
¿Qué tal el fin de semana? ¿ Corto, no? A mí me ha cundido bastante, ayer por la noche estuvimos en el primer aniversario de la tienda que tiene César, un amigo de Burgos. Es de ropa de mujer y complementos y se llama “Dos Madrid”, en la calle Campoamor 2, enfrente de las SGAE. Os la recomiendo porque tiene cosas ideales.

Hubo mucha gente, y varios de Burgos, claro, por lo que pasamos un rato estupendo. ¡Hasta me compré un conjunto! Jajaja, qué raro…

Cuando acabó, nos fuimos a cenar algo por ahí paseando y, he de reconocer, que Madrid es bonito. Y tiene mucha vida. ¿Véis?, ya estoy casi aclimatada del todo.
Yo sigo con mi mundo de ropa infantil, todo el día dándole vueltas, me encanta. Hoy os voy a hablar de Maria Gorda, una marca portuguesa que me chifla y espero que a vosotros también. Me encanta Portugal desde que fui en tercero de carrera a Lisboa, con su aspecto decadente, pero

nostálgico, precioso, Oporto, y, sobretodo, Sintra, que me encandiló desde el primer segundo. ¡Qué maravilla, qué paisajes! Me pareció un paraíso y además, lo pasamos como nunca. También me gusta su comida, sus toallas y albornoces… y esos fados… ¡Ayyyy! Lo más. Me super enamoran, hacen que se me ponga la piel de gallina y me entran hasta ganas de llorar. De verdad.
Y además, tiene marcas de ropa infantil increíblemente bonitas, como ésta de la que os cuento hoy.

Y si os dais cuenta, lo resuelve todo con unas telas bonitas, unos diseños sencillos y clásicos y un poco de imaginación. El resultado es espectacular, a mi más no me puede gustar. Tiene ropa desde recién nacido hasta los doce años y lleva en el mercado desde el 2002 con la misma filosofía. Éxito rotundo.
La estrella de sus coleccciones son los monos de niñas (me entusiasman) y los blusones con o sin capucha. Me chiflan y con esas telas, quedan de cuento.

En la lana es insuperable también. Tiene conjuntos para bebé de morir. Y los jerseys y chaquetas de mayorcitos. Lo mismo pasa con los cubrepañales, divinos, en lunares, lisos, de cuadritos…

A juego con blusitas, ranitas para más mayorcitas, bombachos… ¡Mirad el resultado! Y los monos para pequeñitas a juego de las mayores son deliciosos… Bueno, que me encanta todo, todo, todo.

Los vestidos, con pequeños detalles, con frunces, al igual que los monos, y con esas telas de florecitas o cuadritos hace que las niñas tengan un aire dulce y encantador a la vista. Son verdaderamente preciosos.

Fijaos en el simple detalle en la espalda de este vestido de cuadritos… o el vestido gris, con sus tres botones en un lateral… Sin complicaciones e ideales. Son de un gusto exquisito.
También los niños van clásicos, guapos, con sus bermudas, sus jerseys de capucha con bolsillos delanteros, esas camisas de cuadros con capucha… ¡Estilazo total!

Las camisas blancas son preciosas, con volante en el cuello, con detalles en la pechera… Divinas. Y van con todo. También tiene las camisitas de algodón con volante con tiras de colores para los pequeñines, para conjuntarlos con culottes o monos… Son cuquísimas.

De los monos, me han enamorado el de cuadros grises y negros (vaya con el negro este año…), fruncido en la pechera y absolutamente precioso. Me lo imagino combinado con un chaquetón o capa gris y botas y ¡Dios mío, que niña…!

Y el otro que no se me va de la cabeza es el verde con flores rosas…

Aquí lo han combinado con el chaleco crudo, pero hay que pensar en el frío. Yo se lo pondría con verdes apagados, con una chaqueta suya o cualquier otra que le vaya, y también con abrigo, capa o chaquetón en esos verdes (o más oscuros), que van a la perfección. Son conjuntos increíbles.

Para los vestidos, igual. Los de cuadritos me encantan con los complementos en gris. Sin embargo, al vestido gris (de un gusto fuera de toda duda) lo animaría con granates, rojos o, ya sabéis, con camel quedaría

delicioso, super elegante. Con zapatos o bailarinas a juego, te queda la niña como un pincel.
La camisa de niño en tonos naranjas me parece de un estilazo increíble y la combinaría con chocolates. Me chifla

el naranja con chocolate. Y lo mismo, de nuevo con color chocolate, combinaría los jerseys del niño, tanto el rosa como el azul, para que no les haga demasiado dulces, sobre todo a los mayores.
Los monos grisáceos de flores azules se los pondría a las pequeñitas con chaqueta azul y a las mayores, o bien un azulón muy logrado, o gris… Es tan bonito…

Podéis comprar todo a través de su página de Facebook, y os contestan rapidísimo… ¡Elena, encarga un mono de estos a las niñas, por favor! Les pega totalmente…
Los blusones de cuadraditos con bolsillo delantero y los azules de flores me encantan con pantalones vaqueros, o con sus short o pantalones de peto grises. ¡Qué azul tan divino! Luego, una capa y unas botas y no las supera nada ni nadie.


¿Qué más deciros de Maria Gorda? Que no puede ser más de mi gusto y, lo que os he dicho, sin los detalles complicados que muchas marcas incorporan a sus colecciones y los hacen imposibles… ¡Qué manía de recargar a los niños tanto!
También tiene complementos como las toallas, divinas (ya sabéis de la calidad de las toallas portuguesas), combinadas con sus exquisitas telas… Preciosísimas. Y para un regalo, quedas de lujo.

Bueno, me declaro fan incondicional de esta firma. Creo que muchos de mis lectores opinarán lo mismo. Gusto por doquier.
Portugal, sus fados y su ropa infantil me han conquistado. De Cristiano Ronaldo no hablo, que da lugar a otro post… jajaja.
Un beijinho desde España
Que recuerdos de nuestro viaje a Portugal,he vuelto varias veces y me encanta, con ese sabor decadente y algo nostalgico.Esta colección que nos enseñas tiene mucho gusto y las blusas tan romànticas y los monos son una pasada…muchos besos trabajadora incansable