
¡Feliz comienzo de semana y último día de noviembre! ¿Cómo estáis? Os puedo decir que, a pesar del famoso Black Friday y demás, no he salido prácticamente de casa este fin de semana.
Había pensado ir esta mañana de compras (aún dura en Madrid en muchas tiendas este invento americano), pero al final, nada de nada.

Juan se fue ayer a Burgos a “desconectar” un poco de la oposición y vinieron por la tarde a recoger a un gatito, con lo que, lo que os digo: fin de semana super casero.

He estado hablando con tiendas y contestando mensajes, eso sí. Y la verdad es que tenía cosas para hablaros hoy, pero se me mezclan los mensajes en la cabeza: unas me pedís que hable de regalos de Navidad, otras de adelantos y regalos de Comunión, otras de tocados, etc, etc, etc…)
Aún no voy a hablar de la Comunión porque ya os digo que no me gusta adelantar acontecimientos, así que no seáis precipitadas. La mayoría de las marcas van presentando poco a poco sus avances, pero me niego a escribir un artículo de Comunión, sin haber llegado diciembre.
¡Hombre!, que os parecéis a una que yo me sé…

Ya sé que lo queréis tener todo preparado para que no falte detalle, pero, creedme que tenéis tiempo de sobra y que os voy a poner lo más bonito del mundo para que vuestros pimpollos reluzcan como nadie ese día.
Volviendo a los mensajes, lo que he hecho ha sido meterlos todos en una coctelera y este ha sido el resultado: camisones y pijamas. Jajaja…

Me sirve, tanto, para regalo de Navidad (los de invierno), como para regalo estrella de Comunión.
Si a esto le añadimos que a mí me apasiona, como sabéis que los niños estén en casa como brazos de mar y que le doy la misma importancia que a la ropa de la calle, estoy encantada.
Y sigo diciendo que es una pena que las marcas no le den esa importancia. Por eso, muchas me decís que no encontráis nada. Lógico…


Pero buscando y rebuscando, algo encuentras… Yo, desde luego, hasta me iba de Burgos, para comprarles los pijamas.

Además, compraba un montón, porque siempre, siempre, regalo estas cosas. Que dicho sea de paso, encantan al destinatario, os lo digo de verdad.
¡Bufff! No sé ni por dónde empezar…

Bueno, ya os hablé el otro día de “Nonos Pijamas”, marca valenciana donde podréis encontrar cosas monísimas para este invierno. Si las queréis ver, buscad dentro de las categorías y repasad mi artículo.
No es nada fácil lo que os quiero enseñar, porque las marcas sacan poco y difícil de ver. Ya os digo que no le dan mucha importancia a esta maravilla.
Voy a hacer un esfuerzo, para ver si os puedo solucionar algún regalito y sorprendéis con maravillas que muy poca gente aprecia, por desgracia…
Aunque lo haga con desorden, como sois listas, iréis sabiendo mirar y si no, me preguntáis lo que haga falta.

Bueno, os enseño algunas cosas monas que he visto en “Lolilota”: Monísimo el camisón Hojas. Me encanta el estampado, tan de niña, tan coquetón, y es de invierno totalmente.

La manga al codo, los botoncitos, la tela… Si ya, lo regalas con la bata Hojas, a juego, para mí, es uno de los mejores regalos que se pueden hacer, no me canso de decirlo.

Ya la veis: abrigadita, coquetona, con vivos en blanco y un volante en el bajo. La lazada en azul, preciosa. Bueno, me chifla este conjunto.
Otro, más cómodo para muchas: el pijama blanco con vivos en rosa. Pues es una monada también y más si lo comparo con lo que veo por ahí: un pijama clásico, con botones en la parte de arriba, lacito rosa y vivos en rosa.

Os digo lo mismo: con la bata a juego, ya es una auténtica joya. ¡Regalad estas cosas por Dios!
La bata con solapa, de manga larga y puñitos de volantes. De nuevo, volante precioso en el bajo y la lazadota rosa para cerrarla. Una maravilla. ¡Qué gusto ver así a las niñas!
Si vosotras mismas veis la diferencia…
En «Teresa y Leticia», han tenido el super gusto de siempre, el habitual. Tienen pijamas , camisones y batas. Poco, pero todo ideal.

