
¿Cómo va todo? ¡Qué tiempazo está haciendo! Desde luego, a nosotros nos está viniendo de cine para salir al mediodía a pasear con Tess por el campo. Una gozada… Hasta os puedo decir que estoy morena.
Por lo demás, con nuestra rutina diaria, viviendo cada día y pensando en el momento. No más allá.

Como siempre, os doy mil

gracias por vuestros mensajes pidiéndome consejo, dándome ánimos, etc.
Os lo agradezco de todo corazón.
Aún queda mucho frío que pasar, no nos engañemos.
Aunque los escaparates ya se están tiñendo de colores que nos invitan a soñar con lo que pondremos a nuestros hijos este verano, lo cierto es que ahora, vendría de perlas conseguir alguna prenda de esas maravillosas en rebajas.

Y por supuesto, las que ya estáis inmersas en la búsqueda del traje perfecto para la Primera Comunión, para los niños que van de invitados y demás, no paráis de pedirme opiniones y decirme que cuál es el estilo que más me gusta.
Ya sabéis que soy clásica irredenta. Me gusta lo clásico

de siempre y por supuesto, lo que os digo a todas: el menos siempre es más. Eso ante todo.
Pero después, hay colecciones y diseños que no puedo ni quiero dejar pasar por alto.
Es para modernas, pero no modernas equivalente a horteras, sino con un gusto impecable, estiloso, casi perfecto. Si este es tu estilo, aquí encontrarás lo que buscas. ¡Seguro!
Eso sólo lo consiguen los genios. Y de genialidades os voy a hablar hoy con las maravillas de “ Hortensia Maeso”.
Ya conocidísima por muchas, pero no tanto por otras, os pongo un poco al día, para que lo contempléis como una opción para ese día tan mágico.
Su imaginación y creatividad es inigualable, no se puede negar. El volumen que consigue con sus faldas es un misterio. Yo creo que lo hace a base de telas de calidad muy finitas y superpone con maestría una detrás de otra. Es una maravilla verlo, la verdad. Talento innato, ingenio, genio y figura.

Hay vestidos como éste, que jamás pensé que se los podría poner nadie.

¡Un vestido rosa de Comunión era toda una horterada para mí! Hasta que vi éste, el vestido Cayetana, exquisito, con un estilazo y un diseño digno de los más grandes diseñadores del mundo entero.
Fijaos en él: tules en volantes abajo, más tul bordado con banda y lazada de ensueño, espalda divina, mangas transparentes y como complemento, ese collar con flor grande espectacular.

¡Qué puedo decir! Como siempre, que lo veo para niñas que ya tienen “algo”, bien sea gracia, desenvoltura, estilo, que tengan una armonía en su físico para permitirse llevar este vestido.
Tanto éste como el Carina, también en rosa, para mí, requieren niñas monas (no guapas de cara), sino, como os digo, personalidad, algo que no tienen otras.

Sé que Hortensia no está de acuerdo conmigo, porque me lo ha dicho, pero es lo que pienso yo.
Si a una niña gordita o poco agraciada, desgarbada o sin gracia, le pones este vestido, creo que la disfrazas un poco. Todas esas niñas pueden estar monísimas con vestidos más clásicos de piqué, con la banda de talle alto o con cualquier otro diseño.


Hay que disimular los defectos y realzar las virtudes. Eso, todas. Pero, repito, los vestidos de Hortensia Maeso, a mí me piden niñas con ángel, con ese “algo”, que sea lo que sea, hace que sea posible que luzcan perfectas con sus diseños.

Divino el vestido Antonela, bicolor, con una falda de ensueño gris y banda y lazada del mismo color. El cuerpo blanco, con mangas transparentes, un tocado ligero…

Es un sueño de vestido, una exquisitez sin igual.
Y además, dentro de la maravilla, se puede decir que es sencillo, encantador, delicado, preciosísimo…
Y además, más ponible para cualquiera, por supuesto, aunque cómo es la niña que lo lleva, claro…
Uno de mis preferidos, sin duda alguna.

