Después de este puente en Madrid, qué perezón empezar la semana… Eso es lo malo de estar en las vísperas del puente. Que, de repente ¡Zas! Ya es lunes otra vez. ¡Qué os voy a decir que no sepáis!
No hemos hecho nada especial. He ordenado un poco los armarios (un poco), ya que siguen cosas de verano por todos lados.
La verdad es que aún no he necesitado nada de abrigo. El otro día salí con una capa, porque vi a la gente muy abrigada por la ventana y claro, volví con la capa en la mano. ¡Soy un caso!
Veo abrigos ideales pero sé que no me los voy a poner mucho y los que me gustan son carísimos. ¿Para qué? Si tengo algunos nuevos y ya casi pasaditos de moda de Burgos que se quedarán sin poner…
La verdad es que sigo con la mentalidad de Burgos a la hora de vestir.
No concibo salir en vaqueros y zapatillas, como la mayoría de la gente que veo a diario. Primero, porque nunca he ido así, y segundo, porque no sé andar con zapatos planos, que ya me gustaría, porque hay zapatos divinos.
Pero no. Y claro, cuando voy a la compra al lado de casa, pues parece que estoy un poco fuera de lugar. Me da igual. No paso por ir con leggins y zapatillas. ¡Me niego!
Mañana, a ver si retomo mis clases de zumba, que ya va siendo hora.
Ahí es cuando me pondré las zapatillas. Cada cosa para lo que es.
Y eso que hay zapatillas de
“vestir”, que a algunas chicas (las menos), les quedan estilosísimas ¡A mi amiga Adela, por ejemplo!
En fin, ahora me estoy preparando para darme una ducha, porque hoy no hemos salido en todo el día y ahora mismito vuelvo.
Bueno, pues no volví, porque me lié haciendo cosas y hoy he amanecido con un dolor de estómago horrible y con náuseas.
Espero que no sea de nuevo el maldito virus, porque se ha propuesto no dejarnos en paz, está claro.
Hablamos hoy de una marca que me tiene totalmente idiotizada, enamorada y extasiada: By Niné. Cada temporada, espero con avidez el momento en el que sacan la colección y cada vez me gusta más.
Ropa sin adornos, sin volúmenes imposibles, con estilazo, detalles, una frescura y unos diseños que parecen fáciles, pero no lo son. ¡Hay que ponerse en el lugar de Silvia para conseguir unos resultados así de excepcionales!
Ropa que nos demuestra que el buen gusto y la exquisitez no necesitan fortunas para comprarlas.
Un poco de imaginación, unos complementos de diez, combinaciones con maestría y ¡Listo! Una súper colección que han sacado de nuevo.
A todo ello, le añadimos las niñas que posan para el catálogo (para todo hay que saber), las poses, la gracia con la que lo hacen y unas fotografías de impresión y no puede haber más resultado que el que veis: supercalifragilístico.
Os llevo hablando varios días de marcas de este estilo: ni moderna, ni clásica en exceso, estilosa, fresca, con gusto, etc.
Pero creo que “ By Niné” se lleva la palma. Ha elegido a las niñas más impresionantes que pueden existir, la ropa es deliciosa y al ver toda la colección, hace que me vuelva una y otra vez a verlas, a fijarme en los detalles, cómo posan, cómo lo hacen.
¡Silvia, que entiende que los catálogos, para que entren por los ojos, tienen que ser así!
Que os lo digo mil veces, que no me vale que se coja a la primera niña conocida y se le plante esta ropa, que noooo…
¿Cuántas veces lo digo? Yo me
compro ropa y la veo puesta en chicas espectaculares, no en chicas vulgares y corrientes. Eso se llama ser modelo publicitario. Y, aunque la colección es bárbara “per se”, el vérselo puesto a estas bellezas, hace mucho.
Después, cada una se imagina a su niña con ello y más o menos, sabe qué es lo que más y lo que menos le puede gustar o sentar bien, peor, etc.
Desde luego, yo ya he fichado un par de modelos para las niñas de mi prima Elena (que es como si fuera mi hermana).
Son morenazas y monísimas, al revés que casi todas las del catálogo. Y es que las rubias lucen muchísimo pero donde haya una morena guapa…
En fin, estoy imbuida por el espíritu
de esta marca y me pierdo entre sus deliciosos vestidos, pichis, pantalones, blusones…
Han tenido el acierto de confeccionar para bebés, niñas y jovencitas. ¡Y a ver si hacen para nosotras, que yo algo picaría, desde luego! ¡Qué maravillas!
