
¡Ultimísima semana de abril! Y como bien dice el refrán…”en abril, aguas mil”. Aquí no llovía así desde hacía tiempo y lo cierto es que es un asco, sobre todo, en fin de semana. Ni he salido de casa en todo el día. La única, como siempre, mi hija, que, como no tuvo bastante la semana anterior con la jornada maratoniana entre clases y trabajo, vino con ganas de más viajes y se ha ido el fin de semana a una casa rural con sus amigos.

Os lo digo en serio, ahora que está a la vuelta de la esquina la “operación bikini”: si alguien quiere perder un par de kilos o tres, se la cedo un fin de semana y objetivo conseguido. Ninguna dieta es más efectiva que estar con mi hija: se va y vuelve a casa más de cinco veces al día. ¡Cómo si aún estuviéramos en Burgos! Y si vas con ella por la calle, te lleva a un paso que no lo sigue cualquiera… o yo, al menos, no puedo. ¡Es agotadora!

Lo que os decía: fin de semana tranquilito y la mayor parte del tiempo en casa. Además, esta semana que viene es más cortita… Hay que sacar lo bueno. El jueves, ya es viernes. ¡Biennnn!

Y yo aquí sigo hoy en mi buhardilla, (como Jo, la de «Mujercitas”), escribiendo y pensando de qué marca os hablo hoy para que os guste.

Había pensado en varias, pero no sé por cuál empezar. Tengo tantas y tal ebullición en mi cabeza… jajaja. Es que, cuando algo me apasiona, soy así. Hasta por las noches, además de diseñar, duermo faltal porque sueño con desfiles, con que el artículo de la revista para la que escribo no sale a tiempo… Sí, ya lo sé. Me obsesiono. Pero es porque me alucina este mundo increíble de la moda infantil.

Me gusta tanto que no os lo imagináis…Como leer, escuchar música o cantar. Claro, a la gente que no le gusten estas cosas, dirán que estoy chiflada, pero que se imaginen ellos haciendo lo que más les gusta en el mundo… Es una maravilla. Muchos me comprenden, lo sé.
Y antes de que se me haga de noche, os voy a hablar de una marca que conozco desde hace años, incluso antes de tener la tienda. Era una de las que no me perdía, y para todos los que no la conozcáis, hoy os la presento.
Se trata de Igualotes, marca cordobesa que diseña vestidos de niña pequeña, coquetones y femeninos, arregladitos y con lazos… En definitiva, una monería de marca con la que las pequeñajas de la casa van como salidas de un cuento.

Alicia, su diseñadora, y con la que hablé hace poco por Facebook, es un auténtico torbellino, Le encanta reírse, el buen humor y el “buen rollo”, como literalmente me dijo. Y la verdad es que lo transmite.
Digo yo, que por eso, sus diseños son tan alegres, tan llenos de vida y de color…tan… como son en Andalucía, que viven la vida a tope. Bueno, también mi hija, y es burgalesa…

Sus Jesusitos y sus vestidos siempre me encantaron. Son arregladitos, llenos de detalles… Para madres que quieran que sus hijas vayan monas, arregladas, cuidadas hasta el último botón… que las miren y también, por supuesto, por satisfacción personal.

Así que, hoy , todos aquellos a los que no le guste la ropa “repolluda”, como la suelen llamar, que se abstengan. O no, que lo lean y lo vean, que al final les va a gustar. Ya lo veréis. Es imposible que tanta monada no te conquiste, sea o no sea tu estilo.

En su tienda online, podéis encontrar modelos que le han quedado de otras temporadas, que son igual o más bonitos que los de ésta, porque esta ropa, arregladita y clásica, no se pasa jamás de moda. Y después tiene otros muchos que son de este año, que vende a tiendas.

Todos tienen en común que son coquetones, alegres y que te llaman la atención por sus maravillosas combinaciones de colores y por sus telas, sus diseños…
Os voy a ir enseñando los que me han gustado , pero sin orden ni concierto. Es decir, no sé si son de la temporada pasada o de la de ésta, y es lo bueno, porque veréis que ni se nota. Personalmente, mis favoritos, son cada uno de una temporada. Así que ya véis…

Es lo bueno que tiene el diseñar siempre el mismo estilo y no someterte a las rígidas normas de la moda.
Claro, la pega que tiene es que de la otra temporada, no le quedarán todas las tallas… Pero bueno, yo os lo enseño igual, porque me encanta y para que veáis su estilo y vayáis apuntando.

