¡Fin de fiesta!  Y justo coincide en domingo y semana de rutina por delante.

Me va a costar escribir, porque ya sabéis, que cuánto menos se hace, más te cuesta y más pereza da todo.

En fin, para unos habrán sido unas vacaciones inolvidables; otros ya sé que las odiáis… Yo he tenido un poco de ambas cosas.

Reconozco que cada vez me

gustan menos, pero también me hace ilusión el reencuentro con mi familia y los Reyes Magos, pensar si les van a gustar los regalos, etc.

Pero, repito: me alegro de que hayan pasado. Y mucho.

Ahora nos toca comer con moderación, hacer un poco de ejercicio… pues eso, volver a la rutina, que como os digo siempre, me gusta.

Mis clases de zumba me esperan… ¡qué ganas tengo!

Llegan las rebajas para quiénes sabéis aprovecharlas (yo nunca he sabido, no soy de comprar en rebajas, pero reconozco que hay maravillas suculentas para las que no se han gastado todo antes, jajaja) y bueno, es un mes bonito, la nieve, el frío…

El comienzo de un año nuevo lleno de propósitos e ilusiones, aunque luego no se cumplan…

Y quemada una etapa (la vida son etapas y pasan muyyyy rápido), llega otra, que no es ni más ni menos en cuestión de moda infantil, que la llegada de los eventos y Comuniones de la próxima primavera.

Tengo tantos mensajes, que no sé ni por dónde empezar. Las tiendas comienzan a recibir, o ya han recibido muchas, los vestidos y trajes de Comunión para las madres ansiosas que no pueden esperar.

¡No sabéis la de gente que ya tiene probados varios modelos!

A mí no me gusta todo con tanta antelación, pero vosotras mandáis…

Por eso, hoy, aunque, como os digo, estoy desentrenada, vamos a ello y

Hablamos de “Paqui Barroso”. Con más de treinta años de experiencia, nos sigue demostrando que la calidad, lo artesano y las cosas hechas con mimo y amor, gustan y mucho. Modelos exclusivos, tanto de Ceremonia como de Comunión, en su colección de 2018. Su estilo, clásico, siempre con innovaciones, claro, pero clásico, no falla. Sus preciosos vestidos, sin mucha rimbombancia, llenos de buen gusto, siguen enamorando por donde van.

Y es que su diseñadora, Inma (madre e hija forman un equipo de diez), ha apostado por el romanticismo, por las bandas, talles altos, manguitas de tul, mangas francesas, al codo… Para mí, todo esto, es sinónimo de clasicismo.

Ahora, tenéis la suerte de poder elegir entre un montón de marcas. Desde las más clásicas, de las que siempre hay firmes defensoras, hasta las más modernas, caras, baratas, con encanto, cursis, espantosas, de todo.

No me voy a detener en cada modelo. Sólo quiero que veáis su estilo y que lo tengáis en cuenta por si os toca Comunión este año.

Una de las ideas por las que ha apostado esta firma, es por llevar a la comulgante y a su hermana, hermanas o primas, vestidas igual, pero en corto.

Viéndolo, queda precioso, aunque yo prefiero diferenciarla más y que los hermanos vayan totalmente diferentes. En cualquier caso, sus vestidos de Ceremonia, son divinos para bodas y demás eventos.

Aquí veis a estas tres preciosidades de blanco níveo. El vestido de Comunión, chiflante, con esa banda en el talle alto, las puntillas y la lazada espléndidamente puesta. Que de ir como un churro a llevarla bien, va un abismo. Y ya veis a las acompañantes…¿No van monísimas?

Bárbaras también, éstas dos niñas con la banda verde agua, perfectamente hecha. Escotes en pico y vestidos que son un sueño.

Varias capas nada exageradas en el de Comunión, sin manga, perfecto para los sitios más calurosos.

Un color crudo precioso y banda en color suave pastel, lo más indicado para estos eventos.

Preciosos y elegantísimos los vestidos con la manga acampanada de tul bordado… En crudo, con

la banda de tul tostada, no me puede gustar más.

Las mangas, en crudo, son las auténticas protagonistas. Y cuidando el detalle, con la exquisita corona de flores en tonos rosas.

Ya veis, el de Ceremonia, también espectacular.¡Bombones!

Seguimos con esta tendencia, en los vestidos con manga al codo (unas mangas sensacionales).

El de Comunión, con escote cerrado en ondas y banda rosa palo, con el talle bien alto, como me gusta a mí. La niña de ceremonia lleva una joya de vestido, con lazote rosa central y mangas a juego de todo el vestido, que es un espectáculo verlo. ¡Y sin perifollos de ningún tipo!

Otra versión de Comunión y Ceremonia, en estos vestidos brocados, también preciosos, con banda rosa y talle alto.

¡Viva el buen gusto, los tejidos de siempre y lo bien hecho!

Otros dos vestidos colosales, en blanco, similares pero con diferente diseño.

De nuevo, las mangas protagonistas, cuajadas de encaje sencillo y perfecto. ¿Qué os parecen?

Las coronitas no muy grandes; que el vestido se lleve todo el protagonismo…

Y los vestidos de Ceremonia, como veis, todos en la misma línea, pero con variedades. Ya veis éstos de manga de tul de plumetti.

En uno, francesa y en el otro, manga tipo “alitas”, pero los dos formidables.  Los talles tan altos son tan bonitos… ¡Qué maravilla de telas! ¡Lo dicen todooo!

Para las que preferís colorido, tenéis éste en verde menta, con volantes, elegantísimo, sin mangas, con encaje crudo ribeteando cada volante y banda cruda con flor rosa en el talle alto. Al revés que su acompañante que lo lleva en crudo, sin volantes, con manga al codo y el talle alto con la banda en verde… Las coronas con flores rosas, les quedan muy bien, si bien admiten varios tipos de tocado. ¡Yo me quedo con el crudo, por supuesto!

Bueno, para abrir boca y empezar la temporada, creo que es suficiente.

Os iré enseñando marcas diferentes, clásicas y alguna moderna, porque me lo pedís, no porque me chiflen… si bien reconozco las dotes increíbles de algunas diseñadoras.

Y con este ramillete de niñas preciosas vestidas para llevar las Arras, o para ir a Comuniones, Bautizos o Bodas, como princesas llenas de buen gusto, os dejo por hoy.

¡Espero que empecéis la vuelta a la normalidad con buen humor y con muchas ganasss!

Un beso con miras a la primavera