Bueno, febrero ante nuestros ojos. Creo que el año pasado, ya os dije que es el mes del año que menos me gusta.

No sé muy bien por qué… no me dice nada, no me trae recuerdos de ningún tipo, no tengo cumpleaños en la familia ni entre mis amigos… en fin, que es

un mes un poco amorfo.

No queremos ya nada de invierno, pero aún ni soñamos en ponernos de verano. Mucho frío falta aún por llegar… ¿Mucho? Pero si todavía no lo ha hecho…

Bueno, por lo menos, en algunos sitios…

Así que, bueno, lo mejor es que es un mes un poquito más corto, jajaja… En Burgos, es de los meses en los que más frío hace, junto con marzo. Un horror.

Este fin de semana, para variar, se me ha pasado sin pensar, como casi todos. Es que cada vez se pasa todo más rápido. Mis hijos (los chicos) están inmersos en los estudios, ya que tienen los exámenes ya, y la loca de la casa, esta noche vuelve de Roma, así que se nos acabó la tranquilidad.

Estoy deseando que venga, porque además, no estoy tranquila hasta que no llega, pero luego, empiezo a arrepentirme cuando el desastre se instala en la casa. ¡En fin! Ella es feliz y es lo que importa.

Y bueno, a juzgar por vuestros mensajes, sigo con Comuniones ¿no? Es lo que más me pedís. Os doy todas las ideas que queráis. Ahora, no me preguntéis por tiendas físicas, porque me sé muchas pero no las de toda España…

Cada vez os digo más que tenéis que dar el salto a comprar vía on line. Si dais las medidas, es muy difícil que no acertéis y es la única forma de llevar al niño/a enteramente a tu gusto.

Os voy a hablar de los vestidos de Comunión de la marca “Petritas”. Me encantan por su sencillez, su buen gusto y su relación calidad-precio. Son realmente bonitos. Ya sabéis que no soy de niñas-princesa.

Y tenéis la tienda on line… más fácil, imposible. No podéis poner ni un solo pero. Además, en algunos sitios, ya venden su colección en tiendas, como en una de Orense que yo me sé y otras… Es cuestión de enviar un mensaje y preguntarlo.

Pues ahí voy con el vestido Lucía, uno de mis favoritos: cuerpo  beige plisado de piqué y falda de piqué. Lazada de encaje beige. Va forrado. Ya veis que prácticamente no tiene vuelo. Todos estos vestidos quedan más lucidos si les ponéis un can can.

Ya veis qué monada, sencillo y precioso, con ese recogidito con flores pequeñas… Es todo realmente exquisito.

Otro, monísimo, el Topitos: Cuerpo en piqué de canutillo color beige y falda en topitos de piqué. Pero ¡qué rematadamente bonito es el piqué, por Dios! Lazo de encaje beige y divinidad al canto. ¿No os parece? Me chifla este estilo, tan clásico y mono.

Ideal, el vestido Candela, de hilo, con plisado en el pecho y puntilla valencien. Lazo de encaje blanco. Preciosísimo, también con can can. Os lo recomiendo. Dar un poco de volumen, hace el doble de bonito.

El vestido de sarga color natural con plisado no se queda atrás: la lazada de encaje beige le da un toque romántico encantador… Las manguitas francesas, también con encaje… el tocadito… no hay recargamiento alguno en ninguno de ellos.

Y fantástico, y por eso lo habrán repetido del año pasado, uno de mis super favoritos: el de plumetti blanco, con cuello Cervantes y manguita corta. ¡Cómo es! Para una niña con el cuello largo, el ideal, sin ninguna duda. Yo no miraría otro. Es delicioso.

Y podéis mirar todos los demás entrando en su página web. No veréis ninguna estridencia, son todos de este estilo encantador y también importante: mirad bien los precios. ¡Geniales!

Y sigo hoy con la sencillez de la marca “Dimelo Hilando”, que también ha conseguido enamorarme.

El vestido Linaza, por ejemplo, de plumetti beige y puntillas blancas, es una maravilla. Sienta como un guante.

Tiene un escote en la espalda chiflante y el bajo, llenito de puntillas, pero sin ser nada apabullante, al revés… La banda y complementos la puedes poner en el color que quieras, pero a mí, este con granate y la coronita, me ha conquistado por completo.

