
¡Señoras y señores! Se abrió la veda… Ya voy a hablaros hoy algo de Ceremonia, pero a ver, poquito a poco, que hay tiempo, por favor…
Esto, lo digo al principio, porque si no, sé de alguna que ya no me habla más, jajaja.

¿Os creéis que con el día que hace, pega hablar de los días maravillosos en los que se lucirán todas estas maravillas?
Que síiiii… Que ya sé que hay que estar preparados, porque si no, después te quedas sin nada. Pero, advertidas estáis de que hablaré más y más otros días.
Aunque ¿quién sabe si hoy algunas encuentran la solución a sus desvelos?

Bueno, tengo invitada a comer (una amiga de mi hija, claro). Se presentaron ayer a las 2 de la madrugada. Venían de estudiar de la biblioteca y claro, es que separadas no pueden estudiar porque se concentran mejor juntas.

Esa explicación me acaban de dar. Yo ahí no les puedo decir nada, porque, prácticamente toda la carrera la estudié o en casa de mi amiga Adela, o ella en la mía. ¡Qué recuerdos!


Ya lo he contado más veces, pero es que son tan intensos… Concentrarnos no sé si nos concentrábamos mucho, pero reírnos… ¡a tope! Y después, no nos ha ido nada mal a ninguna de las dos, así que, va a ser que es verdad que estudiar en compañía, por lo menos, anima y motiva. Eso, desde luego.

Yo era puro pesimismo y ella, todo lo contrario. Así que, siempre nos hemos compenetrado a la perfección. Con una mirada, nos entendemos.

Ahora están comiendo los niños (los chicos) y voy a bajar con ellos, porque esto parece un hostal.
No os preocupéis, almas cándidas, que no os dejo así… Ahora vuelvo.

Mientras voy y vuelvo, hablo por teléfono, como y quedo con una marca en Fimi, así que no sé si haré algo bien… Voy como un terremoto todo el día.
Ya estoy aquí. ¿Veis? En un pis pas.
Bueno, pues visto que no me lo vais a perdonar, vamos a hablar hoy de ocasiones especiales. Vamos a dejarlo así. Ni Comunión ni arras de momento.
Pero sí que es mucha la gente que me pide ideas y sugerencias para los invitados a una Comunión, Boda y todo tipo de eventos. Tal vez sea lo más difícil, no os creáis.

Y como siempre, voy a intentar, empezar a despejar dudas y a dar ideas sobre ello. ¿ Bien, no?
Por ejemplo, mi querida y admirada Hortensia Maeso, que es una maestra en todo esto, nos enseña en su nueva colección de Les Enfants de L´Edén, llamada Pouppés, varios modelos para estas ocasiones tan super especiales, en las que todas queremos que nuestros niños y adolescentes brillen con luz propia.
La edad más difícil es la pre-adolescencia para estos eventos. He visto niñas vestidas con ropa de niñona, que, dada su altura y sus curvas (a esta edad es increíble cómo están ya algunas), resultan realmente ridículas.

Hortensia lo sabe a la perfección y por eso, con el vestido Amapola, me parece a mí, que niñas de estas edades, van divinas. Es un vestido de talle alto, con punto en el cuerpo y falda de tul con volantes dejándose caer, que son una maravilla. El Agatha, también ideal. Como complementos, un casquete divino, que le da estilazo a la que lo tenga, botines… Mezclando, consigue resultados sensacionales.

¿Cómo las veis? Yo, perpleja me quedo. Y mira que soy clásica. Pero ante un genio, no me queda más que rendirme. Las niñas están como dos bombones. Llamarán la atención allí donde vayan. Con seguridad, siempre con seguridad… recordadlo.

Monísimo el vestido gris perla, asimétrico y también con tules y tocado en la frente. ¡Espectacular! Para una Ceremonia de parientes cercanos o amigos íntimos, perfecta.

Exquisito del todo, el vestido Lilian, también asimétrico, con un estampado dulce y transparencias. Lo veo perfecto para ser la sobrina de los novios, por ejemplo. Delicioso totalmente… Un vestido para recordar siempre.

Con unas bailarinas crema o rosas… da el campanazo.

Otra maravilla, el vestido Nayra, blanco, sin mangas y con encajes y flores rosas en la cintura para acabar en una falda como de plumetti, con los círculos bien grandes. ¡Olé!

Y bueno, ¿qué digo del vestido Eva, que además hace honor a mi nombre? Sencillamente, me apasiona. La mezcla suave del crudo con el rosa pálido siempre me ha encantado y con este diseño, enamorado, es la palabra.
Fijaos bien… varias capas, el cuerpo en crema, el rosa palidísimo, los tocados de encaje con flores en la frente… parecen de una película. Como diseñado por los ángeles, de verdad.
Absolutamente divinos para una boda. Sea de quien sea. El caso es lucir a semejante maravilla de niñas vestidas así.

Hasta la niña pequeña está de morir. Está pintada para el catálogo, pero si lo veis muy exagerado, sencillamente con quitarle el sombrero, arreglado.
Y lleváis un ramillete de niñas de auténtico lujo. Os lo digo yo. ¡Que es muy difícil encontrar algo tan bonito, de verdad!