Viendo a estos tres niños de arriba, ya tengo bastante. Me imagino las monadas que son. No me digáis que no da gusto verlos…

El camisón clásico es éste que lleva esta niñita preciosa: de manga larga, estampado dulce y con puntillitas. Ideal para el invierno. Mono, monísimo.

Divino también, el camisón blanco de talle alto, manga larga con volantes en los puños y botoncitos. Como en la película Mujercitas… ¡Me pirra!

De la bata clásica, qué os voy a decir. Me parece una joya, en ese azul divino, con ese cuello crudo cruzado y el mismo detalle en los bolsillitos… Talle alto, dos botones y ¡Bombonazo! Cómo la veo por Dios… Divina es poco.
¿Sabéis el gusto que da el llegar a una casa y ver así a los niños? Os parecerá una bobada, pero para mí, quiere decir mucho.

La bata Cinta para el camisón blanco, otro caramelo. En estampado delicioso azul, talle alto, lazada azul y puntilla en las solapas. ¡Me encanta que quede un poco más cortita que el camisón!

¡Qué gustazo tienen estas chicas! Aquí abajo veis las dos batas, acompañadas del niñito rubio, con el batín azul clásico a juego. Más no me puede gustar…
Otra foto que me chifla es la siguiente a ésta, en la que se ven perfectamente el pijama del niño y el camisón clásico de la niña, acompañados de la otra, que lleva el camisón blanco con la bata. ¡Aleluyaaaaa! Por fin unos niños monos para ir a la cama….

Os enseño aparte, el pijama del niño, que es monísimo. Está como un niño tiene que estar en casa. Divino.

Y aquí le veis. Con el batín en ese azul tan precioso… Mi hijo pequeño, también lo tiene en el mismo tono. Y es que, para chico me chifla… tanto en batín, pijama o albornoz.
Para niña, también, por supuesto, pero ellas tienen más cosas para elegir…Aunque Teresa y Leticia, combinando a los dos, como siempre, han dado en el clavo.
Más bonitos no me pueden parecer.

Voy ahora con la marca “La Piyama”. Es una marca marbellí, que descubrí hace poco y a la que le agradezco inmensamente que se dedique a hacer que los niños estén guapos en casa.

Sus pijamas se confeccionan de forma artesanal y su calidad es excelente (los he tenido en la mano). Los podéis encontrar desde los 2 años hasta los 16.
Y ¿qué hay más mono que unos pijamas clásicos, como los de estos niños? El del niño, azul liso con vivos en blanco, de toda la vida y el de la niña, en cuadritos azules, con cuello bebé y bolsillos con un volantito. ¿No están preciosos? A mi me pirran. Los dos de franela, calentitos para el invierno.

Y aquí tenéis al niño acompañado de una adolescente, para las que hay conjuntos de pijama con camiseta (pero monos, no adefésicos), como los que utiliza mi hija. Diferentes estampados, pero todos bonitos.

Otro modelo es éste, preciosísimo: pantalón de cuadros alegre y con lazote, con camiseta gris. La niñas de estas edades, no quieren otra cosa.
Después, las frioleras, se ponen una chaqueta con capucha, etc… Pero si van conjuntadas, es como si estuvieran en la calle tomando algo, casi, casi…

Y aquí, la hermanita mayor, con estos modelos de los que os hablo, acompañada de la pequeñaja, que lleva un camisón estampado en azules, de morir de bonito: botoncitos, talle alto con lazada y volante en el bajo.

Una delicia de camisón…
Me chiflan también los clásicos, con forma de chico, en niñas, como es éste, en rosa de esta monada de niña. Cómodo, bonito, favorecedor…

Tampoco faltan los escoceses: fijaos qué maravilla en niño y niña. El del niño, con cuello mao y el de la niña, con lazada roja y volante en el bajo. Bien abrigaditos e idóneos totalmente para estas fechas.
Un regalo… ¡chapeau!

