
Hola a todassss… No, no he desaparecido. Muchas ya sabéis que no ha sido mi mejor Navidad, ni el mejor momento de mi vida, sino todo lo contrario. Pero bueno, aquí no voy a dar explicaciones de dramas, porque no es el sitio, ni el lugar.
Sólo agradeceros a todas los mensajes que me habéis enviado de apoyo y cariño. No sabéis cómo se agradecen.

En fin, la vida te va marcando lo que vives, lo que sientes, todo. Y no al revés. La vida manda. Así de claro. Así que, aprovechad cada momento al máximo, exprimidla, no os quejéis por tonterías, ni nada por el estilo, que después, te das cuenta de lo que realmente importa y lo que no.

Siempre parece que a ti no te va a tocar nada malo, que eso pasa a los demás… Eso creía yo. Pero no. Los palos llegan cuando menos te lo esperas, cuando más feliz estás.
Y por mucho que pienses el por qué, es inútil. Es algo que no entiende de condiciones, sexos, dinero, ni de nada. Tengo un año muy difícil por delante, pero no quiero perder la esperanza, por muy negro que lo vea.

Escribo hoy por primera vez en el año, gracias a todos los que me dais fuerzas para hacerlo: a mi marido, a mi hijo Juan y a todas las que me habéis escrito, como os he dicho.

Es lo que me gusta y aunque no podré hacerlo con tanta asiduidad, no lo quiero dejar porque es lo que realmente me apasiona, me llena y me encanta todo lo que me decís.
Empiezo, además, a lo grande, con una marca de la que ya os he hablado otras veces y que cada vez está más presente en el mundo de la moda infantil: “Artesanía María Luisa”. Especializada en los camisones, pijamas, batas y detalles más impresionantes para niños que hacen la Primera Comunión; llenos de detalles, exquisitos, dignos del día tan importante que viven los niños ese día.

Un regalo perfecto para cualquiera: madrinas, tías, madres de amigas, etc. Como os he dicho miles de veces, es uno de mis regalos estrella y siempre lo será.

Mi madre me hizo el mío, de plumetti blanco, crochet y grandes lazotes de raso que guardo como oro en paño.
Pero ahora, con esta marca, lo tenéis todo hecho. Será un regalo inolvidable, eso os lo aseguro.

Todo es tan bonito, tan exquisito, tan lleno de buen gusto, que sobre todo para las niñas, será uno de sus regalos preferidos. Lo digo por experiencia.
Siempre me he quejado de que estas cosas parecen secundarias. Es decir, nos gastamos un dineral en el vestido o traje de Comunión, y después, a dormir con cualquier cosa. Y no…

Hay que ser elegante y cuidadoso, tanto en lo que se ve como en lo que no. Que todo lo tuviera tan claro.
Y las que sois de fotos, ni os cuento cómo quedan con estas maravillas… Para el álbum, que seguramente estrenen también ese día.

Os sorprenderíais de todas las que me habéis escrito pidiéndome cosas de éstas, con lo que yo estoy encantada. Significa que hay muchas que valoramos estas maravillas.
Ya estáis viéndolas. ¿No son impresionantes? Y tenéis muchísima variedad.

Los lenceros, en color crudo, siguen siendo los preferidos por muchas, como por ejemplo, por mí; si bien hay otros ideales, de morir del gusto, con lo que yo, ya no os sabría aconsejar si uno es mejor que otro, porque me parecen todos delirantes.

Tules, puntillas, voiles, encajes… Todo es perfecto para un día tan bonito. Otro regalo colosal es un capazo a juego con esparteñas. ¡Delicioso! Si además, te regalan el pijama o camisón a juego, una maravilla la mires por donde la mires.
Almohadones, toallas, letras forradas… Detalles encantadores y personalizados que cada vez veréis más en las tiendas porque los puntos de venta de esta marca chiflante, cada vez son más numerosos.
A mí, desde luego, no me importa gastarme el dinero en estas joyas y no en cosas que me piden, pero que no me convencen.

