
Bueno, pues hoy, un artículo cortito, que todos estamos liadísimos, con compras y mil cosas y sé que no hay mucha gente por aquí…
Pero como en algún momento me leeréis, he querido escribir algo en este día tan especial (cuando lo estéis leyendo ya estaremos en él o lo habremos pasado).

La Nochebuena, un día mágico. Estupendo para unos y no tanto para otros, pero creo que siempre tendrá algo de mágico.

Para mí, desde que vivo en Madrid, no supone nada más que trajín, viajes, prisas y aceleramiento, pero

después, cuando ya estás en casa cenando con toda tu familia, lo agradeces.

Creo que es el día que toda la familia coincide a la vez, habla, también discute, por supuesto… pero todos lo celebramos de una manera u otra.
Así que no quiero que os falte mi felicitación navideña, en este blog que muchas seguís y que tantas satisfacciones me está dando.

Como enseguida empezaré a hablar de Comunión, vestidos de ceremonia para niñas y madres y demás, voy a aprovechar hoy para hacer un balance de los diseños que más me han sorprendido y gustado en esta temporada de invierno, ya que de todo el año, sería muy largo.

Seguro que me dejo maravillas, pero como os he dicho, no me quiero alargar. Así que empiezo por la marca “Sanmar”, que año a año me sigue demostrando su calidad y buen hacer.
Fiel a su estilo clásico, pero con innovaciones, como es lógico, este año me quedo con varios de sus conjuntos como éstos de la colección Jockey, que me parece chiflante, clásica pero con un toque de niñas ideales increíble. ¿Cómo están? Además, como sé muy bien, de indudable calidad y perfectos acabados, de los mejores que he visto.


Monísimo este vestido de la colección Happiness. Elegante, sobrio, con clase. No necesita adornos ni vuelos ni pascualas. Está más que claro¿no?

De la misma colección, ideal el conjunto de falda de vuelo de plumetti en rosa, con el jersey marino con los mismos detalles que el vestido. ¡No sabéis cómo sienta! Una maravilla.

Y elegancia y sobriedad de nuevo con el maravilloso vestido Ópera, que sienta a las mil maravillas.

Esta marca nunca me ha defraudado. Por eso lleva tantísimos años en el mercado.

Es para entenderla, está claro. No es amiga de vuelos ridículos ni de niñas-tarta.
De “Eve Children”, me quedo con sus dos abrigos. Uno jaspeado en azul, delicioso, que aún no me explico cómo queda en algunas tiendas. Ponible, coqueto, una joya…

Por detrás, con ese vuelo y los lacitos, me deja atontada… Además, practiquísimo.

Más de capricho, e igualmente divino, el abrigo celeste con pelo. Me encanta hasta para las mayorcitas.

Lo veo tan dulce, tan lleno de encanto… Es menos combinable, para tener más de uno, pero hay muchas madres que compran más de uno ¿sí o no? Pues éste es el de capricho. Además, va con muchísimos tonos. Ni os cuénto cómo queda con tonos chocolate o crudo…

“Kids Chocolate”, tampoco me descubre nada nuevo y ha superado mis expectativas con creces. Vestidos sencillos, llenos de gusto y clase. Niños y niñas coordinados que me parecen absolutamente exquisitos…

Un ejemplo es el vestido escocés granate, con cuello blanco, que no me puede gustar más (sé que a muchas les parece soso). Eso es que no coincidimos en gustos, porque se le puede llamar cualquier cosa menos soso.

¿Y el conjunto del niño? Sobran las palabras.
Y por poner otro ejemplo, ya que me pirra toda la colección, el vestido British a juego del niño, otra delicia. No hace falta que explique nada. Hoy me toca a mí, son mis favoritos…

El abrigo Velvet de terciopelo marino me enloquece, no así cualquier cosa. Si lo hubiera habido en mi talla, lo llevaría más orgullosa que todo. ¡De un gusto superior!

“Badum Badero”: Me quedo con su colección Gales. Ideal tanto la chaqueta Amazona, como el pichi… Es increíble lo que se lleva esta tela este invierno, con lo que yo estoy encantada.

Pura elegancia y sobriedad. Para pequeñas, cosa que nunca lo hubiera pensado. ¡Qué distinto de esos vestidos llenos de vuelos y colorines!

Monísimo también el peto con sus volantitos en el culete. Con los complementos en camel, no puede quedar más bonito. Blusa blanca y lazo en el pelo chocolate.¡Uhmmm!

Y lo mismo, con el Jesusito. Es una delicia ver a niñas así vestidas. Lástima que muchas vean la tela de mayores…
Una marca de la que nunca os he hablado y que me encanta, sobre todo para las más mayores es “Sisca”. La descubrí hace tiempo en FIMI y me llamaron la atención varios de sus diseños, por diferentes, por elegantes. Además, es una marca que muchas no conoceréis y eso es lo bueno, porque creo que es una de las cosas a su favor: no se prodiga mucho, no ha saturado el mercado.

¿No estáis hartas de ver siempre los mismos vestidos? Hay marcas que, de tanto vender, llegan a cansar, las ves por todos lados y muchas niñas iguales. Ni os cuento cómo me cansan algunas, que desde luego, no pienso nombrar…

Pues no. Sisca lo ha hecho de maravilla en este aspecto. Además, toca todos los palos: vestir, sport, pero casi todo ponible, con diseño y estilo, a la última, vamos.