Voy a empezar por el vestido y el Jesusito “Piruleta”. Éste último me puede, es precioso, en beige y rosa, de niña niña y mono, monísimo. ¿Tengo razón o no? La tela preciosa lleva detalles en rayas rosas y blancas que enamoran, como la especie de mandil, todo ribeteado de estas rayas. ¿Y la capota? Igual, con la tela de rayas formando ondas, la puntilla crema y el lazote de raso para cerrarla… Fijaos también en los dos lacitos a cada lado del

canesú, con talle alto… Bueno, me parece impresionante de espectacular. Un canto al buen gusto. Y el vestido, en la misma tela y mismos detalles en rayas rosas, la tira bordada y picunela en el bajo. ¡Impresionantes! Además, si

tienes dos niñas, ¡qué dos joyas! Una con el vestido y la otra con el Jesusito. Esas son las niñas de las que os hablo, las que me gusta ver por la calle.
Otro Jesusito, para comerte a la que esté dentro, es el Jesusito «Compás”, con su capota y

braguita a juego. En una exquisita tela estampada, con fondo tostado y peces azules que combina con otra marino de lunares blancos y lazote central en esta tela… También picunela turquesa, ya que los peces de la tela llevan este color… Alicia se ve que lo piensa todo, cada detalle. Bueno, miradlo y juzgais. La capota, divina. Además es de los más sobrios y elegantes, al igual que los primeros de los que he hablado.

Y ¿el Jesusito “Constanza”? Chiflante, con fondo blanco, un estampado de árboles azules de morirte y picunelas bien grandotas en rosa, a juego de la lazadota de la capota. Y bien cortito… ¡Olé!
Un vestido que me ha abducido por completo y en el que veo la inspiración andaluza por todos lados, es éste blanco, de talle

bajo, con volantes rojos de lunares y una tapeta a la altura del pecho con dos botones rojos y picunela marino. Con unas bailarinas rojas o incluso, alpargatas, la niña puede ir casi hasta a la feria de abril. ¡Qué alegres son los andaluces! ¿Qué envidia me dan! Siempre ven el vaso medio lleno… Con lo pesimista que soy yo. Alicia, de este vestido, cada año, deberías hacer una versión, porque es inmortal…
Un Jesusito muy especial y más arregladito es el Jesusito “Tábata”, el cual hay que verlo para entender lo que digo: es estampado, con el

fondo blanco y flores color magenta con ramitas verdes. La tela lisa magenta con la que se combina le da todo el protagonismo en el bajo del vestido, el cuello y el volante de la capota, con esos pliegues divinos que parece que es una princesa. Y para remate, los lazos verde agua del talle, uno a cada lado a juego con el lazo que cierra la capota. Para ir a cualquier evento, la niña va como los ángeles. Perfecta. Ni ropa de ceremonia ni nada. A estas edades, no hay cosas más monas para las niñas que éstas.

Os habéis quedado helados ¿a que sí? Si es que esta chica, a la que no tengo el placer de conocer personalmente, debe ser un genio. Le gusta la risa, el humor… y además, ¿diseña esto? Pues hija, eres un diamante en bruto (o en fino, ¿ quién lo sabe? ). Por eso ya está vendiendo a tiendas. Encima, será guapa, que las cordobesas… ya se sabe.

Siempre os digo que una de las ciudades que no conozco de España es Córdoba y tengo unas ganas… Lo que pasa es que siempre coincide que podemos en verano y yo, con ese calor, no puedo. Ya sabéis que estoy super reñida con el calor… Pero de este año no pasa sin que mis ojos vean esos patios…Os lo dije y lo sigo diciendo. Y a lo mejor puedo conocer a esta locatis que diseña maravillas… y que me cuente…
El Jesusito “Luján”, otra preciosidad.

Los colores marineros, ¿qué más quiero? Es exquisito, blanco níveo, con tira bordada y pasacintas con lazo azulón en el pecho. Todo bordeado con tela de rayas rojas y blancas y picunela azulona, idéntico que el volante de la capota. Mirádlo y fijaos bien. Es sin duda, uno de los míos. Llevas a la niña como un sol, con zapatitos de badana rojos…
A juego y para más mayorcitas, el vestido “Luján”, igual de monísimo, con una tira

bordada roja en el bajo. De suspirar y diferente diseño, claro. Yo, en vez del tocadito que lleva la niña, ya sabéis que soy más partidaria del lazo de toda la vida. Pero eso va en gustos, ya sabéis… En cualquier caso, dos conjuntos de matrícula de honor.
¡Quién pudiera hacer retroceder el tiempo y que tus hijos fueran pequeños de nuevo para ponerles estas cosas! Y muchos que pueden, no se las ponen. Nunca estaremos conformes…Así es la vida.

Y me super encantan estos vestidos de talle bajo y Jesusito a juego en tonos rosas y de rayas azules y blancas… Los colores estrella del verano mezclados. Telas dulces y exquisitas, diseño maravilloso…¡Mirad la especie de mandil de la pequeñita! Más bonitos no pueden ser. Y a la vez sencillos por los tonos y porque no tienen muchos adornos. ¡Que sabiduría! Estas niñas entre los patios de Córdoba…

¡Qué alucinación!
Y lo mismo digo de estos, la colección “Vainilline”: vestidos blancos con una puntilla gruesa amarilla a cada lado del pecho rematado con un lazo de vichy en amarillo. Con bailarinas amarillas y tal cual, como hemos ido siempre en Burgos. Vamos, niñas monas de toda la vida, jajaja. Y la picunela del escote y el bajo… Los detalles…

Y de otro amarillo, pero mucho más pálido, los vestidos de estas preciosidades. Los veo originales y divinos, con la tira bordada blanca con pasacintas a la altura del pecho y el lazote rosa, la picunela rosa y una tela estampada con florotas rosas y granates, tela que sólo llevan en el escote. ¡Qué imaginación! Lo has bordado, Alicia. Son realmente bonitos.

