¿Cómo vais? Después del puente, imagino que muchas, refunfuñando. Al menos, espero que os haya servido para desconectar, descansar, leer…

Eso es lo que he hecho yo. Prácticamente, nada más.

Al no estar los niños, todo ha sido reláx y cuando menos haces, más pereza te da hacer cosas, eso está claro.

Íbamos a haber ido al musical de Billy Elliot, pero no había entradas.

Lo dejamos para el fin de semana que viene, pero tengo muchísimas ganas de verlo. Creo que está fenomenal.

Ya sabéis que todo lo relacionado con cantar y la música, me chifla.

Ahora mismo, ha empezado a llover otra vez con fuerza, pero ayer hizo un tiempo de verano. ¡El clima está loco!

A este paso, alguna catástrofe, aparte de las que está habiendo, nos va a llegar.

¡Pobres los de Mallorca, por favor!  Me quita la vida ese niño al que no encuentran… ¡Cuánta desgracia!

Por eso, vamos a intentar que los lunes nos parezcan una maravilla, porque lo que es un lujo es poder vivir cada día. Y nos quejamos por cada cosa… Yo, la primera, por supuesto.

¿No os  ha parecido un orgullo ver a Rafa Nadal ayudando en las tareas del desastre de Mallorca?  ¡Bufff!  Se me cae la baba con él. Y pensar que lo critican… ¡Increíble!  Como si él necesitara fotos, por Dios.

Para mí, es de lo mejorcito que nos representa en España. Gente con sus valores es la que necesitamos en política.

No habría mejor Presidente. Claro, que es imposible, dado que no entiende de corrupción, engaños, estafas  y ladrones.

¡Una pena! Mi voto, ya lo tenía, desde luego.

Bueno, mi querida hija, ayer tuvo a bien llamarnos por Skipe y nos dijo que ha encontrado un trabajo compatible con sus clases en Irlanda…

¡Me va a matar! Ya os diré en qué acaba todo esto, pero al revés que mis hijos, que tienen la cabeza bien amueblada, esta niña nunca se sabe por dónde va a salir…

¡Su hiperactividad va a terminar conmigo!

No sabéis qué tranquilidad hay en la casa.

Vamos a lo nuestro, que hoy es una marca joven, con muchísima personalidad, actual, fresca, con detalles modernitos, pero con aires clásicos. Vamos, una verdadera monería y si no, ya me diréis. Es gallega, aunque una de las dos socias, vive en Madrid. Un estilo, que como os decía el último día, antes no existía. Combinaciones exquisitas que huelen a buen gusto, complementos originales, todo artesanal y precioso: Mon Capot.

Sandra, que así se llama la “madrileña”, me contó que le chifla la moda infantil, aunque su profesión es otra. Vamos, como yo. ¡Qué envidia me dio!  Claro, en Galicia, donde hay tanta moda bonita, hay más facilidades para encontrar talleres y todo lo necesario para crear algo tan irresistible como esta marca.

Y también, os demuestro, una vez más, que no es necesario gastarse un fortunón para llevar a los niños de exposición. Ya lo veréis.

Tiene varias colecciones y todas, de escándalo. Por diferentes, porque miras a los niños y no puedes dejar de hacerlo. Yo, con algunas fotos, me he quedado minutos y minutos escudriñando cada detalle, las poses, el fondo, la estética al fin y al cabo.

Ya estáis viendo su estilo, la naturalidad y frescura que desprenden los niños. ¡Me pirran!

En su colección Florencia, vemos  delicatessen como estos vestidos negros con flores que llevan estas gemelas bombón.

Sueltos, cómodos, qué tela… Y con esas mangas con volumen chiflantes, con la vuelta en mostaza, para darle luminosidad, a juego de los lazotes del pelo… ¡Qué monada, por Dios!

Lo último que estoy viendo en moda infantil, es llevar vestidos de este estilo e incluso más arreglados con medias tipo deportivas y zapatillas. Antes nos hubiéramos echado las manos a la cabeza. Pero depende de cómo se lo pongas, la gracia que tengáis haciéndolo, las combinaciones, etc, queda de fábula.

Eso sí, si no estáis seguras o veis que a vuestras hijas no les va, os recomiendo medias y bailarinas, como toda la vida de Dios.

Es mejor no arriesgarse que ir hecha un cuadro.

Pero tanto estas niñas como algunas que he visto, lo llevan con una gracia y un estilazo bárbaro.

Ideal también el vestido – abrigo negro con botones, con braguita de plumetti en mostaza para las pequeñitas. ¡Bufff!  ¿No es una monada? Miradlas cómo están las tres juntas… ¡De rapto!

¡Qué originalidad la pequeñita, también con la capota Florencia y el vestidito-abrigo, que no puede ser más fabuloso!

Son niñas de mirar y remirar. ¿Sí o no? Y con ese estilo que se lleva tanto, tan poco “remilgado” o encorsetado… Vamos, quiero decir, tan diferentes de esos que sólo llevas para determinadas circunstancias (que los hay preciosos), pero a los que no sacas partido para nada.

El niño, con la camisa mostaza de plumetti (arriba), a juego con ellas y con su pantalón potrero en negro, que también es un “puntazo” de Mon Capot. Porque estos pantalones, yo no los había visto así y la verdad es que quedan graciosísimos y estilosos como nada.

¡Ojooo!  Para niños a los que les vaya. Que ya sabemos que hay de todo en la viña del Señor. Y no tengo ganas de ver a niños disfrazados con ellos…

Pantalón de pana Florencia en mostaza, también perfecto y súper estiloso y actual. ¡Chapeau lo están haciendo!