Al final, siempre regalo lo que me gusta a mí. Si no, no me quedo a gusto.

Mirad este camisón crudo de tul bordado. Fijaos en los detalles y sólo así me entenderéis. Veo magia en él, es algo que a nadie puede dejar indiferente, desde luego. La pechera, las mangas, los lazos en beige… ¡Una auténtica delicatessen!
O este otro, con volante abajo y espalda de tul bordado.

Dan ganas de coleccionarlos ¿no?

Más sencillos, como éste de vainicas y puntillas, también bárbaro… ¡Ayyy! Estas cosas me dan la vida.

Además, como os digo muchas veces, te sales un poco de la típica pulsera o reloj, pendientes… Os aseguro que es un regalo fetén, extraordinario. ¡Que se lo digan a todas mis regaladasss y a sus madres!
Pero la creatividad de esta marca va más allá del color crudo. Las maravillas siguen
en otros tonos, como este camisón, con estampadito en rosa, canesú de ganchillo y tul… ¡Ohhh! Ya veis qué preciosidad.

Un toque de tul, sencillez y un lazote al lado del canesú que brilla por sí mismo. ¡Qué genialidad! Divinísimooo.

En versión pijama, igual de exquisito. Eso ya, lo que más os guste y según sea la niña. No hay nada ni medio normal. Es todo de un gusto sublime.

Ya os digo siempre que cuando voy a la Feria, es el stand más bonito con diferencia. Me quedo como boba mirando los nuevos estampados de la temporada, los capazos, coronas, todo.
Otro pijama delicioso, con tonos y lazos rosas con el capazo a juego. ¡Qué niña, por Diosss! Con la mañanita, que está la foto más arriba, el colmo del buen gusto, de una madre exquisita.

Cada día me admiran más las combinaciones tan absolutamente espectaculares que crean. Estampado con tul, puntillas, encajes… Y que todo brille y reluzca más que el sol.
Divino de nuevo, este camisón crudo como con una especie de baberola. Lencero a más no poder, con sus puntillas que recuerdan a los antiguos de las películas…

O éste otro de tul de plumetti, espectacular con las mangas con volantes ¿No son divinos? Qué fotos les podéis hacer, por Dios.

Sin palabras ya ante la visión de este camisón con la bata a juego… Como para una princesa de cuentos totalmente. ¡Qué maravilla! Da pena hasta estrenarlo. Ahora, las niñas que hacen la Primera Comunión, ya son mayorcitas para cuidarlo y entenderlo.

Otro espectacular, con la bata con tul bordado de bodoques…¡No puede ser más de mi gusto! Es sencillamente perfecto. ¡Menudo conjuntazo para que lo regale una tía o pariente cercano! Es un derroche de buen gusto y de creatividad fuera de toda duda. Estoy enamorada de esta marca desde el primer momento que la conocí. Y no es para menos.

Me reconoceréis que es un regalo único, original y precioso.
Sólo apto para madres que sean exquisitas, nostálgicas y que le gusten estas maravillas, claro. Habrá de todo, como en todos los aspectos de la vida, pero lo que se pierden las que no le dan importancia…
Alegría, colorido y más deleite para la vista con este formidable pijama de flores rosas de abajo, en un tono más subido con puntillas en beige. ¡Otra joya de la corona! También en camisón.
Tenéis el capazo y alpargatas a juego… ¡Oh la lá! Exquisitez en estado puro.



Y lo mismo, en tonos amarillos y naranjas, con hortensias, en este camisón lleno de alegría y buen

gusto una vez más. ¡Qué estampado tan divino! Combinado con gris, puntilla y lazote, es realmente soberbio.
También con el capazo de volantes a juego, al igual que las esparteñas.
¡Qué recuerdos me trae todo esto!
Pijama también, por supuesto, con bombachitos. ¡Qué niñas!

Los niños tampoco faltan, aunque ya sabemos que hay menos variedad, pero los que veis, son deliciosos también.

