Hola a todos de nuevo.

Paso por aquí para charlar un rato con vosotros.

Ya sabéis que entre mi estado de ánimo, el confinamiento y todo, esto se ha vuelto un mundo raro… Ya iba a cantar.

“Y si quieren saber de mi pasado, es preciso decir una mentira, les diré que llegué de un mundo raro, que no sé del dolor, que triunfé en el amor y que nunca he llorado”…

¡Qué bonita! ¡Cuánto la he cantado a grito pelado cuando estaba sola en casa  y era más pequeña!

Pues parece que nadie se entera muy bien del lío de las fases para salir a la calle.

He estado charlando en el parque, cuando he sacado a Tess y he visto que la gente está bastante desesperada. Nadie coincidía con nadie…¡Madre mía!

He leído un magnífico artículo de Isabel San Sebastián, a quien conozco personalmente y en él confiesa que ha dejado de cantar hace mucho tiempo y que por más que admire el trabajo de los sanitarios y agradezca de corazón su heroico sacrificio cotidiano, cree que los millares de muertos que deja la pandemia, merecen un respeto incompatible con cualquier manifestación festiva. Yo opino igualito.

España está de luto riguroso por mucho que el Presidente del Gobierno se niegue a proclamarlo oficialmente como  si así lograra tapar las consecuencias de su negligente gestión.

España llora y está aterrada ante la crisis tan brutal que se cierne sobre nosotros.

Y aún así, España resistirá al Covid-19, como proclama la canción del Dúo Dinámico, convertida en himno de supervivencia. Bien diferente es

qué precio político pagaremos y si seremos capaces de resistir muchas más comparecencias de Pedro Sánchez en el Congreso (no puedo sufrirlo más), con sus mentiras, su tono despectivo cuando se dirige a la oposición, o a la actitud servil (no soporto el servilismo en nadie) que adopta al dar la réplica a sus socios de Podemos y demás compañeros de viaje hacia el abismo.

¿Cómo va a salir de esta situación un país dirigido por políticos que jamás han levantado la persiana de un negocio ni pagado una contribución a la Seguridad Social y que sólo saben derrochar lo que ganamos otros?

Lo siento, no le soporto.

Tiene una desfachatez asquerosa, profiriendo embuste tras embuste.

No he visto cosa igual desde hace tiempo. De verdad. Y todo, lo afirma sin despeinarse y ufanándose de haber sido pionero en la adopción de medidas de contención de la pandemia, cuando la evidencia, la prensa internacional, etc, lo

señalan como ejemplo de todo lo contrario.

¿A quién pretende engañar?

España no hace test sencillamente porque no los tiene.

No sé quién se estará beneficiando de todo ni quién se está enriqueciendo. Sus amiguetes, eso seguro.

Y España resistirá porque no le queda otra, pero la democracia que nos ampara está seriamente amenazada.

Incluso, yo diría que estamos ante una dictadura encubierta. Y no tan encubierta…

Si Sánchez y sus cómplices consiguen amordazarnos, si logran rendir por hambre a los medios y profesionales que todavía les plantan cara, no habrá quien denuncie sus errores ni ponga límite a sus abusos.

Y eso es exactamente lo que persiguen. Perpetuarse en el poder silenciándolos.

Bueno, ya veis, que hasta el momento, ni una palabra de moda infantil, ni moda de nada.

Pero hay situaciones que me enervan y repito, que, como la vida me ha dado un palo de muerte este año, a mí, ya no me calla nadie. ¡Naadie!

Pero por si a alguien le interesa lo uno (política o moda) o lo otro, estáis viendo colecciones preciosas de niños y bebés.

De niños pequeños que aún no entienden de estas maldades, a Dios gracias.

Hablo de “Mi Canesú”, marca que desde hace varios años, vuelve loca a las madres, porque son conjuntos y prendas monísimas, coordinadas de forma ideal y con telas preciosas , cómodas y frescas para el verano. Los niños de siempre, los que me gustan a mí.

Tienen varias colecciones, aunque me he ceñido a la colección  Bahamas y a la colección La Habana. Creo que resumen muy bien el estilo y fin de esta marca.

Así que ya estáis viendo rayas divinas, combinables con  muchas cosas, pero sobre todo, con todo lo vaquero, así como libertys, vichys, lo de siempre y bonito de toda la vida.

En la colección Bahamas, el denim es irresistible, ya lo habéis visto. Blusitas con lazada, braguitas, camisas…

Todos maravillosos, y con el toque especial de esta marca, que todo lo que toca, lo convierte en oro…

Fiajos en las blusitas de lazadas denim del principio…

Con unas braguitas de volantes, un pañuelo en la coleta, un poco de imaginación y buen gusto….¡Niña diez!

Las rayas y colores de esta colección me apasionan. Son las rayas Blue Lagoon y entre verde mar, crudo y azul, resuelven la maravilla.

Tanto para camisa del niño, como para braguita de la niña, vestido, etc.

También los culottes denim para los más bebotes. Todo es mágico en esta colección, de la que os dejo las fotos que puedo.

Tampoco os olvidéis del precioso liberty, cuajado de flores irresistibles y coloridas para la estación más calurosa del año.

Blusón con lazadas lenceras, que no me puede gustar más. (Ya veis que no llevo un orden lógico, hoy)

La camisa del niño pequeño, ideal con unas bermudas vaqueras o con pantalones largos…

El peto bombacho de liberty, combinable al máximo, el culotte… Todo me lleva a esa infancia tan feliz que tuve.

