¡Hola a todos! Hace un día triste y lluvioso, lo que hace que apetezca estar en casa, calentitos y disfrutando de la decoración navideña, que parece aún más bonita con días tristes como éste.

 

Ya no nos queda casi nada para terminar otro año. Cada vez se me pasa más rápido y más aún, cuando ya he empezado a ver alguna que otra pincelada de cositas de primavera-verano. Personalmente, me encanta verlo, pero ¿ sabéis

aún lo que nos queda de frío? Pues lo peor, para mi gusto. Por lo menos, en Burgos y el norte, los peores meses son enero y febrero. Por no seguir, porque en Burgos al menos, no te puedes poner de verano hasta junio, y eso, con suerte. Así que disfrutemos del invierno y vivamos el presente.

Todo esto no quiere decir que, por ejemplo, para la Navidad, no haya que tener ya todo preparado: los menús, las ideas de regalos, los modelitos tuyos y de los niños, etc…

Lo digo, porque hace tres días, una lectora me pidió que le buscara dos rebecas color chocolate para antes de Nochebuena. ¡Hombreee! Que yo doy ideas y busco conjuntos, pero no soy ningún Rey Mago. Además las quería iguales y muy económicas. Misión imposible a estas alturas.

Pensando estos días en todos los que andáis así, es por lo que voy a hablaros de “El Rincón de mi Abuela”. A mí me encanta y tiene la virtud de convertir un vestido tipo bata y sin ninguna gracia, en una monería de conjunto, gracias a sus complementos.

Su creadora es Isabel, una gaditana que empezó en esto sin querer, regalando detalles a sus amigas. Se vio desbordada por los pedidos y así, hasta ahora, que es todo un referente en la materia, tanto para mayores como para niñas. A Isabel siempre le encantaron las labores y la creatividad, lo que ha reflejado perfectamente en sus complementos, que desde luego, son las dos cosas a la vez.

Os digo que hace de todo, y desde luego, monísimo. Cuellos tipo babero, gargantilla, cuellos triples, capas, cuellos con lazo, con

pompones, lazos, diademas, collares, bandas para vestidos,  gorros tipo casquete ideales, camisones…Y utilizando

básicamente el crochet y el punto. El nombre de la marca le va que ni pintado, porque recuerda a las labores que hacían nuestras abuelas durante tardes eternas, pero las de Isabel, mucho más glamourosas, jajaja. Ha recuperado lo tradicional, pero con gracia y estilo, adaptándose a la actualidad, que es la que manda.

A mí me maravilla la cantidad de modelos y colores que tiene y cómo transforma cualquier cosa con sus monadas. Desde unos simples collares finitos, hasta las capas con lazote, todo es divino. Os voy dejando muestras de ello, como por ejemplo, esta niña con el cuello subido y collar en color camel. No me digáis que no ha tranformado del todo a un simple vestido negro. O también con un bandeau y un collar sencillito, ves a la niña deliciosa.

Las capitas me emboban. Tienen un estilo increíble y lo que os digo, casi ni te fijas en el vestido o blusa de la niña. Te fijas de lleno en la capa, con su lazote, y queda un conjunto totalmente diferente. Le puedes comprar los leotardos y zapatos en el tono de estos complementos y las niñas van absolutamente perfectas. No necesitan un vestido emperifollado para una celebración porque El Rincón de mi Abuela lo resuelve en un momento.

Me apasiona  el conjunto compuesto por tres collares sencillos, en rosa, verde y marrón, con el cuello camel y el lazote verde. ¡Me chifla para mí! Tiene un gusto exquisito para combinar los colores, así que te lo da casi hecho. Éste que os digo, con un vestido beige o camel, o una camisa blanca, queda  de morir. ¡Haced la prueba! Lo veo para niñas un poco mayorcitas, ya que al ser más grande, a las pequeñas se las come. ¡Divino!

Para las más peques, tiene millones de cucadas. Fijaos en esta niña con una simple camisa blanca y los tres collares, en tres tonos de rosa. Le pones la chaqueta o abrigo, medias y zapatos en granate y va de cuento. ¡Hay que tener

imaginación! No hace falta gastarse la luna.

Incluso, si quieres que vayan arregladas del todo, añades dos collarcitos de los

más simples a un vestido un poco más puesto y ¡preparada para cualquier evento!

Los cuellos y collares metalizados son idóneos para esta Navidad…Mirad que niñas, con cuellos altitos y collares en dorado… parecen

modelos a estrenar. ¡Daos prisa en pedirlos, sobre todo aquellos que lo dejan para última hora! También en plateado, cobre… ¡Pedid y se os dará! Jajaja.

Los cuellos-babero son divinos y las niñas pequeñas están de dulce con ellos, como ésta que tiene uno en granate y ya veis que da vida total al sencillo vestido gris que lleva. De ir normal… a ir llamando la atención. Así de claro.

O ésta otra, más mayorcita, con cuello de ondas y collar en negro. ¡El conjunto, totalmente a juego con las puntillas que llevaba el vestido! Esta chica hace milagros.

Tal es el éxito alcanzado por Isabel,

que es muy demandada para los detalles de comuniones y de boda. Mirad a las niñas de damas de honor con cuello de El Rincón de mi Abuela o las bandas, cuellos o collares para los vestidos de comunión. Les da un aire romántico encantador.

Por supuesto, también para el día a día, todos los conjuntos de las niñas mejoran sensiblemente con sus complementos, como estas niñas que ya van monas de por sí, pero con un simple (uno ¿eh?) collar a juego del lazote naranja, yo me las como.

Para un vaquero y una camisa, hace estos cuellos con borlas, más desenfadados y les hace mucho más estilosas. Y no digamos para mayores, como este cuello amarillo con su botón de madera (los detalles

importan) y el collar a juego. Queda precioso y no os olvidéis de que es el color de este invierno. Vestida entero de negro, este amarillo fuerte no dejará indiferente a nadie.

Los gorros que os he dicho, tipo casquete, a juego del cuello o el collar, transforman una simple camisa en un conjunto de diez. Y también hace flores para el pelo coquetonas para una coleta. Todo delicioso…

 

 

Yo, desde luego, en mi carta a los Reyes, ya he pedido un cuello doble con dos collares a juego. En tonos camel o verdes. Coordinado con mis botas y bolso (todo de Reyes),  me va a quedar un conjunto de pasarela total…jajaja.

Y como esta chica es inagotable, también hace unos camisones exquisitos de los que he llevado siempre hechos por mi madre y también toquillas monísimas… vamos, ya veis, cualquier cosa.

Yo creo que El Rincón de mi Abuela va a resolver muchos problemas estas Navidades… estoy segura. Lo hace todo

con tal gusto, que no hace falta casi darle explicaciones… Le dices para qué lo quieres y ella lo clava.

Ya sabéis, sobre todo para las más tardonas, vuestras compras pueden estar aquí. No os defraudará en absoluto. Volveréis a encargar.

Como siempre, un placer hablar de artistas. Yo me ofrezco para ser su manager.

Un beso con el Arte de la Tacita de Plata