
Bueno, hoy, como siempre, deprisa y corriendo y casi sin tiempo de nada. Fijaos si es así, que he ido con mi hija a hacer recados y me he pegado la torta de mi vida.
De repente, no sé ni cómo ha sido y “zas”, en el suelo. Ya van varias veces este verano.

Y es que soy una precipitada. Tengo la rodilla como cuando era pequeña de heridas, pero lo que más siento es el roto que me he hecho en uno de mis pantalones favoritos. ¡Están para tirar! Y eran nuevos, y, como os digo, me chiflaban.

En fin, cada día, una cosa. Ahora estoy esperando a Juan, que llega de Lisboa, y ya me estoy poniendo negra, porque no ha dicho aún nada. Si es que vivo sin vivir en mí…
Y ni música ni nada, hoy os escribo con el ventilador puesto, jajaja. Me río, porque si me oye mi amiga Adela, se desmaya ipso facto.

Sólo de imaginármela, me troncho de risa. No sabéis el frío que tiene a todas horas… Está enferma (ella dice que la enferma soy yo), hasta en julio está con la calefacción puesta…


Bueno, pues, hoy voy a abrir otro pequeño debate, también ocasionado por una lectora, que dice que se me nota mucho la ropa que me gusta. ¡Pues claro! Y lo orgullosa que estoy de ello…(de que se note, digo)

Ella opina que debería hablar de marcas más modernas, de ampliar los estilos y sobre todo, hablar más de ropita “arreglada”, ya que dice que a ella le encanta el blog, pero que echa de menos eso.
Y le voy a hacer caso, hombre. Creo que he hablado de ropita arreglada muchas veces, pero por si no es suficiente, pues hablamos de nuevo un poco de los diferentes estilos que tenemos entre unas y otras.

Yo, es verdad, que soy más clásica, que me gusta lo que me gusta y punto. Pero también es verdad que hay cosas ideales súper arregladas y desde luego, he hablado de ellas y lo he dicho.
Lo que está claro, es que no se puede tener contento a todo el mundo cada día. Vosotras ¿sois más de ropa moderna, pero moderna de verdad (de esa, sí que no he hablado, porque no me gusta), de ropa arregladita para cualquier día, o de ropa más normalita, pero mona?

La verdad es que hay marcas con ropa nada puesta, pero con un estilazo que te mueres… Y yo reconozco que si es bonito, me gustan de las dos cosas. Lo importante es el buen gusto. Y, desde luego, tampoco me gustaría llevar a los niños todos los días tan vestidos. No lo veo adecuado, lo veo un poco fuera de lugar.

Pero para días concretos, ¡Pues claro que me pirra un vestido coquetón y arreglado! Anda que no he llevado a Almudena con vestidos de confitería…
Y en esas estamos. Hay gente que, constantemente me pregunta que si van bien (me enseñan la foto) con un estilo a cierto sitio o que si no irán poco vestidos, etc… Yo intento contestar a todo el mundo y les aconsejo lo mejor posible.

Cuando veo que para un simple cumpleaños, les quieren llevar de pajes de la corte, pues les digo que se lo eviten.
Sé que a veces soy cortante, pero es que me mandan algunas fotos… que para un cumpleaños, pues que no.

Y como no miento, pues se lo digo, aunque ya tengan la ropa comprada.
Un ejemplo de lo que llamo ropa fresca y cómoda, a la vez que mona y estilosa, es “Mi Truchita”.
Vestidos sencillos pero con “algo”, nada puestos, como este de tartán rojo… no me digáis que no es mono.

A mí me encanta para cualquier día. Es una marca, que ha apostado por lo “no arregladito, no puntillas, no encajes, etc». Y para mi gusto, tiene cosas deliciosas.

Es un vestido sencillo pero con encanto, con manga francesa y corte evasé. Entera de rojo puede quedar de escándalo.
O el vestido mariposas crudo, que más no me puede gustar. Entre el galgo y la niña, esta foto me tiene enamorada. La veo preciosa, con ese vestido y con el cuello de punto. ¿Y qué tiene? Nada especial, ni falta que le hace.
¿No lo veis así? ¿Seré sólo yo?

Y aquí la veis de nuevo con el niño que lleva una prenda exterior tipo sudadera, que también me encanta.

Le veo ese “algo” que me gusta a mí. ¿Qué no van arreglados? Bueno, pues no llevan «de todo «encima, pero van monísimos a cualquier sitio.
Mucho más apropiados que otros que llevan al mismo sitio vestidos de vuelo, encajes y pantaloncitos cortos con blusitas llenas de adornos. Depende la ocasión, así de claro.

Muy mono también el vestido Carlota de estrellas, en gris. Muy desenfadado, puesto con gracia, con ese cuello…

Bárbara la capa con capucha sobre la camisa amarilla ¿no? Me requetechifla. La veo una niña estilosa totalmente para ir cualquier día por la calle.

Para que veáis mejor la blusa de lorzas mostaza, aquí la tenéis…monísima, sobre todo para niñas un poco mayores. Femenina totalmente y también divina por detrás, con esa lazada.

Queda perfecta, tal cual, con unos simples vaqueros, una falda negra, con mil cosas…

Y superior el blusón blanco de plumetti, largo, con vaqueros…¡Sublime! Ya sabéis que el plumetti me mata y en concreto, no es por nada, pero bendito blusón, cómo es…

Monísimo el chaquetón militar gris del niño también, o ¿acaso le queréis vestir de almirante? Es que no sé por qué dicen que no pongo cosas arregladas… Para un niño de esta edad, ir más arreglado, es ir con chaqueta y corbata y eso es para una boda, Comunión y demás.