Éstos, en tonos grises y blancos, personalizados, estilosos y originales como nada. ¿No creéis?

O estos otros, en tonos azules para las más clásicas (es decir, como yo), de rayitas los pantalones cortos y camiseta con estrella de rayas con la inicial o el nombre. ¡Chipén!
Mirad qué hermanitos, Lucas y Pablo, con su nombre… Porque no sólo los comulgantes tienen derecho a un pijama bonito. Pues da gloria verlos, qué queréis que

os diga.
No sé ya ni qué enseñaros. No tengo preferidos. Son todos de muerte.
Ahora entiendo que la dueña de una tienda, me dijera el otro día que no sabía qué colección elegir.
Este pijama rosa de la niña de abajo, es otra bomba. Delicado, en un tono de rosa certero

total, con el bordado en beige espectacular. Parece la niña de una portada de revista.
La pechera con pasacintas, el lazote, las mangas, TODOOOO.
Chiflante también el de estampado suave y divino con puntilla gris y lazo de raso en rosa para darle viveza… ¿Con cuál os

quedáis?

Y más bonito si cabe, el pijama, con la puntilla gris rematando todo… Yo no puedo con tanta maravilla, de verdad. Todo es como un espejismo y más, viendo cómo duermen la mayoría de los niños, con cualquier cosa. ¡No puedo con eso!

Menos mal que me habéis preguntado tanto por estas cosas, que me he quedado más tranquila.

Batas lenceras, dignas de una novia, como ésta que os enseño, de talle alto y llena de pequeños detalles que la convierten en una obra de arte.
El camisón con lazotes de tul en los tirantes y

pequeñas flores superpuestas, es de los más brillantes y exquisitos también.
No puede ser más tentador y extraordinario. Es de mis favoritos.
No puedo imaginar algo más bonito. Es muy, muy difícil encontrarlo.
O el otro, con diferente diseño, con las florecitas rosas superpuestas y tul en las mangas, como si fuera a volar de un momento a otro.

¡Requetedivinooo!
Ya veis que hay de todo y todo sublime. Pecheras de ensueño, mangas deliciosas, telas divinas, tules, puntillas, vainicas, volantes…
Obras de arte en realidad. Habrá quiénes lo aprecien más y menos. Pero creo que a todas nos parecerá que estamos ante una MARCA DIEZ con mayúsculas.

La locura que es para mí, no pretendo que lo sea para todas, pero sí intento que todas estas joyas sean valoradas (gracias a Dios, cada vez hay más adeptas). La ropa de casa es igual de importante que la de salir a la calle, porque ahí es donde se demuestra quién eres, no aparentar sólo para que te vean, sino la satisfacción personal, el gusto por lo exquisito para todas las ocasiones de nuestra vida.
Así se lo inculcamos a nuestros hijos y así es como no se perderá nunca. Sé que es mi opinión y habrá quién diga que es una bobada. Me da igual.

El caso es que, si viendo todo esto, no os entran ganas de comprarlo, pues qué se le va a hacer… Las que vayáis a hacer un regalazo este año, pensad en un conjunto de estos como posibilidad.

Os aseguro que triunfaréis y quedaréis como reinas. Y la madre de la niña o niño, quedará encantada. Y por supuesto, las niñas también, que, como os he dicho, tengo experiencia.
Un regalo para toda la vida. Un recuerdo de un día único e irrepetible.

Y después de ver todo, ¿seguís pensando que es un camisón o pijama más? No lo creo.

Un beso a Carmen por hacerme disfrutar como una niña y a todas mis lectoras por haber esperado a que pudiera escribir y por pedirme que os enseñe cosas como éstas.
Un beso irrepetible.
Eva no sé que te ha ocurrido, pero por el tono con el que escribes se ve que lo estás pasando mal….
Por eso, desde aquí, te mando toda la fuerza y todo el ánimo posible.
Un Beso y espero que todo vaya mejorando.