Bueno, pues abril sigue y sigue… Tanto,  que ya es mitad de mes. Me gustaría saborear cada minuto de él, porque sé que después, con los calores, no voy a estar del mismo humor.

Esta mañana, como siempre, deprisa y corriendo. He ido a un montón de recados en media hora larga…

Almudena ya me avisa que puede que hoy salga. Total, ya es jueves y el examen tan difícil lo aprobó. De milagro, pero lo aprobó…

En fin, yo con esta niña poco tengo que hacer. Me río cuando mi madre dice que no la deje, que le diga esto, lo otro, que le advierta…

¡No sabéis cómo es mi madre! Se cree que la niña tiene aún 7 años y que puedo manejarla. ¡Si ni siquiera podía a esa edad!

En fin, os diré que aún no he ido a apuntarme al gimnasio. No me da tiempo. Jajaja, me río, porque si tuviera un interés loco, lo tengo a 200 metros de casa, pero me tengo que ir mentalizando poco a poco.

He estado contestando mensajes y poco más que os pueda interesar… En uno de ellos, me pedían que hablara de ropa para señoras mayores, pero que fuera elegante, para ir a una boda. En otro, que hablara de puericultura, etc…

No puedo abarcar todos los temas y a la que me ha escrito pidiéndome consejo sobre marcas, porque va a abrir una tienda, que no se preocupe, que esta misma tarde, le contesto.

Además, en la zona en la que la va a abrir, no tiene competencia posible y creo que le irá muy bien… Seguro. Aunque ya le he dicho, que este mundo de la moda es muy difícil, hay mucha competencia, cada día salen marcas que deslumbran y desbancan a otras…

Vamos, en realidad es como todo en la vida. Cuando crees que estás en lo más alto y vas un poco de diva…¡zas!  Llega alguien que te hace sombra en un momento. Pasa con todo.    C´est la vie.

Bueno, pues, como no puedo dar gusto a todos, hoy había pensado que habláramos de calzado.

Sí, calzado, que tanto os cuesta buscar. Tanto de niños, como de mayores. Es un complemento super importante, por no decir fundamental en cualquier indumentaria. Tanto, que si los zapatos, bailarinas, sandalias, etc… no van bien con el modelito, éste no sirve absolutamente para nada.

Así de claro. ¡Cuántas veces lo he visto! Maravillas de vestidos (el otro día mismo), que se van al traste, por los calcetines y zapatos.

La gente se cree que por llevar una maravilla de conjunto, el calzado puede ser cualquiera… y noooooo.

Yo, al revés. Cada vez pienso que los zapatos o lo que sea que llevemos es casi más importante que la ropa en sí. Cualquier conjunto ideal se vuelve de inmediato paleto, si el calzado no es bonito, es malo o no va ni con pegamento y medio con el resto de la ropa.

Así, que de forma lo más resumida que pueda, os hablo de calzado para este verano: Para niños, recurro a la tienda “Ganzitos”, una de las que más surtido y gusto tienen, creo yo.

Os enseño el calzado para bebés, como los pepitos clásicos. Lo que

los he usado yo, no lo sabe nadie…

El Pepito Hugo de badana, en piel,  que tanto y tanto se los ponemos… es un imprescindible totalmente. Con su botón, creo que es un clásico por excelencia.

También se llevan mucho, y son muy cómodas, las manoletinas de gomas cruzadas en piel, como las que veis aquí. Se adaptan perfectamente al pie del bebé y son muy ricas. Las veis en beige, pero hay en más tonos.

Eso sí, todos suaves, como corresponde a su edad.

Graciosos son los pepitos Paul, tipo blutcher de lino, altos y cómodos para los bebés. Con un atuendo informal, pueden quedar muy monos.

Y también más modernitas, la manoletina de ante con brillos. ¡Cuántas bebés las llevan! Las madres no se resisten a poner fantasías a sus hijas, aunque sean pequeñísimas…

A mí no es lo que más me apasiona, ya lo sabéis, pero así doy gusto a las que me dicen que no soy nada moderna, jajaja…

Ya, pasando a lo infantil, sin ser bebés, tenéis muchas cosas, entre las que hago una pequeña selección, como son las bailarinas de piel metalizada ajustables y con pompón. Tampoco son la cosa más clásica del mundo, pero las he visto puestas y según con qué cosas, quedan monísimas.

Las veis en dorado y en un color más bronce… Dependiendo de lo que lleven, ya sabéis. Eso sí, cómodas, comodísimas.

No puede faltar la bailarina de ante fabricada con brillo en el verde del verano. ¡Madre mía, el furor de este color! No sabéis la cantidad de zapatos que he tenido que buscar por toda la geografía española en este color exacto…

Sigue sin ser la clásica, pero, repito, con un vestido mono, queda realmente cuca. Al igual que ésta otra, en camel, idéntica, pero más combinable. Quedan estupendas.