Ropa “arregladita” es la de la marca “Sánchez de la Vega”, que ha irrumpido fuerte en este mundo, pero que, como todo, hay gente a quién le encanta y gente a la que le horroriza vestir así todo el día a los niños.

Un ejemplo es la colección Pandora, donde aquí veis el vestido. Pues ya véis, todo lo contrario a la anterior marca. Pecheras adornadas, volantes… otro estilo radicalmente opuesto.

Yo respeto absolutamente todos los gustos, pero este vestido no se lo pondría para todos los días, está claro.

Y mirad el conjunto de la bebé… pues parece una niña antigua y está muy rica, pero no lo veo muy ponible para diario. ¡Ojo! Que sé que hay gente que las lleva así y cada uno hace lo que quiere.
La falda y camisa Olimpia, pues ídem de ídem. Adornos y adornos. Si eres de rosa y de ir arregladita, pues han dado en el clavo. Pero si no…

Lo mismo con el Jesusito, aunque me gusta mucho más. Porque ves a una niña así por la calle y quieras o no, te das la vuelta, aunque sea porque van tan pocas… Parece una muñeca antigua, pero para mi gusto, demasiado rococó.

Más mono de colores y de todo veo al Jesusito Aneta, pero el tocado paellera que ahora se lleva tanto, se lo sustituiría por un lazo y estaría el triple de mona. La tela es muy bonita y la mezcla de colores, también.
Pues eso es lo que entiendo yo por arregladitos, es decir, un poco recargados para el día a día.


Y ya os he dicho que hay cosas que me privan, como por ejemplo, en la marca » Belcoquet», este vestido de talle bajo de su colección Liceo. Es un vestido hecho con gusto y desde luego, la niña está ideal. Sin excesos y arreglada.
Toda la colección Liceo me parece monísima; aquí la veis. El cúando y dónde ponérsela es el quid de la cuestión… Y os aseguro que es fundamental.


Ideal también, según para cuándo, el vestido Aura, con este tono tan fantástico y la tira bordada. ¿No os parece divino? Para un boda de invierno, super exquisito.

Y el abrigo complementándolo, el no va más. Una niña bombonazo. También toda la colección Aura me parece preciosa. Me repito, pero os digo que lo veo más para días señalados, aunque cualquier día, también se puede poner, pero no por norma.


Y estamos de rojo, porque la Valle, también es preciosa… ¡Que lo arreglado también me gusta! Pero dentro de un orden. Que hay arreglados y “un poco disfrazados”.
Doy de nuevo la vuelta a la tortilla, para enseñaros el súper estilazo de la marca «Pepito by Chus». Para otras ocasiones, para otros gustos, la veo divina. Todas sus colecciones me pirran. No sirven para ir a ciertos sitios, pero sí para todos los demás y su buen gusto y, repito, “súper estilazooo” me pueden.

Nada más ver el trench albaricoque, con ese mono y camisa blanca de lazada al cuello, me he quedado un buen rato mirándolo. ¡Qué maravilla! Es como una portada de revista… Sólo veo buen gusto y ganas de comprármelo hasta para mí.

Los vestidos Berry, en rosa (ya veis que también existe el rosa), preciosos, sencillos, con cuello de quita y pon y súper ponibles. ¿Sí o no?

Lo mismo con los de cuello en blanco, como el gris de rayas, vestido Añil y esos puños, tan sencillos y divinos a la vez.

O el vestido verde agua Rocío de la pequeñita. Me chifla la tela y el diseño y con esa edad, puede estar mona tanto con uno de este estilo, como con uno de nidos y vuelo.

Para mayorcitas, fabulosa la falda Indian, cortita y de vuelo, tal y como la lleva, con la camisa y chaqueta de rayas. ¡Qué niña, por Dios!

El tabardo Arco con el vestido de punto, para el que no tengo palabras… Y mira que sé que hay gente que estará pensando: “pues si no tiene nada”. Por eso digo que respeto todo, pero no estoy de acuerdo en absoluto.

Igual me pasa con esta maravilla de mono, el Antique, y la camisa Merlot. Y fijaos que son rayas con rayas ¿eh? Chus, su diseñadora, de nuevo nos da una lección de buen gusto que yo no puedo aguantar.
Claro que esto me gusta para niñas mayores.
¿Veis como me gusta de todo?
Y os he dejado fotos de la marca “Meriche”, para las que sois de vuelos, que tiene vestidos y conjuntos chiflantes para este invierno. Y aunque son puestitos, la mayoría, de un gusto fetén.
Bueno, para las adictas a los vuelos, y para las que no, sólo he pretendido que vierais que me puede gustar de todo, pero cada modelo en su momento, en su lugar y en su edad.
Un beso muy equilibrado
Eva,me encanta todo lo que pones,cuando tengo tiempo,siempre me meto en tú blog y como siempre la ropa ideal,yo que te conozco hace mucho,siempre has tenido un gusto increible.Un besazo
¡Mil gracias Rosi! Ya sé que eres una exagerada, pero me quieres… Ya sabes que me chifla la ropa de los niños y me gusta escribir el blog. ¡Un beso muy fuerte y mil gracias de nuevo por todo!
Porque no pones más ropa de niño y de recién nacido. Muchas gracias. MAITE