Monísimo y estiloso, el vestido Estefanía, para cualquier celebración. En los mismos tonos dulces, la falda de volantes hace juego con el estiloso foulard grandote. ¡ Preciosoooo!

El vestido Raquel aquí lo tenéis y vosotras mismas juzgáis. Bonito es maravilloso, pero como os digo siempre, ojito con la niña. O se lo simplificais, quitándole el sombrero y los botínes, o la niña tiene que tener la gracia y maestría precisas para llevarlo.

El vestido Rudy, en rosa más intenso y también de tul, maravilloso. Tanto para una boda, a la que irían perfectas, como para una Comunión o evento especial. Divino, tanto con la florota en la cintura, como la del lazo de raso y sombrero de rafia.

Los veo divinos para la época, favorecedores, de llamar la atención. Son de Hortensia Maeso, ¿qué os voy a decir que no sepáis muchas?

Del mismo estilo, pero en un gris suave, perlado, con cuerpo de punto, tules, casquetes… el vestido Verónica, para quienes sean más amantes de estos tonos, pero absolutamente igual de arrebatador.
Y como vengo diciendo, es un mérito increíble la creación de estas maravillas para estas edades, porque para más pequeños, van ideales con cualquiera de las fantásticas colecciones de otras marcas españolas, un poco arregladitas. ¿No creéis?

Hay muchas colecciones infantiles que son absolutamente idóneas para celebraciones, aunque no lo denominen propiamente así. Lo difícil es esto. Poner divinas a niñas en edades que a muchas, les darías una bofetada. Y no digo ninguna tontería.
Aún más complicado: las señoritas de la casa. Esas que ya no son ni niñas ni mujeres. Pues también Hortensia Maeso ha dado en el clavo, como siempre.

Y si no, decidme, qué opinión tenéis de este vestido animal print, asimétrico, con transparencias, bolso a juego, sandalias… ¿no lo veis idóneo? Estilosísimo, lo mires por donde lo mires. En cualquier sitio, quedas de atuténtico lujo.

¿O el vestido cortito, atrevido, de volantes en rosa palo con flores en la cintura y bárbaro que veis aquí? Pues que una jovencita se vuelve loca y se muere por llevarlo. Ojito con los complementos y con que no vaya demasiado exagerada.
El vestido es divino, pero hay que poner límites.

Y lo mismo con este vestido de tul negro: atrevido, pero sin perder la niña que llevan dentro. De tul la falda, cortito y con transparencias de plumetti en la parte superior, aparte de las flores super divinas en el escote. Me encantaría hasta para mí… pero reconozco que iría más adecuada mi hija. ¡Chiflante!
Y ya hablaremos más de Hortensia Maeso y sus Enfants de L´Edén, que dan para mucho, muchísimoooo.

Voy a enseñaros Ceremonia ahora de la marca “Olacaracola”, que también me ha parecido muy apropiada para esas madres que quieren algo diferente, un toque, un algo que no sea «siempre lo de siempre».

Aunque lo que sea ideal siempre lo será y punto. Lo digo para las super clásicas, que no se preocupen, que si un vestido es bonito, lo será.

Yo le veo más problema a la edad, a la franja de entre 13 y 19 años, que corren un peligro… Unas, por niñonas y las otras, ya sabéis… por un poco “elementillos”, jajaja.
No, de verdad que hay que tener mucho cuidado con esto. Si yo os contara…

En fin, “Olacaracola”, quiere demostrarnos que sus diseños son especiales y yo creo que lo ha conseguido. Empezaron hace poco y apostaron por una nueva manera de entender la moda infantil.

Mezclas de todo tipo, tocados, tules con chaquetas vaqueras, etc… pero todo con mucho gusto hecho, que es lo que importa, al fin y al cabo.
Bueno, y que la niña esté favorecida… eso , por supuesto.
Y mira por donde que yo, tan clasicona en esto de la moda infantil, he sucumbido ante el encanto de muchos de sus diseños.
Claro, ya sabéis… siempre dentro de un orden y de que no se nos vaya de las manos.

Y sigo con algo super arriesgado, pero que si se hace bien, las niñas-mujercitas, pueden ir de revista: los vestidos de tul y flores superpuestas con chaquetas que parecen de crochet y los tocaditos a juego.

Pues… qué deciros. Que si la niña vale para llevarlo, vale y estará maravillosa. Eso sí, tiene que ser un evento, muy evento, porque si no, los tocados y demás serían un poco demasiado…
Pero si la niña va con seguridad, diciendo: “aquí estoy yo más bonita que ninguna”, como la canción, esa niña triunfará. Sin duda.

Personalmente, el rosa, me parece encantador. Y mira que soy de crudos, pero lo veo super especial. Tal vez, a la niña de la foto, le quede más ajustado, más pequeño y eso, para mí, hace mucho. No hay nada más feo que el que algo te quede grande.
Otro conjunto que me chifla para estas edades es la falda beige de volantes, con la blusa ideal, también en crudo subida hacia arriba y la chaquetilla-cazadora en rosa pálido de manga francesa, con volantitos en el cuello y en los puños.

