
Hoy puede ser un gran día… Me lo digo a mí misma, porque tengo tantas cosas que hacer, que no sé ni por dónde empezar.
Almudena se ha ido a Burgos hasta el domingo, así que una menos.
Pero aun así, tengo la cabeza como un bombo.
Pedidos para bodas, operan a un amigo de la cadera, recados múltiples, una boda a la que aún no tengo claro si voy a ir y estoy sin modelo, clase de zumba que llevo varios días sin ir, peluquería, recoger unos cuadros…

Mil cosas más, que esto os parecerán bobadas, pero todo no se puede contar, claro, jajaja.

En fin, de momento, voy a ir poco a poco que ya sabéis el refrán…
El caso es que tenemos reservado el sitio ya en Galicia y

volvemos justo el día de la boda. ¿Qué haríais? Es de la hija de mi prima y hemos estado toda la vida muy unidas.

Me da pena no ir, pero entre el calorazo horroroso que va a hacer y perder un día de vacaciones en el paraíso, además de comprar modelo,

me da una pereza horrorosa.
Bueno, iremos viendo.
De momento, os dejo un segundo, que llaman a la puerta. ¡Lo que me faltabaaaa!
Retomo hoy, domingo. No me dio tiempo a seguir y veremos hoy. En Madrid estamos de puente y estamos un poco en plan reláx.
Quería hablaros de Lunatta, una marca nueva sevillana, con mucho gusto y que ha comenzado con mucha ilusión, Isabel, su diseñadora. Ropa de toda la vida, clásica y mona de niñas y bebés. La opción ideal para las que tengáis buen gusto y no os queráis gastar mucho dinero. Además abarca una franja importante de edad.

A mí, enseguida me conquistó porque es mi estilo totalmente. Vende on line y de momento, le va muy bien.
Y creo que aún le seguirá yendo mejor, ya que, como os digo, la ropa lo merece y las niñas están monísimas con cualquiera de sus modelos.

Veamos… Me ha encantado casi todo, así que os voy enseñando. El modelo Jacinta camisero es una maravilla para cualquier día o para un día especial, con los complementos adecuados. Para niñas de hasta seis años, lo hacen en un crepe gris malva o en crepe de plumetti rosa nude, que vemos aquí.

Ya veis qué sencillez tan bonita… Una especie de escote en pico a modo de babero con volantes. ¡Monísimo! Y como os digo, con una coronita de flores, queda de lo más coquetón para alguna celebración.
El buen gusto y lo bien de precio que está todo, va a causar furor entre muchas; tiempo al tiempo.
Ideal también el modelo Julieta, en dos colores: gris malva o mostaza, los dos preciosos.

Lleva un corte debajo del pecho y botonadura delantera, cuello con volante y mangas fruncidas.
Es el clásico vestido sencillo y encantador. Muy versátil también, como podéis ver.

No tienen nada especial. Sólo que son muy monos y con complementos bonitos, pueden ser una bomba.

Para mayorcitas, de entre ocho y catorce años, el modelo Jacinta ablusado que veis aquí. Lleva elático en la cintura y se confecciona en crepe de plumetti rosa nude o buganvilla, que es éste.

Niñas sencillas y con encanto. Muy apropiados para la edad y para pasar un verano cómodas, libres, frescas…
Para las que buscáis modelos bonitos para Arras, sin dejaros la

hijuela, qué cosa tan ideal el modelo Olimpia en lino. Exquisito del todo, con escote recto y tirantes en forma de uve.

Lleva una sobrefalda en batista organdizada. ¡No me digáis cómo está la niña con él! Es una maravilla y con los complementos perfectos, una niña especial e ideal. Lo tiene todo.
Además de este gris perla, se hace en rosa empolvado. Cualquier opción, preciosa.
Aquí la veis, junto a la pequeñita, que lleva el modelo Carmela, que es otra maravilla y es que quien tiene gusto, pues lo tiene, qué bobada.

Precioso, con dos tablas en el bajo y con una mañanita tipo Maria Antonieta con entredós y puntillas valencie. ¿Cómo las veis?
No me pueden gustar más. En una boda, causarán sensación , seguro.
La capotita holandesa es opcional, pero para una niña pequeñita, la veo imprescindible. La de la talla 12 meses, también lleva braguita a juego. ¡Una auténtica delicia!

También tenéis el modelo Olimpia en crepe blanco o negro, igual de mono, pero menos “arreglado” que el de lino, aunque también queda perfecto para llevar las Arras. No lleva la sobrefalda en batista, como veis.

Lo podéis encargar en crepe natural con capa opcional de gasa crudo y las niñas irán como auténticos ángeles.

¿Qué os parece Lunatta? ¡Hasta el nombre lo tiene bonito.

Un clásico perfecto para algún día especial o también para Arras (repito, todo depende de los complementos), es el vestido Ángela gris, con mangas con tiras bordadas y jaretas en el pecho, tablas en la falda y volantón.