En verdes, también hay cosas irresistibles y conjuntazos que no podréis evitar comprar. Al menos, eso me hubiera pasado a mí, si me pillan cuando los niños eran pequeños.

Poncho de punto verde, vestido de plumetti, pelele, ranita, camisa de niño… Ya me pierdo, pero con ver la estampa, arreglado. ¡Id eligiendo!

Fijos en estas niñas tan monísimas, con el vestido de plumetti verde y el poncho con bombachos Sofía. Aunque pueda parecer que no abriga, en invierno, con leotardos se arregla todo y cómo son… ¡Sólo veo buen gusto por todos lados!

Los niños, monísimos, con su potrero verde, el uno y con la camisa de plumetti, el otro. Coordinados al máximo.

Y aquí, abajo, con la niña del vestido Sofía, sencillo, pero ideal. Para cualquier día, no hace falta guardarlo en el armario para ir llamando la atención, como veis. Con estos modelazos, la vais a llamar queráis o no.

Siempre que no la liéis con los complementos, que algunas me mandáis cada foto, que ni

os quiero contar…

La colección Oxford, que parece que podía ser seria y de mayores, tiene un toque atrevido, modernito y de nuevo, lleno de estilo, que también hace que sea diferente y que la creatividad de estas dos chicas llegue lejos.

Camisa canguro y bombachos para el niño, mientras que la niña lleva una ranita con volantes que parece la Ratita Presumida. ¡Para todo hay que saber!

Están requetemonos, no así cualquier cosa. Y con colores oscuros, sí.  ¿Cómo os quedáis? Ya veis, medias y zapatillas. Informalidad, naturalidad… Aunque, como os he dicho, también monísima la ranita con zapatos o bailarinas. Depende del toque que le quieras dar al conjunto.

Ideal el vestido Oxford con pechera rosa de lana. Ya veis qué cosa tan sencilla y tan mona a la vez. Una camiseta básica negra por debajo y el vestido de tirantes por encima. ¡Oh la lá!

Creo que os está encantando todo. O eso espero. Ya me diréis.

Y la colección París, cortita pero que cunde, por divina. Los vestidos rosas no pueden ser más especiales. Con mangas caídas y con gran volumen, llevan el forro negro y las gemelas no pueden estar más de portada del Hola.

Fijaos en el contraste de las medias y zapatillas con lo arregladito del vestido. Os digo lo de siempre… Con tonos granates, van perfectas, bien sean zapatillas, bien bailarinas o merceditas.

El diseño es formidable y lleva detrás un lazo negro. Una maravilla… Mirádla aquí con la braguita negra de flores de la colección Florencia… ¡Qué mona, por Diosss!

Y son vestidos de mucho poner, pese a que son más arregladitos que otras cosas. ¡Yo se los pondría cualquier fin de semana o días de vacaciones!  Para todo, para lucir niñas.

La capa Cheviot, de la que estoy totalmente enamorada, pertenece a su colección Oslo y de nuevo, el estilo y la actualidad

mandan.

La capa es irresistible, mejora a cualquier niña y la combináis con su braguita falda de volantes espectacular y dais el campanazo…

La tela es divina, la lazada, la faldita, no le falta detalle. ¡Por Dios, cuando vi la colección, se me caía la baba!  ¡Qué suerte poder cumplir tu sueño!

Espero y doy por hecho que van a tener muchísimo éxito.

¡Supercalifragilísticoespialidoso! Porque no sé qué decir ante este derroche de buen gusto.

Estoy alargándome un poco, pero es inevitable.

También en su colección California, encontraréis delicias, como estos jersey de estrellas granates con los pantalones potreros negros… ¡Ya me diréis cómo están!

Lo mismo que el camel con el jersey marino de estrellas.

¡Qué muñeco! Un conjunto de revista, desde luego. Tanto poner a niños como que van de boda, en edades en los que ya no les pega ese tipo de ropa, teniendo esto… ¡Hay muchas marcas y muchísima variedad! ¡Aprovechádla!

Los petos de terciopelo rosa, otro bombonazo. Y los veo también para cualquier día en que quieras lucir niñas.

Qué fotos tan bonitas, que colosales las veo…

¿Y vosotras?

Un tono ideal y un volantón en el canesú y bolsillos como todo adorno. Una camiseta básica y a correr…¡Bravoo!

Peto gris claro para el niño. Complementos con estilo y logras un look de diez con poco dinero. ¡La imaginación y el gusto valen más que todo un dineral junto!

El peto color óxido, otra prenda súper ponible y estilosa. ¡Combinadla bien, por favor! Es un color precioso para la otoñada.

El gris oscuro, lo mismo. ¿Qué os voy a decir, si me gusta todo? Además, dentro de este estilo, ya veis que lo hay más y menos informal.

Vestido gris fular para enamorar… Derroche de glamour con un vestido sencillo, un foulard, medias y zuecos, que se llevan tanto ahora.

La llevaría tal cuál y si a la niña le va este estilo, todo el mundo os preguntará por la calle.

Y con sus complementos, ya salen los niños vestidos de arriba abajo. Sus cuellos de lana, collares, bufandas, medias, cintas, bolsos, boinas… Todo, acorde y complementado ideal con todo lo que os he enseñado.

Entrad en su página web y veréis todo. Hasta la talla diez, todo este lujo de colecciones, originales, frescas y estilosas.

Mi más sincera enhorabuena a Sandra y a su socia. Galicia es tierra de meigas, desde luego.

Un beso enamorado