Para niño, os sigo enseñando el pepito en piel con botón ficticio, y cierre de velcro. ¡Bendición de Dios! Se ponen en un segundo y son monísimos. Para bebé, es de lo más bonito.

Ideales y de más vestir, los inglesitos de piel de  ovino con cordones encerados en chocolate. ¡Me chifla la combinación! Ideal con todo lo que sea un poco más arregladito y en estos tonos tan divinos.

Preciosos y clásicos, los náuticos de toda la vida. Éstos, de ante y en camel, los más utilizados. Son una monada y a los niños pequeños, les queda de cine. Con cualquier conjunto mono, bermudas y camisa, es lo que mejor les queda, no cabe duda alguna.

La bota mercedes para niña es una novedad y he de reconocer, que, depende con qué modelo, quedan impresionantes. De ante, con puntitos metalizados y forro de piel, van cerradas con lazote de raso… ¡De lujo! Probadlas… ¡Monísimas!

También clásicas renovadas, las mercedes de piel con adorno de lazo de raso. Éstas no fallan, sean más clásicas o un poco más innovadoras.

Y un poco más subidas de tono, camel, las mismas, super ponibles. Este color es único para combinar, tanto con colores de su gama, como cuando se va de otro color entero y no sabes con qué combinarlo.

También me gustan mucho, las mercedes de piel, en éste caso, en un rosa antiguo, con el adorno en la pala de una flor en ante. Ya veis… moda, moda,moda.

Para los colores de este verano, os resolverán muchas cosas, seguro.

Y cómo no, mi favorita, la clasiquísima mercedes de ante en camel, una apuesta super segura. ¡Me privan!

Y también muy monas para estas edades tan pequeñas, los inglesitos de ante camel con el lazo como innovación. Pero bonitas…

¡Que no falte el verde agua! Si son tan bonitos como éstos ingleses de piel de ovino, con los cordones chocolate… bienvenidos sean.

Y elegantes y bonitos también, los ingleses en ante rosa antiguo, con el lazo en rosa claro… Novedades, pero siempre dentro de lo inglés, que es una maravilla.

Para mayorcitas (hasta la talla 34), la novedad son estas Merceditas con correa en forma de T. En ante, con puntera y talón de piel y adorno de strass.

A primera vista, no me enamoraron, pero puestas como es debido, he de reconocer que quedan maravillosas.

También las tenéis en camel, pero el rosa, es la novedad.

Como se dice, hay que renovarse o morir… Yo, a veces, elegiría morir, pero como sé que a muchas os encanta, os enseño estas sandalias de piel metalizada en rosa, que depende de cómo, dónde y cuándo, pueden quedar… graciosas.

Y también en este otro modelo, con más tiras… Las dos modernas, atrevidas.

Monísimas las botas de ante mostaza con flecos… Estilosas y modernas,  con unos pantalones tipo safari y camiseta o blusita en verde seco, beige, tonos tierra, quedan realmente monas.

Y con vaqueros, ideales.

También quedan muy monas, las Merceditas de ante con tachuelas. Para algún evento, super apropiadas y hacen un pie monísimo. Con clase.

Lo mismo que las Merceditas de piel

nacarada. Van con todo y quedan bárbaras. Tienen una forma que me encanta y una elegancia innata. Sin más adornos que su diseño. ¡Preciosas!

Y para niños, como los mocasines, he decidido que no encuentro nada.

Así, que aquí los veis, en ante topo, mis preferidos, aunque sean para verano… ¡Qué maravilla!

También ideales los color caldera, elegantes y preciosos con toda la gama de los tierra… si bien, claro, limitan más.

Y un básico son los marino, que es el color para el verano más bonito para niño, se lleve el que se lleve. Además, una innovación es la cinta de cuero en rosa. Me encantan.

Y cómo no, os dejo con el color estrella, que tanta gente ha estado buscando: el verde agua, o como se quiera llamar. Bonitos, porque son mocasines, pero para algún evento o algo especial, porque el color limita muchísimo…

Quería hablaros de las alpargatas que tantas me estáis pidiendo, tanto de Comunión, como para vestir un día normal, pero veo que no me va a caber, así que os dejo las fotos que pueda y otro día, entramos más en detalle.

Ahora, voy con la marca para nosotras: “Castañer”. Que conste que no hago nada más que cumplir vuestros deseos. Yo, encantada, porque me pirra esta marca, sobre todo lo que me puedo poner yo, claro… Es decir, los taconazos, aunque me muera de envidia por las maravillas que veo en planos.

¿Qué os parecen estas alpargatas con cuña en ante rojo? Son las primeras que vimos Adela y yo, el otro día cuando fuimos de compras y no pudimos entrar porque estaban cerrando, que si no…

Ideales y de estilazo, las planas de piel, también en rojo. Son las que me dan envidia…

Las sandalias crudas con cuña en lona de algodón, totalmente de mi estilo. Con ellas voy como en zapatillas y te hace una pierna… bárbara.