Aquí lo veis con la banda lila y otro tocado más apropiado con ese color. Para las que seáis más de colores pastel… Yo, me decanto por el granate, clarísimamente.

El que me ha robado el corazón, por su sencillez y por ese “no tener nada, pero teniendo un diseño fabuloso” es el vestido Atalaya.

Ya lo veis: suelto, con un cuellito plisado y pechera de puntillas…pero la viva imagen de la sencillez y buen gusto. Además, original a más no poder.

¿Quién hace la Comunión así? Pues alguna niña con mucho estilo, que se atreva a ponerse esta maravilla de tocado de crochet, que veis aquí, que muero por ponérmelo yo.

Ya os digo que me voy a comprar varios para escribir…

Mirad la espalda… si,  parece una monjita… mona, mona. La veis con un tocado de madroños precioso. Pero yo me atrevería con el de crochet …¡Estilazooo y clasón!

Chiflante y original como nada, el vestido Nazarí. Como veis, también suelto, con una especie de baberote precioso y abertura delantera, al igual que en las mangas.

Me parece diferente, pero sencillo y encantador

Y aquí, veis la espalda, con el babero y la abertura lateral… No me digáis que no da juego para ponerle un tocado bárbaro y unas alpargatas coordinadas… ¡Me mega chiflan los vestidos así!

Y exquisito,  el Tilburi, con jaretas y fajín de tul beige…

¡Divina sencillez! Todo el cuerpo de jaretas, el fajín y un pequeño encaje beige en el bajo. Ni más ni menos, ni falta que le hace… Y más, de los que os dejaré fotos o los miráis vosotros en su página. Esta marca cordobesa cada vez me gusta más. ¡Olé!

Las madres de los niños me riñen y con razón. Yo le digo a mi marido que poner ahora un negocio de trajes monos de Comunión para niño, sería un chollo, porque yo no os pongo casi trajes. Primero, porque hay poco y segundo, lo que hay, no me encanta, ni tan siquiera me gusta casi.

Bueno, algunos, sí, pero a muchas de vosotras sé que no…. Me súper chiflan estos niños, vestidos por la marca «Nicoli». De verdad que es lo que a mí me gusta, ¿qué le voy a hacer?

Así la hicieron mis hijos y es como más naturales les veo.

Americana marino, camisa azul, una corbata bonita y pantalones o bermudas.

De paso, os enseño los de Nicoli de niña, que son preciosos, en la línea de la sencillez romántica: uno con fajín rosa y otro azul. ¡Me privan!

Ahí dejo esta marca, facilísmos de comprar porque tiene bastantes franquicias y además, una tienda on line estupenda.

Y como os tengo que decir alguno más, en la marca Varones, de José Varón e Hijos, podéis encontrar algunos. Unos más clásicos, otros más atrevidos… De los Almirantes y demás, paso palabra. Lo siento pero no puedo con ellos.

Pero para las que os guste, en Varones, los tienen.

Por ejemplo, entre los marineros monos, está este de siempre en blanco y marino. Con este, no falláis y un niño mono tiene que estar guapo con él.

Ahora parece que se llevan más estos otros, más rústicos, menos rígidos, más estilosos, que por cierto, son muy monos: en un azul muy bonito, los 

veis con bermudas de rayas o con pantalón. ¿Qué os parecen? Lo cierto es que son bonitos, qué tonterías.

El traje marino con corbata roja de arriba,  siempre un acierto, si bien hay muchas empeñadas en que no parece de Comunión. Yo, como eso no lo entiendo… ahí lo dejo. Parecerán más de Almirante, será eso, que hay que disfrazarse un poco…

Y como para gustos los colores, aquí arriba os dejo un poco de todo: para las modernas, para las fieles al marinero y el de Almirante, que he de reconocer que es el más bonito que he visto nunca…

Y os vuelvo a enseñar al niño con americana azul más clara y corbata roja… jajaja.

En la marca “Olacaracola”, también hay algunos marineros diferentes, como os digo, menos rígidos, de telas más finas, más ligeros…

Aquí tenéis dos azules totalmente diferentes… eso ya, va en gustos. Pero fijaos, hasta los zapatos son modernos, muy lejos de los típicos castellanos de toda la vida.

