¡Tengo la cabeza como un bombo! Nunca había recibido tantos mensajes… ¿no estáis de vacaciones o qué? Jajaja.

Me da pena, porque a muchas no les he podido resolver la papeleta, ya que me preguntaban por

vestidos o conjuntos que había puesto en Facebook, pero para bodas en septiembre y, claro, los sitios en agosto (los hacían por encargo) están cerrados.

Ha habdo alguna que me ha dicho que no lo ha sabido hasta ahora y otras, por pereza… pues mira dónde lleva la pereza. ¡Con lo ideales que hubieran ido!

Hombre, me imagino que algo encontrarán. Pero es que no se puede tener tanta pachorra ¿eh? Os lo digo en serio.

Una cosa es lo de mi hija, que está pensando ya en qué se va a disfrazar en Carnavales y otra, esto. Siempre os digo que en el término medio está la virtud.

En fin… si que os pido que, sea como sea que vayan, me enviéis una foto. Me hace mucha ilusión…

Y hoy estaba un poco sin saber de qué hablaros, porque, como os dije, no me quiero adelantar y no os quiero hablar de la temporada de invierno ¡qué pereza!, aunque sea lo único que ya se ve en casi todas las marcas.

Pues no. Me niego. Dije que no y no. Entonces, he recurrido al eterno atemporal clásico de siempre, para el que se pueden encargar las cosas ahora, porque no entienden de temporadas: de nuevo los bebés.

Bueno, bebés y no tan bebés. La marca de la que os voy a hablar hace un poco de todo. Todo por encargo y todo monísimo, fundamentalmente de bebé, pero, ya os digo, que a veces, si les apetece, también para un poco más mayorcitos.

Pelote de laine: así se llama. Me encanta el nombre. Los que sabéis francés, habréis deducido enseguida que son fundamentalmente cosas de punto, pero también tiene otras cosas. Ya os he dicho que es una marca sorpresa. El punto que hacen es ideal, eso sí.

Ahora, además, está super de moda hacer punto. Por lo menos, en Burgos, han abierto dos tiendas de niños, que además, dan clases a las madres para hacer conjuntitos de punto. Es lo último de lo último. Mira, en eso, yo estoy muy avanzada, porque sé hacer punto desde que tenía 10 años o menos.

Sí, de verdad. Le di tanta guerra a mi madre porque quería vestir a mis muñecos y siempre la veía a ella (que dicho sea de paso, lo borda), que me enseñó y aprendí enseguida. Me encantó.

Les hice todo tipo de cosas y como el punto es como andar en bici, que una vez que aprendes, no se olvida, pues después, les hice todo tipo de chaquetitas a mis hijos. Monísimas, no es por nada.

Cada día me inventaba un modelo y no paraba hasta no terminarlo. Después, mi madre me bordaba los nidos de abeja y me quedaba de rechupete.

Ahora no hago nada de nada de ésto, no tengo ni un segundo. Pero reconozco que es un vicio y que me encanta.

Lo que pasa es que hay gente a la que no se le da y entonces, lo mejor es recurrir a sitios como éste del que os hablo hoy.

La responsable de esta marca ideal es Gloria, una vallisoletana, como mi abuela, que ya es abuela también. Y una abuela cañón, hiperactiva, como se define ella misma. Es arquitecto de profesión y ahora es cuando se puede dedicar más a lo que le gusta, que es ésto y más,  con la llegada de sus nietos. Ya véis que en Castilla y León también hay cosas ideales.¡ No va a ser todo gallego o andaluz!

Que conste que todo lo que os he enseñado de punto otros días, ha sido previamente revisado por mí (jajaja), porque si no, ni os lo enseño.

Hay algunas marcas que me han mandado cosas y ni de broma os recomiendo eso. Claro, les he dicho amablemente que no, gracias, que no eran de mi estilo…

Bueno, pues “Pelote de laine” es una auténtica monada en todo: en punto y no punto. Así que las que necesitéis conjuntitos y cosas monas, ya os podéis poner las pilas y que no os pase como a las de las bodas.

Os enseño las cositas que hacen: estos faldones básicos, pero monísimos y limpitos, con el cuerpito de punto, me encantan. Con capotita a juego, divinos.

Puede ser en el color que más te guste. Éste azulón de arriba es muy favorecedor y el tono frambuesa, igual. Los dos tienen un cuello ideal y llevan un remate de pata de gallo alrededor. Todo a mano. ¿Monísimos, no?

También igual en gris (más elegante y sobre todo para niños morenitos de piel), con la capotita y los patucos. ¡Ya me diréis cómo están hechos! Lo veo para un día especial. ¡Me priva!

