
Se acabó el puente. Espero que hayáis disfrutado y descansado. Yo, desde luego sí. No nos hemos movido de Madrid, pero muy bien. Hemos madrugado porque ha hecho unos días fríos pero luminosos y con Tess (mi galguita) daba gusto pasear. Me encantan estos días.
Muchísimas felicidades a todas las Conchas, Conchitas e Inmaculadas. En especial y por supuestísimo a mi hermana

Conchita, que es la única que tengo. Somos sólo dos hermanas y recuerdo que, de pequeña, me hubiera encantado ser muchos, pero bastante guerra me dio ésta que tengo; era un trasto de cuidado, jajaja.
Bueno, seguimos a lo nuestro ¿no? En estos días estoy intentando hablar de ropa arregladita y que sirva para Navidad perfectamente. Tampoco hay que ir de estrella de Hollywood. Con ropita mona y vestidita, los niños van perfectos.

Y este es el caso de Monísimos, marca de la que os hablo hoy. Hay modelos en la colección de Ana Avilés, su creadora, realmente ideales para estos días. Yo diría que algunos, incluso, son atrevidos, porque desde luego, van a llamar la atención. Desapercibidos no pasan. Ha hecho un despliegue de imaginación increíble.
Empieza el desfile con un vestido de los que os digo: la niña tiene que tener mucho garbo y salero para llevarlo y no todo el mundo se lo pondría. Pero si se

cumplen los requisitos, puede estar totalmente espectacular con él. De flores, en tono verde agua. Tu hija irá exclusiva y radiante. Fijaos en el vuelo asimétrico y en el cuello tipo gola que tanto se lleva. El estampado me chifla y combinado con camel, como los lazos que lleva en las mangas, no dudéis que causará sensación.
Este otro rosa es tan especial que ha

hecho una serie imitada. Idóneo para cualquier fiesta o evento y además, el tono de rosa es acerdadísimo.
Otro, más tradicional por ser escocés, pero no por la forma, es este rojo de vuelo con talle alto y puntilla por debajo. Lo tenéis en ranita para el niño. Estampa muy Navideña. La trenka del niño y el abrigo de la niña son preciosos también. Un clásico.

Y vamos con el vestido maquillaje: otro con cuello sobrepuesto de plumeti blanco roto. Me enamora y para una niña morenaza… Es ideal el cuello, los puños, esos bolsillos… Además, es atrevido pero delicado a la vez

por el tono. Este lo combinaría con grises y quedaría chapeau.
El vestido azul marino, con lazo, cuello y puños de liberty, es mi favorito.

Arreglado y clásico no dejará a nadie indiferente. ¡Cómo está la niña!
A juego, el niño con bermudas marino y la camisa liberty de cuello mao.

Hay dos conjuntitos monísimos e idóneos totales para las niñas: el azul marino ribeteado de dorado, compuesto de chaquetilla y shorts y el escocés, con blusón y short. El primero más elegante y sobrio, parece como salido de la corte francesa, con esas mangas de vuelo. Me parece super elegante. El segundo,

coquetón con su lazo y sus puntillas con pasacintas rojo en los puños y en el short. Los dos preciosos para niñas un poco mayorcitas.
En las prendas de abrigo, tampoco se queda corta: Mirad este abrigo, totalmente espectacular, de paño en azul marino y llenito de volantes. Hasta el cuello subido en forma de volante. Parece una muñeca antigua. La capota es opcional, claro. Yo no se la pondría a las mayorcitas, ya sabéis. Desde luego, la imaginación al poder.

Similar en la espectacularidad es el abrigo camel, que puede ser con o sin capa (a mí, ya puestos, me chifla con ella). También con volantes y con la capa atada con un lazote. ¿He exagerado? ¿A qué no? Lo que os he dicho: la sensación está servida.

Las capas me chiflan y la tenéis en cuatro colores: camel, rosa, marino y esta que os dejo, que es la más especial por el color. Estilosa, con capucha y lazada en la espalda y otra más para atar la capucha. La veo deliciosa y muy fácil de poner con cualquier cosa. El color, depende de la ropa que tenga la niña, pero todas exquisitas.

Es increíble que me gusten tanto las capas. Yo las tengo de todo tipo, formas y colores. Me parece que dan un aire desenfadado y estiloso total. No dudéis, que acertáis seguro.

Tiene otras cosas monísimas como su nombre indica, y también más ponibles para muchas. Son ideales sus shorts: el escocés, lleno de detalles, ribeteado con volantes en la parte trasera en dorado y en la parte de abajo, en rojo; el naranja, alegre y favorecedor con ese lazote, y el azul de lunares. Todos preciosos, combinados con sus camisas blancas: la “Cervantes”, la

de puntilla o la de la lazada. No sabría cuál elegir, me parecen increíblemente bonitas todas.
Unos blusones muy monos son los rosas con cuello de liberty y el blusón cápsula, de estrellitas también en rosa. Y lo tenéis en peto, en azul para niño pequeño. Todos ponibles y verdaderamente deliciosos.

Para los más pequeñitos, la ranita de liberty con florecitas azules de toda la vida, es una cucada y también en vestidito, monísimo ¿no? Los colores pueden ser intercambiables en los dos modelos.

Pues ya os he presentado a Ana Avilés y a Monísimos con su exclusiva colección. Ahora sólo tenéis que decidiros y poner a vuestros niños de revista. Empieza la Navidad… Pero que conste, que ya sabéis que yo se lo pondría cualquier día un poco especial. En realidad, luego en Navidad la gente no se viste tanto, es más leyenda que otra cosa. Los niños van ideales así en cualquier momento.
Os dejo hasta mañana, que tengo que dar biberones (a mis gatitos, no os vayáis a creer, jajaja).
Una monada de beso