También ponible y bárbaro, el vestido Camelia, blanco, con mangas anchas de tul con volantes y capas de tul en el bajo también. Unos complementos de cine y una niña de matrícula de honor.

Chiflante el cinturón y el tocado, con una trencilla y flor rosa. Armonía…
Otro espectacular y de mis favoritos, el Francesca, una obra de arte en toda regla.

¿Cómo se habrá inspirado Hortensia? Me tiene enamorada. Ya lo veis, un vestido de plumetti y encaje sin mucho vuelo, con una especie de chaleco – levita de estilo rústico que me vuelve loca. Estilazo en estado puro. Banda azul. Flor en el

chaleco de color rosa. ¡Y cómo es, por Dios!
El pelo suelto con una pequeñita diadema-tocado en rosa y rozando la perfección. ¡Para mí quisiera un modelazo de estos!
Para las que prefiráis que vayan de corto, mágico el vestido Vera, en la que se da todo el protagonismo a la colosal banda azul, soberbia, con las flores rosas ocupando casi todo. Sin mangas y con el vuelo de tules que caracteriza a Hortensia. ¡Delicatessen total!

Tal y cómo lo lleva, con melena y las dos trenzas rústicas con flor rosa, una auténtica maravilla.

Para niños, lo clásico no tiene cabida. El estilazo, sí. Como el traje Luca, en un azul medio, que si al niño le pega, irá perfecto. Con el foulard y haciendo “estilo”. La pega es que no a cualquier niño puede sentarle bien. Lo veo para “guaperas estilosos”

Muy mono también, el traje con casaca Camilo, en este azul tan bonito. Digo lo mismo.

Un niño con “ángel”, estará monísimo con él, porque el traje es precioso. Si dudáis, recurrid a las bermudas con camisa y corbata, que no falláis.
Otra maravilla de vestido, el

Antoñeta, en blanco y beige. Tules y encajes con un vuelo que dejará deslumbrado a cualquiera. La importancia de los complementos es fundamental. Fijaos cómo lo adorna con flores exquisitas en lugares estratégicos, consiguiendo un resultado espectacular…

Corona con tonos suaves combinándola con las flores del pecho, exquisito el bajo, las mangas al codo transparentes. Otra obra de arte, sin duda.

Divino también, el Giovana, de tul bordado en beige subido, me parece una maravilla, sin mucho vuelo, con mangas transparentes, talle alto y sus colosales complementos de flores. Uno de los vestido más ponibles para cualquiera y también, absolutamente delicioso.

¡Qué terminación de las mangas! ¡Qué cinturón tan exquisito! Hortensia es única y ella lo sabe. Es un don que Dios le ha dado, como a otros el del canto o cualquier otro.
Y el Antonella… otro con sus volúmenes asimétricos, llenos de magia, con una espalda de infarto, que

puedes cubrir para la Iglesia con el delicioso bolero rosa. ¿Qué os parece?
Fijaos bien en la espalda, porque para qué describirla…
La banda de rayas en un rosa que parece salido de algún lugar imposible. Todo auténtico, todo misterio, todo maravilla con mayúsculas.
El vestido Lorenza, del

mismo estilo chiflante y el marinero Flavio, divino en blanco y beige nos reafirman aún más del talento de la diseñadora.
Un marinero moderno, lleno de gracia, en blanco y beige. Ya sabéis mi opinión sobre a quién le queda bien y a quién no.
Lo que no cabe duda, es que, de nuevo, estamos ante dos diseños diez.
Al igual que la americana

marino Francesco o la levita para niños…

Modernitas, estilosísimas, llenas de buen gusto. Si tú ves que a tu hijo le va ese estilo, no lo dudes.

Para mí y no lo repito más, no le va a cualquier niño. Lo tengo claro.