Y otro divinísimo es éste, rosa asalmonado que me encantó desde que lo ví: es de perlé, de manga larga y lleva toda la falda con vainicas. La capota es deliciosa con esa lazadota y las merceditas… ya lo veis.

Lo veo de cuento. Y además, super ponible. Yo lo encargaba ya si tuviera destinataria… Asomarte al coche de capota y ver semejante bombón…¡Ayyy, me chifla!

Y ahora, un conjunto más que delicioso: este cubrepañal en un rosa empolvado divino, con camisita blanca de lorzas de manga larga y chaquetita a juego. Los puños asomándo, como es debido… y ¡no os perdáis las merceditas! Yo también le pondría capota a juego…¡Comestible!

Me parece de un gusto exquisito y para el Norte, divino de la muerte. Para el Sur también, pero lo digo por el calor…

La ranita tostada de manga corta, también de mis preferidas. Elegante, con clase y con un estampado suave para el cuello y el cuerpo. ¡Monísima!

Y superiores para el calorazo, las ranitas de punto bobo, con lacitos en los hombros y volantitos de flores en la pernera…¡Pocholada auténtica!

En los colores que queráis. Me chiflan para ir así, sin nada por debajo. ¡Ideales!

Os enseño en esta bebé, la chaqueta color topo y los patucos a juego: ya veis, ni larga, ni corta… todo en su talla. Me espantan los niños que llevan una o dos tallas más. ¡Fastidian el conjunto y es por comprarlo hecho! Claro, a esta niña ( Lola), se lo hizo su super abuela…

Hay unas ranitas veraniegas total que me encantan y no son de punto: son estas de flores, de tirantes y lacitos en los hombros y volantitos en el canesú y en las perneras. ¡Cómo son de monas, por Dios! ¡Me pido la cruda! Jajaja. Con merceditas y capota rosa… ¡fetén!

Otro conjunto que me ha conquistado: el de pololos de flores y capota a juego, con la chaquetita de punto. ¿No os parece ideal y alegre? Os lo enseño también por detrás para que lo veáis bien: la capotita con volantes… la niña tiene que estar de cine. Me la estoy imaginando ya. ¡Cómo me pueden a mí estas cosas!

Y por si tuviera una hermanita mayor, pues vestido en la misma tela, braguita, capota y la chaquetita. ¡Qué dos hermanas! ¿Sí o no? Bárbaras…

El pelele de rayas celeste, siempre clásico, bonito y elegante, para un niño, mejor.

Y éstos otros, más troteros, pero monísmos y alegres: la ranita estampada, con punto en el canesú, tirantes y bolsillitos, es una delicia. Para ir fresquita desde por la mañana, con un buen lazote en el pelo… ¡Coquetonaaaa! ¡Preciosotaaaa!

O este vestido, divino para más mayorcitas, de flores y con el cuerpo de punto en azulón. Añádele zapatitos azulones y lazo azulón en el pelo y ¡voilà! Cañonazo.

Y dulces y preciosos, los petos de punto, un poquito más gordos, pensando ya en el final del verano o para el otoño, con camisita por debajo… ¡Son requetechiflantes! Con sus botones de madera y en cualquier color… divinos.

Y como os he dicho que hacían un poco de todo, para muestra, un botón: bañadores. Fijaos en esta monada para niño y niña: los bañadores “Leonor”. Me chiflan. Cuadritos para él y arrugadito para ella. De éstos tuve en la tienda muchos y se vendían como churros…

Mirad la espalda con los tirantes cruzados, a juego del niño…¡Guauuauu!

O éstos otros de abajo, ambos de cuadritos… de niños pequeños y monos que me los como… Por Dios, qué cucada… Exquisitos.

Hacía mucho tiempo, desde que puse la tienda, que no los veía y me siguen encantando.

Hay más, pero os dejo con este ajuar de niña para la playa, que es una auténtica delicia: os dije que estas chicas dan para todo.

Ya lo veis: culetín de flores, toalla verde a juego con la inicial en las flores del culetín y las “chanclas” que parecen de juguete…

Me imagino que os habrá gustado. Si fuera yo, ya estaría encargando… ¡Dios mío, soy un caso perdido!

Encantada Gloria. Tú sigue con estas maravillas, que así podré seguir enseñándolas.

Para dejaros con buen sabor de boca, os enseño las cosas que hacen para invierno, como este conjunto divino de ranita azul, con blusita por dentro, a juego del gorro de aviador y chaqueta de punto gris gorda con cuello de piel.  Cómo es ¿eh?

Me voy a ordenar cosas e ideas, que más me vale…

Un beso de punto bobo (mi favorito)