
No dejaré de deciros antes de empezar a escribir sobre moda, que estoy nerviosa y preocupada por lo que pueda pasar en Cataluña el domingo.
No porque vaya a haber referéndum, que no lo va a haber, sino por los violentos que van a estar allí y que van a intentar por todos los medios armarla gorda.

Me dan miedo más heridos, muertos… Parece otra Guerra Civil.

No puedo entender cómo un grupo más o menos numeroso de catetos, han llegado a tanto.

Pero me da miedo. Es una cosa surrealista que no va a ninguna parte, pero eso es lo que quieren, que se hable de ellos, como de los nazis y hacerse las víctimas ante el despliegue de Policía y Guardia Civil que está yendo para allá.


No digo lo que pienso más claramente, porque me indigno y me ciego y me darían ganas de llevarme por delante a unos cuántos. ¡Sinvergüenzas, que son una panda de sinvergüenzas!

Y pobres de los catalanes que no estén con ellos… Esos sí que están viviendo un infierno.

¡Qué pena y qué horror! El analfabetismo no tiene límites, desde luego.
Bueno, quiero olvidarme un rato de

esto, aunque constantemente se me va el pensamiento a ellos, a la bandera grande de España que voy a poner en el balcón, a apoyar moralmente con todas mis fuerzas a todos los que luchan por una España unida, a los que son coherentes, inteligentes, etc.
Y a los que viven allí, bajo el régimen del terror, que lo sé de buena tinta.
En fin, os distraigo también a vosotros, porque
Vamos a hablar de la nueva temporada de “By Niné”. Ya sabéis de mi debilidad por esta marca, que no se vende en las tiendas, pero que ha conseguido llegar muy lejos y es que, cuando las cosas tienen tanto gusto y tanto estilazo, como es el caso, pues no puede dar lugar nada más que a elogios.

El otro día os decía que si yo pago una cantidad importante de dinero, exijo calidad y así es. No hay derecho a muchas cosas que venden, no me voy a repetir.

No es el caso de esta marca, en la que creo que van perfectamente relacionadas calidad y precio.

No será de una calidad fuera de serie, pero tampoco te exigen dinerales. Y a cambio te dan estilazo, diseño, gusto exquisito y glamour. ¡Más quisieran muchas tener la imaginación y la creatividad de Silvia y Gordi!

Pero, no, eso pertenece a unos pocos privilegiados.

Cada año, al salir la colección, entro en la web con nervios en el estómago (os lo juro, aunque os parezca exagerada), para ver qué es lo que me voy a encontrar.

Y nunca me decepcionan. Sus diseños me enamoran siempre: un cuello aquí, un lazo allá, una tela divina, una combinación nunca imaginada…

Voy a ir sin orden ni concierto, porque así soy yo y no puedo hacerlo ordenado. Mirad, muchas de las que me habéis preguntado todos estos días por vestidos de Arras que no costasen mucho dinero… pues aquí tenéis varios. No sé si de vuestro gusto o no.

Ya os he dicho mil veces, que más vale el buen gusto, que el dinero. Y las niñas pueden ir ideales con el vestido Boston, crudo, con lazada al cuello y volante en el bajo, siempre que las sepas combinar a la perfección: una bonita corona, unas alpargatas, una cestita con flores…

No cabe duda de que a mí me gustarían mucho más éstos que ver esos vestidos barrocos que han costado más de doscientos euros y ver un cortejo nupcial lleno de brocados y volantes.

Los novios o quién se encargue de vestir a las niñas, tienen que tener mucha personalidad para ponerles, por ejemplo, el vestido Valencia, en largo, también en hueso y con lazada al cuello.

Con la capota, ya es un toque perfecto para ser el centro de miradas, pero también les podéis poner una de rafia bonita con flores o medias coronas y desde luego, serán las niñas más bonitas del mundo.
Es la viva prueba de que un sencillísimo vestido puede convertirse en lo más…
¿Y qué me decís del vestido Florencia? De impresión, con ese cuerpo de tiras bordadas y el doble volante en mangas y cuello.
Las capotas son monas, pero yo les pondría unas en yute ecológico en cualquier color, y por qué no, en ese granate mismo y quedaría un conjunto espectacular.


Es curioso cómo las modas van pasando. Lo que no pasa es el estilo. Y hay gente que puede ir siempre a la última (cuántas conoceré yo, Dios mío), que si careces de estilo, te da igual ocho que ochenta.

Es bobada y siempre ha sido así. Con la clase y el estilo se nace.
Y con ropa bonita, algo se puede mejorar, desde luego. Todo hace.
Ya veis en todo lo que os enseño que “By Niné” sigue en su línea de sorprendernos en cada cosa, en su línea de que parezca que todo es tan fácil…

Derroche de ingenio en los petos, preciosos blusones, faldas, vestidos, chaquetas…

Nos presenta a niños de enamorar, claro. Los ves y dices: ¡Madre mía, qué belleza, por Diosss! Y claro, piensas que los tuyos van a estar igual, que no dudo de que muchos lo estarán.

¡Qué bien lo saben hacer cada temporada enamorándonos de todo y no sabiéndo qué elegir!

El peto Montevideo me ha dejado trastornada: el peto, la blusa, la niña, todo… ¡Cómo está, por Dios!

Las de Burgos, no os emocionéis mucho, aunque con un buen plumífero o abrigo gordo, sí que se lo podréis poner, seguro. Vamos, yo, ni lo dudaba…

Además, estad atentas, porque este año, “By Niné” se desplaza a Burgos con su showroom. Aún no está fijado el día, pero os avisaré en cuánto lo sepa. Así van a ver estas gaditanas (aunque no irán ellas), que muchas de sus maravillas son incompatibles con 10 grados bajo cero, jajaja.
Ideal y estilosísimo también, el peto Asunción que tiene lunaritos en negro, aunque no se aprecian bien. Con la Blazer Dallas, en verde, queda de lujo y por supuesto, la camisa blanca preciosa.

