica y es lo que me gusta hacer.

Bueno, pues ya estáis viendo algunos de los vestidos clásicos que siempre tiene Petritas, vestidos llenos de encanto, con jaretas, de manga corta, larga, con encajes sutiles, lorzas, etc.

Tampoco ningún extravagante tocado ni sombrero en el pelo. Todos delicados, coronitas básicamente.

A mí me chiflan algunos tocados que son soberbios, pero, como siempre os digo, depende de la niña. ¡Muchísimo depende de la niña!
No cualquiera lleva con aplomo y seguridad muchas de esas cosas. Lo mejor es que sean ellas mismas y se sientan cómodas, además de ir monísimas.

Uno de los clásicos de Petritas que me vuelve loca es el Vestido clásico con jaretas anchas. Tejido plisado en blanco, como veis, y una lazada sencilla, del color que queráis, en este caso, entero blanco. Un tocado en el recogido o coronita y bailarinas como todo adorno. ¡Y cómo va la niña!

Para mi gusto, de revista, sin necesidad de “tanta cosa superpuesta”. Sencillez ante todo. Divina.
Y miradlo con la lazada rosa. Manga francesa y con can can, para darle más vuelo y forma.

Otro de siempre de Petritas, que jamás pasará de moda (una ventaja increíble), es el Vestido “canutillo mini blanco”, también plisado y de manga francesa. De nuevo, lazada en el color que quieras, si bien tal como va la niña, incluida la coronita en blanco y bailarinas doradas, me chifla.

Lo mismo que el Vestido “canutillo mini beige”, según os guste más uno u otro tono. Aquí, con la banda verde, le das un toque diferente. Con la coronita verde de la marca, sensacional. Y otra vez original.

Entre los nuevos que tiene este año, hay verdaderas joyas. No sé cómo hay gente que se complica tanto y me pregunta cosas inverosímiles: sombreros, guantes, limosneras, canotiers, botas… En fin, con lo bonito que es lo bonito, jajaja.

El Vestido Tul bordado alas es bárbaro. Sencillo, pero más “rico y jugoso”. De sarga y tul bordado, no deja de ser sencillo. La lazada no va incluida pero os la recomiendo de tul, tal y como lo lleva la niña. Queda impresionante. También con can can.
Ya veis los detalles. Una niña con un vestido de impresión, pero vestida de niña.¡Fetén!

De fábula el Vestido beige manga campana de tul plumetti. Lleva incluida la lazada de tul plumetti también. Para las que lo prefiráis blanco, informaos, ya que existe la posibilidad.

No me digáis que no es fantástico, de crep y tul bordado… No es un vestido corriente, es una maravilla, pero de nuevo, sin llamar demasiado la atención el vestido, sino la niña con el vestido, que es diferente.


Otro precioso: el Vestido “plumetti beige más tul en cuellos y puños”. Fijaos que el tul es muy sutil: un toque en el cuello, que queda ideal y otro en los puños, nada de tules por todos lados.
Romántico, también para poner can can y lazada de tul, que no está incluida. Con un recogido sencillo o melena con coronita, preciosa.
Las bailarinas de la marca también son sencillas, cómodas, divinas. Las tenéis más blanditas, las típicas con cordones, en varios colores o

un poco más sofisticadas, dentro de un orden, con lazadas.
Depende de los complementos que lleve en el pelo y de cómo sea la banda, le irán más unas u otras. Si queréis sencillez total, las de cordones. Pero las otras son de cuento…
Llega uno de mis favoritos…¡Cómo es, por Dios!

En plumetti beige de manga corta con volantes verticales. Va forrado entero y os recomiendo, que al tener un poco más de adorno, por los volantes, elijáis la lazada tal cuál la lleva, en tono champagne, que lo hace armonioso del todo.

La corona, también perfecta. Me chiflan las manguitas como alitas y el volante en el bajo. El vestido habla por sí sólo, ¿no os parece? Lo veo insuperable…

Esto sí que es una niña mona de Comunión y no esas otras que se disfrazan para ese día. ¡Craso error! Pasa como con las Novias. El día de la boda, se cambian el peinado, se maquillan diferente… y no es por nada, pero es el día que más feas están (algunas, no todas, claro). Hay que ir con tu estilo, como tú eres, con tu personalidad y no dejarte llevar por las últimas tendencias si no te van.

Otro sensacional: el Vestido de plumetti blanco con escote en la espalda. Fijaos qué maravilla de escote redondeado y qué volante tan coquetón. ¡Una monería auténtica!

Chiflante la lazada en ese rosa, aunque la podéis elegir en cualquier color, ya lo sabéis. El mismo volante en el escote, ya que el de la espalda es continuación de éste y absoluta sencillez. Un recogido mono, una coronita y a comerse el mundo…


Yo veo a una niña así y me fijo en ella, en cómo lleva el vestido, en todo. Si veo a otras que, como os digo, se transforman ese día en alguien que no son ellas, sólo veo el vestido y los complementos. Lo demás me da igual.
Como os he dicho, siempre hay excepciones. Niñas que están preciosas con cosas originales, llamativas, incluso atrevidas. Pero creédme que son las menos. Os hablaré de miles de estilos.

Por último, menos sencillo pero igualmente espectacular, el Vestido puntilla tul en el hombro. Ya lo veis. El tejido es de sarga y tul bordado. El resultado es cañón.
Con lazadota de tul bordado, rematas la maravilla. Y el can can, le dará el último toque para que todo el mundo se quede con la boca abierta.

Os repito que, en Petritas también encontraréis las bailarinas más monas para estos vestidos, propias para esos días, sencillas, de niña y no de cabaretera (uyyy, como estoy hoy…).


Y también tienen coronitas, en varios tonos, como os he ido enseñando. Todo sin pizca de cursilería ni recargamiento. Nada de nada. Imposible ver algo fuera de su sitio. Todo es pura armonía.


Hablaremos de muchos tipos de vestidos, pero cualquiera que elija Petritas, hará una elección perfecta. Hay muy pocas niñas (no puedo pensar en quién) a las que no les vaya este estilo.
Más bien, a las que no les va es a muchas madres, que quieren dar el golpe y ¡Vaya si lo dan!
Bueno, que parece que estoy un poco guerrera, pero no aguanto a las que van de originales y las llevan hechas un cuadro.
No lo ven, se dejan aconsejar y no sabéis qué pena me da ver a las niñas disfrazadas. Lo siento, porque sé que alguna diseñadora está molesta, pero aquí escribo yo y doy mi opinión. No hay más.
Un beso a mi manera.
Donde puedo comprar estos vestidos
Jessica, no sé si habrá punto de venta en tu ciudad o localidad, pero ellas tienen venta on line. Busca en google Petritas y te sale su web con sus modelos. Sólo tienes que introducir las medidas y te lo hacen. ¡Muchas gracias!
Es justo mi estilo, y tengo la suerte de que a mi hija le encante, así que ira preciosa, sencilla y estilosa.
besos,