A mis veraneos en Suances y en San Sebastián, cuando ir a Biarritz a comprar telas para que mi prima nos hiciera los primeros “biquinis” a su hermana y a mí, era todo un secreto…

¡Qué recuerdos! ¡Qué infancia tan bonita tuve y qué poco la valoré, claro, por la edad!

Ahora me doy cuenta de lo feliz que fui. Ahora mismo, en los que los

cimientos de mi vida se tambalean de forma escandalosa y me encuentro más sola y perdida que nunca…

¡Nadie sabe lo que vale la infancia! Y eso, pese a que hay niños que nunca la tienen. Eso sí que es un horror.

La familia de limoncitos dentro de la misma colección, otra oleada de

aire fresco para nuestros hijos.

Cosas bonitas, pero sencillas, sin que parezcan repollos, como decía mi marido de la famosa “Fátima Pompón”, que sólo vestía de terciopelo negro y blusas blancas… ¡Pobre! Pero cómo nos reíamos…

Cualquier cosa, era motivo de risa entre él y yo. Teníamos una complicidad muy difícil de describir, casi imposible…. Y por desgracia, madrugó la muerte y se lo llevó hace dos meses y medio. Me parece mentira, pero es verdad.

Y con este horror, tengo que seguir viviendo.

En la colección La Habana, me chiflan las rayas tan especiales de los petos, las ranitas , etc, que son de color dorado, limonada y rosa caracola. (Más arriba, qué caos)

Así los definiríamos nosotros mismos de pequeños. Los canguros para cuando refresca… Todo combinado con beige o con vaqueros y perfecto.

Por supuesto, no faltan los deliciosos petitos, imprescindibles en esta marca. Como las braguitas y blusitas que te las pones y no te lo quitas en todo el día…

Combinado con todo lo de la misma marca, en punto, no tiene similar, ni siquiera parecido de bonito.

¡Bueno, perdón, excepto lo que nos hacía mi madre a mi hermana y a mí!

¡Cómo dudarlo!  En esto, sí le doy la razón. En esto, que no en todo, ni muchísimo menos.

Y también divinas, las rayas retro (arriba) que podéis ver en los jesusitos, en los petitos,

en mil cosas…

Rayas contundentes y bien definidas, que perfectamente combinadas, dan un resultado de no creer.

¡Ya me diréis si no os está gustando todo lo que veis!

Y como, aparte ser caótica, ahora mismo, mi vida es un auténtico caos, me dejaba los vichys, que tampoco faltan jamás en “Mi Canesú”.

En verde agua, divinos. Ya los habéis visto arriba.

Tanto los canguros, como las ranitas, cualquier cosa le viene bien al vichy, tan de siempre, tan auténtico y bonito…

Quiero que las mamás de niños pequeños, las que tienen mil ilusiones por cumplir con sus hijos, se recreen bien y sepan  lo que es vestir bien a los niños, que de eso, creo que sé un rato….

Tenéis para todas las colecciones, los suéter de algodón con lacitos, impresionantes de bonitos, capotas, chaquetas, patucos, etc.

Todos los colores van a la perfección con cualquiera de sus colecciones.

Todo hecho para que nosotras no tengamos que discurrir mucho y eso que eso antes, a mí no me gustaba, ya que quería elegir cosa por cosa, lo que quería para mis hijos.

Ahora, entre el trabajo y que las madres son más comodonas (la mayoría, no vaya a herir susceptibilidades), las marcas te lo ponen en bandeja

prácticamente.

De todas formas, como os he dicho, cualquier colección que queráis de esta marca, será un acierto total, ya que es todo superior.

Sé que no estoy explicando todo como siempre, pero tampoco estoy yo como siempre. Ni muchísimo menos.

Espero que me entendáis. Tengo mil cosas en la cabeza y no termino de resolver ninguna.

Toda la vida he estado protegida, demasiado, tal vez.

Y ahora, me doy cuenta de que me encuentro sola, por primera vez en la vida.

Como os dije el otro día, con mis hijos, un puñado de buenos amigos, algún amor al que le di calabazas en su día y ahora se quiere apuntar al carro de mi segunda vida… (Sergio y Carlos, sabéis que lo digo de broma) y poco más.

A mis amigas de siempre, a mis primas queridas  (no todas son queridas), mis cuñadas y como siempre, a Auren, Charo y Miguel.

Éste (sé que lo leerá), en especial, ya que, desde hace dos meses y medio, no falla y está para mí y para mi dolor. Siempre que me hace falta.

Siempre le quise y qué buen ojo tengo…

Espero que mi interrupción de nuevo en su vida, no le cree ningún problema, que bastantes le estoy dando ya.

Espero de todo corazón, que, con un poco de tiempo, calma y cordura, pueda recomponer mi corazón roto y que pueda formar parte de su vida.

De una vida un poco alegre, en la que cantemos, nos riamos a carcajadas y disfrutemos el uno del otro como a mí me gustaría.

Es sólo un deseo. Ojalá llegue a cumplirse.

De momento, sólo, mi más completa gratitud, mi ¿cariño? No me gusta nada esa palabra. Le quiero y punto.

Soy la que más le quiere y él está de acuerdo hasta el momento, a no ser que me haya engañado.

Sólo quiero lo mejor para él, que todo lo bueno le acompañe siempre.

Creo que ya es bastante feliz, pero si lo fuera del todo, me daría por satisfecha.

Un beso insatisfecho