Hay un trabajazo increíble detrás de esta colección. Cualquiera lo puede ver. El entorno, las flores, los objetos que se escogen con cuidado
para cada una, los complementos, en fin, un montón de cosas.
Y además de Silvia, mis felicitaciones más grandes para el fotógrafo, que mejor no lo ha podido hacer. Ha plasmado una colección de niñas que todas querríamos tener en nuestra casa.
¿Sí o no? ¡Por Dios! Yo me traería a unas cuántas…
¿Cómo es el vestido Cigüeña? Por sus colores, uno de mis favoritos. De cuadros escoceses con capucha, no me puede chiflar más.
La cremallera delantera, con un jersey de cuello alto por dentro, una gorra, botas con calzas… ¿Veis? Todo cuenta. Si se lo ponéis sin nada y, por ejemplo, con medias caladas camel, puede resultar una auténtica catástrofe.
Yo os recomendaría, si compráis, que hagáis caso a cómo van exactamente las niñas o lo más parecidas posible, ya que no todo el mundo tiene el gusto innato de Silvia para combinar las cosas.
El vestido Delfín, en rosa de neopreno, original y precioso también. Otro estilo, con goma en la cintura y capucha. ¡Estilosísimo!
No se te olvide combinarlo bien. ¡Merece tanto la pena!
Todos son increíbles y escribiría un libro entero, así que voy a intentar resumir y al menos, dejaros la mayor cantidad de fotos posibles.
El vestido Ganso es un pichi sencillo, pero lleno de clase, con garbo si se sabe llevar con los complementos adecuados.
Además, lo encontraréis tanto en niñas como en jovencitas.
De color piedra, con la capucha y cremallera metálica, otro bombón.
Y ¿qué os digo del vestido Gallina? Ya lo veis y ya veis a la niña. Un vestido colosal (me pirran los vestidos con lazada), en georgette rojo oscuro y museta cuadrada.
Me parece súper elegante, además de estiloso. ¡Me pirraaaa! ¿Será uno de mis elegidos? ¡Ayyyy, esta Silvia me mataaa!
De pana morada y abierto por delante con botones, bolsillos y como contraste, unos delicados cuellos y puños de encaje, el vestido Jirafa.
Yo no soy muy de morado, pero viendo a la niña, pues soy de todo. De lo que me pongan delante. Porque siempre dan en el clavo. Es un vestido lleno de encanto, original y precioso.
¿Cómo lo vais viendo? ¿Como yo? Entonces, estáis perdidas, jajaja.
Divino el vestido Leopardo, de gabardina negra con corte en la cintura y cuellos y puños de encaje hueso… ¡Uhmmmm! Otra delicia auténtica.
Sensacional para estas Navidades. Que no todo tiene que ser rojo.
Hay madres que le tienen fobia al rojo, por lo que sea. Yo tengo una amiga que dice que su hija está horrible de rojo. Y es verdad que le favorecen más otros colores.
Precioso el vestido Oca con el cuerpo de rayas negras y beige y falda de gabardina negra con lazada negra de terciopelo en la cintura.
¡Otro lleno de estilazo! Las que no queréis saber nada del negro, con esta marca, vais a tener que cambiar radicalmente de opinión.
Yo, hace mucho que lo hice. Porque algunas niñas están tan absolutamente divinas de negro, que me rendí ante la evidencia.
Otro, súper especial y que lo presentan como para Arras, es el vestido Rana, en georgette rosa viejo semilargo con museta cuadrada en el pecho y volante en el bajo largo.
El vestido no puede ser más exquisito. Y si es para una boda (lo veo para una boda del Sur, con día soleado), un ramillete de niñas con este vestido y una cesta de flores en la mano, pueden ocasionar estragos.
Pero fijaos que yo también y depende de para qué niñas, lo pondría cualquier otro día. Es tan sumamente especial, que yo me hubiera atrevido con Almudena, fijo.
Pichis excepcionalmente estilosos, como el Marmota. Tan sencillo como una falda con peto de gabardina con bolsillos.
Le pones una camiseta o
jersey por debajo y ya veis el resultado. ¡Cañonazo al canto!
Ni más ni menos. Qué decir de los zuecos que lleva el bellezón y que se llevan tanto. ¡Va a ser mi regalo estrella de esta Navidad!
La falda Puma, de talle alto y los cuadros escoceses que ya hemos visto antes, preciosa, con las gomillas en la cintura y tirantes.
Estos tonos me vuelven loca, así que no soy muy objetiva. Para rubias, morenas, castañas y lo que se tercie.
Alegre y vistosa, la falda Koala, en tela arrugada verde botella, evasé y con volantes en los tirantes y bolsillos.