La suavidad de los tonos contrasta con lo atrevido del conjunto y me parece divino. Las botas las dejaría ese día en casa y le pondría unas bailarinas rosa pálido, con lo que yo creo, estaría mucho mejor. Pero esa es mi opinión. Seguro que muchas se mueren por llevarlas.

Otro conjunto de falda en crudo, super original, distinto a lo que hemos visto hasta ahora, es éste, con la chaquetilla, también cruda, con cuello redondo abierto con flecos tostados y también en el bajo y en los puños de manga francesa.

El sombrerito lo veo super adecuado con este conjunto. Siempre que sea un evento de alguien muy próximo… Vamos, que la niña está de lujo, qué bobadas.
Está claro que los blancos, crudos y tules son los protagonistas de esta primavera-verano. Ya veis a estas dos jovencitas bromeando con unos vestidos divinos y con pequeños tocados, que a mí me vuelven loca (tengo debilidad por ellos, para mí).


Otro vestido entre hippie y elegante: el blanco de flecos de esta niña, sin mangas, muy trabajado, con un cuerpo bárbaro y una falda cuajada de flores. Y sin embargo, no da sensación de empacho alguno. Todo lo contrario.

Lo mismo sucede con este vestido rosa pálido, llenito de detalles y que parece de una simpleza y elegancia increíble. Fijaos: flores rosas en la cintura, más flores superpuestas en la falda y plumas en el bajo. Pero es increíblemente bonito, porque la parte de arriba es sencilla como nada, sin mangas, con los pliegues justos…¡Divinooo!

Más ejemplos de vestidos vaporosos blancos con chaquetitas cortas de fantasía: estas dos niñas, muy monas, pero que yo, para Ceremonia, tranquilamente les quitaría las zapatillas. Reconozco que es una idea original y que van monas, pero es demasiado para mí.
Con unas bailarinas bonitas, mil veces mejor.

Aquí las veis: más exageradas si cabe en los colores, con sus vestidos con flores y sus chaquetillas vaqueras, pero con bailarinas. Van originales y desde luego, a nadie dejarán indiferente.
Vamos, que para estas edades, veo que solucionan de una forma encantadora la papeleta de muchas madres.

Otra monada es este vestido, con el cuerpo blanco y falda crema de fantasía, con su inseparable chaquetilla vaquera. Eso sí, no es una chaqueta vaquera cualquiera… Con sus bailarinas, la veo mona, graciosa, estilosa y adecuadísima para su edad.

Como este vestido suelto crudo, con dos filas de flores rosas superpuestas en el bajo y chaqueta vaquera con flores al tono, haciendo juego además con los puños divinos de la cazadora.

Lo que os digo: revolución en las Ceremonias con Olacaracola y para bien. Ya estoy harta de ver, como os he dicho, o niñas mayorcísimas vestidas demasiado infantiles o todo lo contrario, lo que me pone enferma.

¡Un poco más de gusto, por favor! Y de estilo… Buena lección nos da esta marca.
Aquí vemos a otra niña, con el mismo estilo, pero con la falda de flores y volantes. Eso ya depende del gusto de cada una. Yo soy más de lisos. Y desde luego, los cremas con el rosa pálido es una combinación sublime.

Que luego, los conjuntos ya son bastante especiales… Encima, no las vas a poner de naranja o turquesa… No, francamente, es una colección de lujo, muy bien pensada.

Yo he elegido a esta franja de edad, pero para las que os guste este estilo, que sepáis que tienen desde la talla 2… Mirad a esta niñita cómo va: con vestido blanco de tul y chaquetilla con aplicaciones ocres. Mona está monísima, pero lo que os digo… en esa edad, ya depende del gusto de cada una.
Os recomiendo entrar en su página y observad bien todo. Tienen cosas super, super especiales y distintas.
Olacaracola ha supuesto un soplo de aire fresco en las Ceremonias, que estaban tan limitadas.

Creo que os he enseñado dos marcas dignas de admiración ¿eh? Y porque no me da tiempo a comentarlas más, que si no…
Mi más sincera enhorabuena a las dos. A cada una por lo suyo.¡Excepcionales y de lo poco de este estilo que tenemos en España!
Volveré con muchas más ideas. Prometido.
Un beso revolucionario
Perfecto como siempre, Eva.
Un millón de gracias, Yolanda. Un beso.
Eva,que tiempos ….cuando estudiabamos juntas .Yo a veces pienso que el tiempo ha pasado muy rápido pero por otro lado,ahora lo recuerdo muy cercano cuando mi hija María va a estudiar a la biblioteca.Esto es en el fondo el miedo a envejecer y los buenos recuerdos de unos de las mejores momentos de nuestras vidas.Cuando leía tu post de hoy,que por cierto que marcas y vestidos tan monos,justo cuando vi el negro de tul y plumeti pensé lo mismo que tu has escrito…Me parece divino!!Juventud divino tesoro!!!
Y por cierto como ya no quedamos para estudiar podiamos quedar para vernos..
Un besazo