Para invitadas, fetén. Siempre me han encantado este tipo de vestidos que jamás pasarán de moda.

En bambula gris cien por cien algodón y del estilo, el vestido Sofía, monísimo también. Con corte debajo del pecho y tablones en la falda, lleva unas divinas mangas de tul bordado.

Forrado en batista de algodón, también se confecciona en crepe de verano con plumetti negro. ¡Una preciosidad!
No hay nada más que imaginárselo.

De nuevo para las mayores, el vestido Emma, sencillo y con muchísimo encanto. Con escote halter de doble volante, de crepe de seda y forrado en punto, suelto pero con lazada en la cintura.

Lo veo estilosísimo para las niñas a partir de los diez años y se hace en gris malva y en color sandía, que es el que estáis viendo.
¡Un golpe de frescura nos llega con esta marca andaluza! Para días muy calurosos, que de esto, saben un rato.

El vestido Jimena, también muy mono, con corte en forma de uve en el pecho y rematado con volantito. Los hombros al aire.


Confeccionado en bambula de viscosa, muy fresquito y cómodo.
De niñas bebé, ya os he enseñado el vestido Carmela con mañanita, que es que no me puede privar más.
¿Cómo veis a estos dos bombones?
Las veo tan ideales, tan lejos de las pomposidades y los miles de volantes que abundan por ahí…
Y otro sensacional también es el

Martina, de lino con tablitas y entredoses y la posibilidad de incluir la capota holandesa, lo que yo haría sin dudar.
¡Qué monería de niña! Tiras bordadas cien por cien algodón, también puede ser en lino con estampado de flores.
Modelos eternos… ¡Cuánto tiempo adorándolos y cuánto tiempo sin verlos en las bodas! Y qué precios, que todo cuenta.

Este estilo de vestidos es el que siempre se ha llevado para eventos bonitos. Lo que pasa es que la gente está perdiendo el norte, con tanta marca emperifollada. ¡Qué pena!

Os enseño monerías de su canastilla como las rebecas de manga ranglan, que veis aquí. Se hace en blanco, celeste, rosa empolvado y gris. Por encargo. ¡Cómo es!

Y divina, la rebeca sin mangas, perfecta para el calorazo y una cucada auténtica. En los mismos cuatro colores, por encargo. Se tarda de quince a veinte días y más no me pueden gustar.

¡Mabel, qué gusto tienes, por Dios!
Pocholote, el batón Manuela, de batista de algodón muy fina. El lazo del entredós, que aquí va en gris, se puede encargar en varios colores. Se hace igualmente por encargo, como las rebecas.

No hay nada tan mono como lo de siempre, lo de antes…

Para los día de calor infernal, los bebés van de lujo con los bodys de punto hechos a mano, como éste que veis aquí. En los cuatro colores que ya os he dicho, también se hacen por encargo. Punto hecho a mano, todo un lujo.
Como también las capotas, tanto la unisex como la holandesa. Por encargo y en los cuatro colores. ¡Una monería más!


Volvemos a las mayorcitas con su exquisito mono, confeccionado en politecno color beige-crudo. Con botones de nacar, peto con tirantes y pantalón con tablas delanteras, sienta de cine y tiene un estilazo colosal.

Mirad cómo le sienta a la niña, que lleva una chaqueta divina en gris.
No hay nada como estas prendas para pasar un verano sensacional, cómodas y estilosas.

¡Da gusto ver a niñas así! Tanto empalago de volantes me llega a hacer pensar que tengo un gusto raro y en absoluto.
Enseguida me doy cuenta de que hay gente demasiado recargada, lo que no favorece a nadie. ¡Menos siempre es más!

Muy estiloso también, el pantalón Alma con lazada central. Es recto, levemente acampanado y a las niñas les chifla.
Se hace en tonos grises y también en

negro con crudo, los dos monísimos.
Los llevan con las blusas de la marca, que son igualmente sencillas y estilosas. La negra, la camisa Lunatta, con hombros descubiertos, cuello con vivo y volantito y abotonada en la parte delantera.

O la Valentina, de satén liso, en rosa, abotonada en la espalda y con volante en el cuello. La lleva con el pantalón con lazada central en rosa con estampado de libélulas.

Moda para preadolescentes sencilla, estilosa y cómoda, como os he dicho.

No hace falta complicarse mucho la vida ni dejarse un dineral para ir bien vestida.
Creo que “Lunatta”, nos lo deja bastante claro con esta colección de verano.

Bebés, pequeñitas y mayorcitas,
vestidas de lujo en cuestión de gusto y materiales bonitos de toda la vida de Dios.
¡A ver si aprenden un poco todas esas madres que cuanto más adornos lleva un vestido, más les gusta!
Y cueste lo que cueste. A mí, algunas pobres niñas me dan pena, pero en fin, sobre gustos…
Me voy a airear un poco con mi marido y Tess, que hace un día estupendo.
Un beso sensato y encantador