Lo mismo que estas de piel camel con blanco. Cuña alta… ¡Me chiflan!  A Adela casi le da un ataque. Ella lleva tacones, pero más discretos.

Envidia: las planas, que las

veo divinas, pero prohibidas para mí. ¡Aprovechad las que podáis!

¿Os atreveríais con éstas de más abajo? Mucho tacón, mucha cuña y cintas de piel de colores. ¡Yo sí! Me las pondría encantada, aunque reconozco que son para tener un zapatero tipo el de Imelda Marcos, es decir, es un capricho, para tener muchas, ya que no van con cualquier cosa, aunque lo pueda parecer.

En cambio, la sandalia con cuña en lona india, la veo super ponible e ideal. Yo le sacaría un partidazo increíble. Tengo que pensar…

Y voy ahora con la marca «Antía», de los que no me puedo poner casi nada, pero que me encantan y a raíz del artículo que escribí este invierno, varias me lo habéis pedido… ¡No tenéis gusto, ni nada!

Os enseño los crocus plata, una maravilla en tres actos… No sabéis cómo quedan. Qué elegancia, te quedas mirándolos casi sin querer. Sientan de maravilla. Ponibles desde ya, hasta días en los que haga fresquito (miradlos con medias)

¿No os parecen divinos? De verdad que no los encontráis por ningún sitio con tanta clase.

Maravillosos los tipo blutcher Cala naranja… ¡Me muero de bonitos que son! Pero me es imposible andar con ellos y eso que tienen un poco de tacón ¿eh? Varios naranjas, chiflantes, favorecedores, estilosos…¡Buaaaaaa!

Increíbles pero imposibles para mí, los Camelia salmón. ¡Cómo son! No sabéis cómo me gustan… Los veo de un gusto exquisito. Por Dios, quien sepa andar con esto y le siente bien, que ni lo dude. Son una auténtica maravilla…

Plateados, con borlas en rosa palo, ribeteados igual… Bueno, bueno, bueno… No tengo palabras suficientes.

Al igual que los Camelia Kiwi-lima, divinos, atrevidos, chillones… Los veo de un gusto totalmente extraordinario y muy ponibles, porque te vistes de un solo color, cosa que a mí me priva, y le das el toque con esta maravilla de zapatos y algún pequeño detalle como un collar, un pañuelo, una flor…

La mayor fantasía de la marca llega con estas bailarinas, que son una auténtica monería y un verdadero caprichazo: en ante, de distintos colores y con pompón de conejo…

Ya las veis: la Hortensia rosa, que es la verde con el pompón rosa, la Hortensia azul, en negra con pompón azul y la Hortensia morada, en ante amarillo limón con pompón morado…

¿Qué me decís? Yo sé que muchas se atreven. Son una monería, con un pequeñísimo tacón, ideal para lo exageradas que son, ya que si fueran de taconazo, resultarían un poco vulgares…

Son tal y como estaba escrito que fueran. La diseñadora sabe  un rato de esto… Coquetonas del todo, me las imagino con una falda tubo preciosa y camiseta o con un vestido ajustado…

Por supuesto, para las altas, divinísimas con pantalones. Llamarán la atención quieran o no. No se puede todo en la vida, está claro…

Me han parecido los zapatos más novedosos y coquetos del verano… ¿A que todavía me compro unas? Jajaja, quién sabe… si no ando mucho… Yo, por coquetería, lo que haga falta.

Y termino (ya lo tenía que haber hecho, pero me motivo), con los que vimos Adela y yo en «Intropía» (nuevo nombre de mi marca Hoss Intropía), y de los que siempre tengo.

Las sandalias con cuña y doble tira de piel, me chiflaron (una de estas cae seguro, ya lo sé). ¿Qué os parecen? La gente me dice que no sabe cómo puedo ir así, pero es que voy como con zapatillas… Y muchas me entienden porque les pasa lo mismito.

No os enseño más de éstas, porque son del estilo.

Envidia del todo me dieron estas otras, pero os las enseño, para que las disfrutéis vosotras: las romanas, tanto en dorado, como en negras, divinas y super especiales.

Te transforman sin quererlo. Son super super exquisitas. Desde luego, las doradas más ponibles y preciosas, pero las negras tienen su aquél…

Envidia cochina: esta maravilla, tanto las metalizadas en plata, como las de piel en beige. Son de esas que me quedo mirando cuando alguien las lleva con gracia y pienso: “qué suerte, quién pudiera”.

Son de estilazo total, para gente que sabe lo que quiere, ya que baratas no son, aunque pueda parecer que no tienen nada especial.

De eso nada. Tienen… y mucho. Algo tiene el agua cuando la bendicen, eso está más claro…

Y os dejo con las zapatillas abotinadas que le gustaron a Adela (a mí también, pero…) y ahora dice que se las pone con

pantalones y va monísima.

Desde luego, bonitas son un rato….

Me riñen, porque esto es muy largo y no habréis leído ni la mitad… ¡Peor para vosotras!

Un beso pisando fuerte