¿Qué veis vosotras? Yo, a una niña llena de estilo, con ropa ponible e ideal, preparada para todo. Nada de guardar para los domingos. Ropa para disfrutar y para que las miren.
La capa Tokio, me deja trastornada otra vez. Veo a una niña así por la calle y sabéis que la paro y le pregunto y le hago un tercer grado.

Pero sigue existiendo el problema de la geografía española. Estas niñas irán preciosísimas por las calles de Cádiz, por Conil o por el Puerto de Santamaría y ¡Olé!, además de muchas otras ciudades y sitios donde el clima es benevolente.
En Burgos y otros sitios parecidos, los padres se las tendrán que apañar para forrarlas por dentro o dejarlas para primavera (si la hay, jajaja). El caso es que no la perdáis de vista, que es divina de la muerte.

Color y diseño en el vestido Madrid (ya veis la moda de los «volantitos en los hombros, «alitas”, de las que os hablaba el otro día).

En un fresa rabioso, combinado con gris, por ejemplo, fantástico. Sencillo, pero con “ese algo” de la marca. Para llevar calzas, divino o leotardos en sitios fríos… Con bailarinas de terciopelo que venden bastante baratas, me encantaría. También con las mohicanas tan de moda, le das un toque colosal…

Pocholota la falda Viena, de tirantes, en color piedra, con la blusa en crudo y la gran bufanda que también es de la marca.

Ya veis qué espalda tan bonita y qué combinación tan lograda con sus medias Seúl… Lo que no consigan estas chicas… A lo mejor las ponen de moda, y se pasa la gente preguntándome en el blog que dónde pueden encontrar este tipo de

medias.
¡Al tiempo!
En blanco y negro, acierto seguro con el blusón Dublín y la falda Lisboa, de tela arrugada negra con cordón de algodón y borlones en la cintura, así como cinta dorada en las costuras laterales.

El blusón por sí mismo es un cañón. Blusón Georgette vintage, con lazada al cuello y volantito ribeteado en la manga en algodón negro. ¡Soberbio!

Más serio por delante, el blusón Nantes, que le queda de lujo a la niña. Este blusón, la lazada la lleva en la espalda.

En cualquier caso, este binomio, a una niña estilosa, siempre, siempre le quedará bien.
Otro con el que me quedé de piedra es el blusón Nápoles. Me recuerda tanto a una de mis blusas…

¡Cómo es para lucirlo! De tela arrugadita y con esas tiras bordadas tan, tan, tan… ¡impresionantes!, el escote en pico hasta bien abajo…¡Tremendísimaaaa!

Con rayas anchas en blanco y negro, la falda Estocolmo, en poliéster, con peto y con un encanto indudable con su blusita lencera.

Ideal para poner la prenda de abrigo en negro, que tanto se lleva. La tenéis hasta los diez años y queda de morir… Ya lo veis. El caso es que el abrigo sea gordito en algunos sitios…

Precioso, con la lazada al cuello y en color berenjena, el vestido Barcelona.

Ya veis que las lazadas al cuello es una tendencia que no para. ¡Hay que tener un vestido o blusa con lazada!

También la lleva el vestido Nueva York, en verde seco, de crêpe de lana y ribeteado en negro. Otra monada para combinar con negro: un chaquetón o abrigo.

¡Hay miles de cosas para hacer de este vestido una joya! Jugad mucho con los complementos.
Para las adolescentes, el vestido Estoril, perfecto. En negro, con gomilla en la cintura, bolsillos y cinta dorada, ellas, que están en las Redes Sociales todo el día, saben a la perfección cómo llevarlo: calzas, botas, ponchos, sombreros…

Y hay chicas estilosísimas, de verdad. De todo tiene que haber. No son las más, pero las hay…

Los bebés de “By Niné”, siguen siendo un soplo de aire fresco. Braguitas y camisas blancas de enamorar… Ese toque que no es ni clásico, ni moderno, sino sencillamente monísimo.

Mirad este cañamón con la braguita Cali y el blusón Normandía… ¡De mordisco! Claro, hay que complementarlo.

Y aquí aparece igual de achuchable con la braguita de rayas anchas, la blusita blanca y el cuello bufanda de la marca.
¿Cómo está, no? La veo superior. ¡Qué estilazo ya desde

pequeña! Eso se ve venir…
Con un buen chaquetón negro y leotardos igual, un bombón para este invierno.
Y el bebote, también precioso con la braguita Medellín, blusita y bufanda…

Para los niños, el chaquetón Roma es súper especial, diferente y original. En punto Jacquard gris y piedra, me gustaría que lo viérais más de cerca, porque es fabuloso.

El niño está guapísimo y estiloso. Y una niña se lo puede poner igual. Ideal para dos hermanitos… También lo tenéis en verde caqui y piedra.

Y niños monos con el chaquetón Singapur, de punto con capucha, gris oscuro… Prendas que no tienen ninguna complicación, sólo estilo.


Me despido con el blusón Normandía, y el jersey Filadelfia, que son de nuevo joyas y súper ponibles.
Como veis, hay “By Niné” para rato.
La imaginación de estas chicas no para y ya estarán maquinando la colección del próximo verano, para que a mí se me siga poniendo la carne de gallina al verla.
Espero que en Burgos os compren mucho. Si fuera por mí…
Un beso a la Bahía.
Muchas gracias, que palabras tan bonitas (y exageradas…….jajajaja)!!! Un besito muy, muy grande Eva.
De exageradas, nada. Lo pienso tal cuál, ya lo sabes. ¡Un beso!