Ya no voy a recomendar a mis primas, que luego me riñen y me dicen que se gastan una fortuna por mi culpa. Pero lo que daría yo por ponérselos a alguien… “Qué no daría yo por empezar de nuevo…“ Mira por dónde, estoy cantando «por la Jurado”. ¿No se dice así en Andalucía? Pues eso, que estoy escribiendo y me oigo cantando esta canción. Hay que reconocer que tenía canciones que te ponían la piel de gallina… Ésta misma.

Otros vestidos dulces: estos tres rosa pálido con florecitas y unos detalles en verde chillón. Jesusito de mi vida y vestido. El estampado es suave y precioso y la puntilla crema también. Son de niñitas monas y buenas y el toque de viveza que le da el verde de la puntilla y la picunela, lo hacen aún más llamativo y le dan el toque chispeante. Hija, ¡qué arte hay en Andalucía!

Y otro, que es casi tal cual me los hacía mi madre: el de rayitas rosas y blancas, con picunela beige en el escote y en el bajo, con una puntilla crema divina y dos lazotes a cada lado del talle. Para las que queráis sencillez, aquí la tenéis. Y qué color, qué dulzura. ¡Cómo le sienta a esta monada de niña!

Me diréis que no os estoy enseñando monadas. Sé que hay algunas (las que les ponen leggins y chándal) que dirán que van disfrazadas. Éstos oídos han tenido que escuchar eso y callarse. Como lo estáis oyendo. Porque estaba en la peluquería y ya estaban terminando, pero me faltó un segundo para intervenir. Si ellas estaban opinando ¿por qué no podía yo? Pues porque soy muy impulsiva y no sé decir las cosas. Seguro que terminábamos mal. Que si no…

En eso, sé que tengo que corregirme y decirlo de otra forma, pero es que no sabéis cómo iba la bendita hija de una chica que se estaba peinando. Ni os lo digo, no vaya a ser que a alguien le vaya a gustar semejante espanto… jajaja.

Yo me recreo en lo mío: El Jesusito turquesa con camel ¿qué os parece? Pues pocholo del todo. El tono turquesa intenso contrasta a la perfección con el beige de lunares que bordea todo el vestido y la capota. La picunela camel y el lazo rematan la

maravilla. ¡Me pirraaa! Me los compraría todosssss. ¿Y el Jesusito “menta rosada”? Blanco, rosa pálido y cuadritos vichy verdes. Ahí lo dejo. Fijaos bien…¡Maravilloso!

Totalmente de derretirse, el Jesusito “Melania”, en color coral y con esa capota divina. Ideal para cualquier celebración, ya que es más arregladito. Dios mío, cuánta maravilla… Y todo de niñas pequeñas. Yo creo que como mucho hace hasta la talla 6 en algunos modelos. Envidia es lo que tengo de todas las que tenéis niñas en estas benditas edades…


Y alegres y andaluces como ninguno, éstos, que combina el verde “Andalucía” con las rayitas rojas y blancas. Alegres, veraniegos y preciosos, como todos ¿Sí o no? Esta combinación de colores es un clásico para el verano y favorece muchísimo. Además, no hace falta estar morenísima que favorece de cualquier manera.
Y voy a terminar, porque no tengo más remedio con los más dulces: estos vestidos rosas, arregladitos y preciosos, con puntillas, también

rosas y lazos. Ideal tanto el vestido como el Jesusito. También idóneos para bautizos, bodas y demás eventos.

Y para las que prefieren el azul, los mismos. Llevad así a las niñas y veréis quién es el centro de las reuniones…
Y el próximo día que estén hablando de ropa, intervengo, como lo suelo hacer siempre. No sé por qué ese día no lo hice. Tengo la guerra abierta contra los leggins y chándals… y más cosas… ¿Por qué no puedo decir yo lo que pienso? Ya sabéis, «…que las verdades no tengan complejos…» ¿os sabéis la canción? Me chifla y es real como la vida misma. Mis verdades ya no tienen ningún tipo de complejo.
Un beso soñando la Mezquita (iré pronto).
Preciosas todas vuestras colecciones. Que precio tiene la de colección Vainille.tallas 8 y 4.
Muchas gracias
Hola Belén, yo no lo vendo. Ésto es un blog de moda infantil donde cada día hablo de una marca que me gusta. Esta marca es Igualotes. Búscala en google y pon un mensaje a Alicia, su diseñadora. Ella te contestará todo. Dile que vas de parte de Eva, del blog Nubes de Lunares, que me conoce. Muchas gracias.