También, los de la casaca en gris o azul con pantalón blanco, que también dan un giro total al marinero clásico.

Entre todos los de esta marca,  el que más me ha gustado, no sé por qué, por los colores será, es éste: casaca marino con la corbata-lazo gris y pantalón gris. Veo que el niño está muy mono.

Así estáis todas… buscando.

Y otra pregunta, a la que he estado dedicada gran parte de este fin de semana: ¿cómo llevo a sus hermanitos o hermanitas a la Comunión?

¡Pero hijas mías! Que Dios no me diera más trabajo que ese, con lo me chifla, jajaja…

Para empezar, se tiende mucho a poner a los hermanitos casi tan arreglados como el Comulgante, lo que a mí no me gusta.

Ese día, el de la Comunión es el protagonista y los hermanos tienen que ir ideales, pero no de boda. Tienen que ir monos y punto.

Y ¡anda que no hay marcas para ponerlos como pinceles!

Un ejemplo exquisito que os pongo es de la marca «Mar&Ola»: mirad qué cuadro de niños (entre los cuáles se pueden encontrar también algún primito), tan ideal. Todos en tonos grises, clásicos, perfectos para ese día. Más no me pueden gustar.

Si queréis más colorido, me encantan también estos conjuntos de la marca «Badum Badero». Los hermanitos van divinos y no tienen nada que ver con el de la Comunión. Me encantan.

Si son más pequeños, tenéis, por ejemplo, el vestido Cayetana y el pelele del mismo nombre de la marca «El Armario de Lucía». Son preciosos, arregladitos y perfectos para ese día.

El color me encanta…Y la tela y diseño, también. Muy arregladitos e idóneos.

Y unos conjuntos divinos para ellos, los tenéis en la marca Sánchez de la Vega, que viene pegando fuerte y a la que le auguro un futuro prometedor.

Me diréis qué monada de conjuntos para los hermanitos, sean niños o niñas.

Por ejemplo, estos conjuntos en coral y azul, los conjuntos Lavanda. Me diréis cómo están…

Impresionantes en plumetti, mezclando ese azul divino con el coral. Jesusito con la capota exquisita si es pequeñita o vestido con la banda en el pelo si es más mayor…

Si no van a una Comunión así… ya me diréis.

Y si son niños, preciosos también con los conjuntos Azalea de la misma marca. Camisas azules con tapeta blanca, detalle fucsia y pantalones cortos fucsia.

¡Monísimos! Y después, ponibles para un día en el que los quieras llevar de matrícula de honor. ¡Me privannn!

Si sólo tiene una hermanita pequeña, el Jesusito Azalea, es de morir: con la capota con puntilla y el

lazote de raso fucsia, el vestidito blanco estampado de vuelo y la lazadota atrás…para qué quieres más…¡Bombonazo de niña!

Y me parecen también apropiadísimos para un día como el de la Primera Comunión, estos vestidos mágicos de la marca “Baja Costura”, en los que se mezclan los colores marfil, rosa y verde agua. Románticos, arreglados, preciosos.

También para el niño pequeño, camisa de lino verde y pantaloncito corto en la misma tela de flores que los vestidos.

Incluso hay para el bebé: cubrepañal de flores y camisita blanca.

Una colección más que apropiada. Diría yo, perfecta.

¡No me vengáis con que no sabéis qué ponerles, que me enfado! No nos envidian en otros países ni nada… Cada día tengo mensajes de ingleses y árabes, que me dicen que quieren mi ropa… ¡se creen que la vendo yo!  Jajaja.

Ánimo a todas la madres que nos ponemos muy nerviosas y seguro que todo sale perfecto y es un día inolvidable.

El caso es que cada uno vaya a su gusto. Eso es lo mejor, porque si crees que no vas adecuada por lo que sea… no disfrutas.

Podría seguir y escribir un libro, pero creo que por hoy me toca terminar. ¡Que este fin de semana ya he vestido a unas cuántas familias!

Ahora, voy a ver que hace la mía…

Un beso  con  corona de florecitas