Y también de cuadros, pero predominando el verde, la maravilla siguiente: el pijama Irish de esta niña, a la que da gusto ver, no es por nada…

Y los mismos cuadros en el del niño, con cuello mao. Absolutamente preciosos. Son casi mis favoritos… irlandeses totalmente.
Más dulces para niña, los pijamas Japo, que como su nombre indica, tienen el cierre japonés y los estampados son dulces, suaves… También una monada y abrigaditos.


Y ya para las más frioleras, como muchas que yo conozco, estas batas de pelo que os enseño en rosa y en azul. Son una monería, mucho más bonitas en la mano, y no sufráis por el frío… que no sabéis lo que abrigan… Me dan sudores de pensarlo.
Esta marca la podéis encontrar, aparte de en su página de Facebook, en Triolet, del que tanto os he hablado y que está en la calle Lagasca, 58, de Madrid, para las que vivís en la capital y si no, un viaje en estas fechas es muy apetecible ¿no?
Y de paso, veis las 20 marcas que están allí. Podéis resolver mucho en muy poco tiempo.

Tampoco dudéis en ir a «Friki», la tienda más clásica del mundo donde venden maravillas de toda la vida, como los típicos y clásicos pijamas escoceses como éste, entre otros y que fácilmente, han rondado por mi casa durante diez años… Siempre divinos con él.

Y una vez visto un poco lo de invierno, os voy a enseñar un adelanto de camisones y batas para regalo de Comunión, de los que yo tanto abuso.
Y cómo no, la maestra de ceremonias es “Lan Fairy”, que nos presenta un despliegue de maravillas a las que son muy difíciles renunciar.

Os voy a enseñar algo, porque todo no voy a poder, como siempre. Pero ya sabéis, que en su página, hay un apartado en el que veis absolutamente todo. Y todo divino…

Por ejemplo, la bata y el camisón Juliette es una maravilla lo mires por donde lo mires: dulce, exquisito, con gusto, clase… Lo mejor para regalar a una niña en ese día tan especial, de verdad.
La bata, deliciosa, de piqué rosa, con volante en las mangas y corte evasé y el camisón de batista organdizada y ganchillo hecho a mano, como tantos que nos hacía mi madre…

¿No os parece una maravilla? A mí no se mé ocurre regalo mejor. Sé que las hay, por lo menos en Burgos, pero veo tan pocas niñas así ya en las casas a las que voy…

La bata abrochada con esa lazada rosa me recuerda tanto a mis libros de juventud, a las películas bonitas de antes, es como un sueño…

Similar en color hueso y en plumetti bordado en batista, el camisón Camille, otra delicia. ¿Qué más quiero yo que estos colores? Elegante, clásico, sencillo, pero completo y precioso. No necesita ni más ni menos. Una joya.

Además, Mónica tiene tal gusto, que nos lo presenta con un tocado espectacular en un jardín precioso y todo con sus toques magistrales de buen gusto…

Y lo mismo el camisón Paulette, también de plumetti bordado en batista, en blanco y con tirantes cruzados en la espalda…. El ganchillo, también en blanco…Yo no puedo decir más.
Es la hora de qué vosotras decidáis y juzguéis. Tanto tanto que me preguntáis, imagino que a muchas os habré dado la solución ¿no? Estoy segura de que sí.

Dos batas con pequeñas diferencias son la Anette y la Colette. Las dos divinas, eso sí. La primera, de piqué labrado con volantes de batista y tira bordada en las mangas, corte en el pecho y lazada rosa antiguo…
Ya os digo que me transporta a otros tiempos. Es una bobada porque si en mi familia, lo hemos tenido siempre, me imagino que pasará lo mismo en muchas… pero es que veo tanto y tan feo… jajaja, lo siento, pero es así.

La bata Collete, tiene corte evasé y volante divino de plumetti en las mangas. El lazo, en este caso, es color hueso. Con el camisón Camille, un conjunto digno de una princesa.