También la casaca Alexio es una maravilla. ¡Qué niño! Hay niños a los que les va esto. ¡Atreveos!
Lo mismo que el traje con la casaca Bisentino, en blanco y beige. Otra joya de Hortensia Maeso. Un niño estiloso, modernito, tan alejado de esos almidonados y repolludos Almirantes y demás cargos, tan espantosos, ostentosos y horteras.
Perdonad por mi sinceridad, pero no puedo con ellos.

La casaca Lorenzo, en tonos natural, la camisola… Niños llenos de buen gusto y actuales, guapos, guapísimos.

Aquí, con el vestido Daniela, en los mismos tonos, asimétrico, con sandalias. Para mí, demasiado moderno, pero hay niñas a las que les va como un guante.
Y la gran novedad de este año, es el traje de marinero de niña. Yo los había visto ya en faldas tableadas y la típica casaca marinera, muy monos y clásicos.

Hortensia, como siempre diferente, nos lo propone en pantalón. Hay muchas niñas que tienen auténticos problemas para ponerse vestidos. Se rebelan, no les gusta ser princesas y este traje que es divino, viene a solucionar los problemas de muchas madres.

En su línea, original, auténtico, diferente de todo. Aroa lo lleva con su gracia y fotogenia innata y es una niña cañón.
Pantalón pesquero blanco con rayas en beige y blusón con gran baberola en los mismos tonos. ¿No es divino?

¡Pues claro que sí! Va a ser una auténtica bomba. Muchas ya me habéis preguntado por él, antes de hablaros aquí y eso significa que no todas las niñas quieren vestidos vaporosos. A muchas les horroriza, les parece cursi y todo lo que ellas dicen… ¡Edades difíciles que cada vez comienzan antes!

Con la gorrita incluida para las más modernas o con un simple lazo y bailarinas, si no os gustan las sandalias, estarán de llamar la atención. ¡No dejéis de contemplar esta opción!

Con el vestido Giorgia, una niña a la que se le puede cantar “Era la gloria vestida de tul… con la mirada lejana y azul, que sonreía en un escaparate, con la boquita menuda y granate”. Ayyy, Serrat, qué bueno eres y qué dúo haces con Hortensia… Jajaja, pensaréis que estoy loca, pero me gusta la gente brillante, la gente inteligente, que te hace vibrar, que te hace sentir, que te hace hablar.

Y la ropa de Hortensia me hace hablar por los codos, ya lo veis.
Vestido Dolce Vita, de nuevo una propuesta en corto. Como siempre original, único, soñador…

Volantes, flores, caídas de ensueño… ¡Haz tu sueño realidad con estas delicias! Un día es un día y muy especial.
En cuanto a lo que me decís de los precios, pues sí, es evidente que no es la más barata, pero es que tampoco son trajes normales.

Es alta costura y quién se lo pueda permitir, pues hace muy bien. Por supuesto que hay otras opciones. Hay marcas muy bonitas en España, pero pocas con el talento y la brillantez de Hortensia Maeso.

Sin duda, si queréis algo bueno, ésta es una marca para eso, para luciros, para ir especiales y brillantes. Un día para recordar.

Los marineros con casaca gris y pantalón negro, tanto para niño como para niña, me vuelven loca. No sé si yo se lo pondría a mis hijos, pero bonitos y estilosos, como ninguno.

En fin, que veis que me chifla todo. Algunas cosas las veo para desfiles más bien, como la levita Constantino, con la que el niño, más guapo no puede estar, pero sé de pocos que querrían ponérsela… Bueno, depende de las zonas, de las madres, de mil cosas.
Ya veis que los tonos naturales, con toques de rosa siguen siendo lo último.

Ya sabéis, o lo compráis o tendréis que hablar con Hortensia para que os revele su secreto y os aseguro que, aunque dijera algo, es absolutamente imposible hacerlo como ella. Ni siquiera parecido.
Está a la altura de los grandes. Como Chanel, Dior, etc. Ni más ni menos. No os perdáis tampoco su colección de ceremonia ni la juvenil. ¡Son de morir!
Si tengo tiempo (ahora no tengo mucho), os las enseñaré. De nuevo, convirtiendo todo lo que toca en oro.
Un beso único