¿Qué? ¿Os imagináis a vuestras niñas con ella? Pues preparaos, que para elegir, lo vais a tener difícil, dificilísimo.
Chiflante la falda Toro, en punto fresa oscuro (qué tono tan divino) y un estampado de garzas realmente bonito.
Le queda sensacional a esta niña por supuesto, pero lo veo para muchas. Estarán sencillas y de escándalo.
Ya veis: con blusa blanca de lazada, una gorra… En fin, mucho gusto y mucha imaginación. Con un chaquetón negro, la bomba. ¡Ojo! O burdeos, que también le iría ideal.
Los monos no pueden faltar jamas en esta firma. El mono Burro, sencillísimo y me parece la cosa más bonita que he visto hace tiempo. ¿Cómo lo hacen? ¡Qué arte hay en San Fernando de Cádiz, Dios mío…!
De punto fino en gris marengo con volante en la museta y tirantes, la niña no puede estar más espléndida. Con blusa o jersey por debajo, me parece una delicatessen.
Lo mismo que el Oveja, de gabardina negra con volante
en museta y tirantes. Digo exactamente lo mismo. ¿Os vais a resistir? ¡Yo no puedo!
Y con el pantalón Lobo, me terminan de matar. De pata ancha, elegante y estiloso como nada, de punto fino gris con tirantes y un jersey de la marca por debajo.
¿Será que la niña tiene el pelo idéntico a Almudena? ¡Ayyy! Donde se quedaron esos tiempos en los que la gente nos paraba por la calle…
Igual de bonito que el resto, sus blusones, que podéis ver en la web y que van como anillo al dedo para cualquiera de sus faldas y pantalones o sus jerseys, que no pueden tener más encanto.
El Antílope, mi favorito, fino, evasé , en gris claro y beige es una delicia. No puede ir mejor con todo lo gris y negro.
El jersey Águila, también fino y evasé, delicioso, con corte lateral en fresa oscuro y gris. También idóneo para gris, negro…
O el Caracol, bicolor, en gris y verde. ¿Con cuál os quedáis? ¡Esto es una auténtica faena! El tener que elegir, digo… jajaja.
Voy con las mayorcitas, jovencitas o pavitas de nuestra casa. La mayoría tienen los mismos pichis, jerseys y blusones que las más pequeñas.
El blusón Cacatúa, ya me diréis cómo es de mágico: en georgete rosa viejo con museta en pico y volante. Mangas acampanadas divinas.
Ya veis que lo lleva con un mono gris. ¡Qué conjuntazo, por Dios! ¡Qué bombonazo!
Tampoco el blusón Flamenco, en verde, de tela arrugada, se
queda atrás. Ya lo veis. Un verde seco con lazada al cuello impresionante, de verdad.
Cuánta sencillez y virguerías a la vez. Sin necesidad de cosas recompuestas, ni tocados cursis, ni vuelos… ¡Ayyy, señor!
Fundamental para su armario, el
blusón Gato, en georgette blanco, ligeramente evasé, con manga acampanada y volantito en el hombro. ¡Me encantan las blusas blancas sencillas y bonitas!
Súper fundamental, tener una, la que queráis, que aquí, de eso, sobran.
También el Pingüino se las trae de preciosidad: en tela arrugada piedra y escote en pico con
volante, es el sumum de la elegancia en persona.
Bueno, veo que me lío y me lío y por mí, seguiría.
Hay unos vestidos preciosos para estas edades, como el Pelícano, de punto gris con goma en la cintura y lazada de rayas. Les marca el tipín que quieren todas a estas edades y es una monada.
También el vestido Elefante, de color piedra con capucha y bolsillos de canguro… ¡Estilazo total!
O el vestido Perro, en georgette azul plomo, evasé, con manga acampanada y volantito en el hombro.
La moda de las modas es llevarlo desenfadado como veis a la niña, con medias y zuecos o deportivas. ¡A la última! Si tienes estilo y gracia, el mundo es tuyo.
Con respecto a las mini top models de nuestras casas, os dejo fotos de las monerías que tienen para ellas. No perdáis comba, como yo, que pierdo la cabeza cada vez que hablo de esta marca.
Ya le he dicho a Silvia que me ofrezco para ser su representante, que no va a encontrar a nadie que lo venda mejor…
Desde mi blog, mando los catálogos y tranquilamente, las tiendas compran.
Como ya he hecho más veces con otras marcas.
¡Eso está hecho! Como churros se tiene que vender esta ropa.
Un beso a esa isla que tanto nos aporta en cuestión de moda infantil.