Para las más frioleras, la bata Catherina, de piqué acolchado, forrada en batista, monísima también como podéis comprobar.
Podéis elegir, ya que la hace en blanco y en rosa. No me digáis que cuál prefiero… ésta vez no os voy a contestar. Además, creo que ya lo sabéis…jajaja.

Mónica, no sé si se pueden pedir ya. Yo creo que sí. A todas os digo que os pongáis en contacto con ella a través de su página, buscando Lan Fairy y le mandéis un mensaje, que ella os contestará enseguida.

Y voy a terminar con «Didal Lencería». Sus diseños exquisitos me han llegado al alma.
En mi casa siempre se ha dado muchísima importancia a todo lo de casa: a la ropa de cama, a los camisones y batas, etc… y por eso, creo que es deformación.

Mi madre tiene una cómoda enterita de sábanas de hilo bordadas que aún no nos ha dado (a mi hermana y a mí) porque dice que llevamos una vida estresante y que las vamos a destrozar, que hay que dedicar horas a plancharlo todo…
Jajaja, os reiréis, porque ya no sé quién va a disfrutarlas, ya que mis hijos no. A ellos les da igual, no diferencian estas joyas. Ya pertenecen a otra generación.

Pero mi madre está tan contenta con su cómoda repleta de “una inversión” como lo llama ella.

Y claro, a nosotras, algo se nos ha quedado, por no decir mucho. Ni mi hermana ni yo concebimos la ropa de cama vulgar, ni la ropa de dormir, ni nada de eso…
Así que os dejo algunas cosas que podréis encontrar en su página.
A mí me han dejado sin palabras. Comprendo que algunas no serán prácticas, pero me da absolutamente igual.

Os voy dejando pinceladas de lo que he visto, como este camisón de hilo maravilloso. Fijaos en todos sus detalles, por favor.
Y por supuesto, con la bata a juego. Son palabras mayores…Yo lo guardaría como mi madre, jajaja.

Más camisones y batas con la parte de arriba deliciosa y lazada en hueso… ¡Qué maravilla! Tanto en color crudo como este otro, que tiende como a un color mora dulce, suave…

La bata, exquisita, de manga corta, ribeteada de tira bordada y con la lazada me vuelve loca. Tiene que ser para alguien que lo valore, porque si no, no merece la pena.

Son sencillamente, maravillas que no todo el mundo aprecia en estos tiempos tan locos en los que vivimos.
Y estos similares, en gris clarito, con lazotes rosas. También camisón y bata a juego. Decidid el color y habréis hecho una elección colosal.

Otro conjunto precioso, el de estas dos niñas que participaban en un desfile… ¡Sin palabras! La coquetería y el buen gusto son innegables.
Gloria bendita da verlas. De verdad, disfruto como una niña pequeña…

¿Y estos pijamas de cuento, con tiras bordadas y lazos en azul, como si fueran bañistas antiguas? ¡Buaaa!, qué pena no tener niñas en esa edad… No sabéis lo que daría por diseñarlos yo… y el caso es que los tengo en la cabeza, pero no sé nada de patronaje, ya os lo he dicho mil veces.

El de al lado, de topitos en azul, otra maravilla ¡Qué detalles! ¡Qué lacitos en los pololos! ¡Cómo es la tira bordada! Todo…


Pecheras de ensueño, como ésta… Trabajos de filigrana…
Detalles, vainicas, lazos, puntillas, tiras bordadas…
Entrad y observad el lujo de detalles que lleva cada camisón, cada bata, cada pijama…
He intentado enseñaros todo lo mejor que he podido, pero me es imposible decribir tanta joya.
¿Algún regalo resuelto? Sería para mataros…
Un beso entre sábanas bordadas
Hola , donde puedo comprar esos pijamas de niños
Desde luego los de Teresa y Leticia son ideales.
¡Muchas gracias, Eva, por tu artículo! ¡Nos ha encantado!
En pocos días ya podréis ver todos nuestros artículos en http://www.lapiyama.com. Mientras tanto seguiremos publicando semanalmente en Facebook(LaPiyama) e Instagram (LaPiyama1).
¡Feliz lunes!
¡Muchas gracias a ti! Me alegro de que os haya gustado. Un saludo, Eva.