Desde que me llamó poderosamente la atención una capa tartán en colores oscuros hace dos temporadas, la tengo «in mente», pero siempre estoy con tanto lío que no me ha dado tiempo a hablaros de ella.


Como siempre, la colección Gales, estupendísima. Para todas las edades, diferentes diseños y todo bien pensado. Me priva, cómo no.
Con estos conjuntos, es imposible fallar. Es una pena que mucha gente no entienda lo ideales que van los niños con estas cosas y con el menos es más.

Un poco de gusto en los complementos y …¡Perfecto! En cambio, tengo que ver día a día, cómo recargan sobremanera a las pobres niñas que no pueden con el vestido de tantos adornos y florituras que llevan. ¡Ayyy, Dios mío, pido más gusto para el año que viene!

También me han parecido sensacionales estos conjuntos de pata de gallo; una pata de gallo hermosa, que contrarresta con los colores oscuros. ¡Bárbaros! Niñas diferentes y con conjuntos súper ponibles. Capa, chaquetón… abrigaditos, y como os decía antes, con diseño.

También conjunto de short precioso o vestido un poco más arregladito…
Diferentes y estilosísimos también sus conjuntos de antelina que veis aquí abajo… ya veis, también variedad.
Los conjuntos de short, una monada para estas edades. Botas, calzas, un poco de gracia y… te sales del sota, caballo y rey de tantas y tantas marcas.


No me puedo dejar sus chaquetas militares. Tengo debilidad por ellas y lo ha sabido hacer tan bien en niñas y niños…
Yo les recomiendo de nuevo, que no saturen las tiendas y que sigan así, poco a poco, paso a paso, firme y decidido, porque lo hacen de maravilla, pero que no aburran como he dicho… ¡Hay marcas que las veo hasta en sueños!
Seguro que vosotras también…


“Gansetes” tampoco me ha defraudado, ni creo que lo haga nunca. Deborah y Alejandra tienen el gusto tan parecido al mío, que es como si yo les hubiese ido diciendo todo, jajaja…

No pongo ninguna colección en especial, porque no sería justo, ya que todas me pirran.
Así que os dejo con algunas de las maravillas con las que nos han deleitado este invierno.

El abrigo Eneldo, absolutamente de enamorar. No hace falta ni que os asesore sobre con qué combinarlo, porque ellas combinan todo de lujo.

Otro diseño de pichi y abrigo de la colección Eneldo, para más pequeñas… y el niño, precioso con su chaquetón…


¡Qué familia, por Dios! Mamma mía…

Precioso el vestido Salvia, con un estampado bárbaro… Lo mismo que el conjunto de falda de la misma colección.

¡Qué divinidad! Esto es gusto y no los vestidos que… ¡Que me callo! Que siempre me voy de la lengua. Ese defecto tengo, y me encantaría ponerlo, pero no quiero ser grosera y si muchas os volvéis locas por determinadas marcas, os respeto.

El vestido Cilantro, de estilo college, no me puede gustar más. Una imagen vale más que mil palabras, ¿no? Pues eso. ¿Y el niño?

Todo en Gansetes es delicia y buen gusto. No les pilláis con algo feo ni a propósito. Mirad sus chubasqueros, que me volvieron loca cuando los vi. De cuadros, preciosos para esas edades… ¡Quién volviera a tener los niños así, sólo para ponerles estas maravillas!

Ya os digo, que os iba a recomendar botas rojas de agua, pero ¡Voilà! Ya me han oído las súper diseñadoras y aquí las tenéis…
Y más bonitos, imposible, sus vestidos de Navidad. En lugar del rojo típico, han apostado por un rosa dulce y precioso, que podéis admirar, como lo hago yo. ¡Esto es el buen gusto, señores!

Para mayorcitas, en recto, exquisito… Y para las pequeñas, en vuelo, con puntilla pequeña en crudo y lazos en el pelo de tul bordado… Lo que os digo, como si los hubiera diseñado yo.

Como comprenderéis, esto es una pequeña pincelada, ya que me dejo cosas ideales, miles, pero os he prometido que iba a ser breve. Lo bueno, si breve… (Baltasar Gracián). Me lo sé desde el colegio, jajaja.

Y como guinda del pastel, os dejo con un avance de la marca para ocasiones especiales para la próxima temporada primavera-verano, que está haciendo estragos y no es para menos.
Sencillez, exquisitez, mimo y de nuevo, sin necesidad de miles de adornos.

El vestido Leonor, que os enseño aquí en celeste, y que es una foto de la tienda Críos, de Alcázar de San Juan, en Ciudad Real, no es más que una pequeña muestras de cómo van a ir nuestros niños en las próximas Ceremonias… ¡Acordaos bien de la marca, que va a dar muuucho que hablar!
Os dejo, que disfrutéis como nunca estos días, que tengáis paz y armonía en vuestras familias y os deseo todo lo mejor.
Yo seguiré enseñándoos lo mejor en moda infantil, que para el próximo año, vienen delicatessen absolutas.
Un beso de Nochebuena.