
“Y bueno pues…un día más que se va colando de contrabando”. Llevo toda la mañana tarareando esa canción de Serrat. Es increíble lo rápido que se pasa la vida.

A pesar de que, al estar como estoy, no me importa si es día de diario o fin de semana, contemplo pasmada que vuelve a ser sábado…

Como os digo muchas veces, aprovechad al máximo cada minuto. Cada día es un regalo y todos nos vamos a ir de este mundo en algún momento. Yo no he sabido valorar bien todo lo que tenía hasta que lo perdí.

Quiero pensar que hice las cosas bien, pero siempre algún fantasma aparece y noto pinchazos en el estómago.

Me arrepiento de enfados tontos, de rabietas de niña pequeña…Todo eso, lo podía haber evitado, pero así es la vida, que te da, te quita y te da la vuelta mil y una veces.

Otra Semana Santa que llega y seguimos confinados. Esta pandemia parece que ha venido para quedarse. No me gustan nada las noticias que oigo. No sé si nos quieren engañar, si las vacunas servirán para algo. No sé nada.

Me he ido con Marta y Juan a tomar unos vinos y pensaba en cuando tenía su edad y toda la vida por delante… Ellos están ilusionados, preparando la reforma de la casa con los planos, la empresa que se lo va a hacer, etc.

La boda, parece que será el año que viene, en septiembre. A ver si por lo menos, estoy con un poco más de ganas y me hace ilusión. Juan no tiene muchas ganas de todo el follón que supone preparar una boda. Pero bueno, con no hacerla multitudinaria, vale. Poco a poco.

Sigo sin llamar a mis amigas, amigos y demás familia. No cojo el teléfono la mayor parte de las veces. No me encuentro con fuerzas para escuchar los planes y la vida de los demás. No sé si será cuestión de tiempo. No lo sé.
Cuando me pongo a escribir el blog, me aislo de todo y me sienta bien. Leer vuestros mensajes, contestaros, aconsejaros sobre cosas que me preguntáis y buscar lo que me pedís, me entretiene muchos ratos.
Pero aun así, el vacío que tengo es tan grande que no puedo ver más allá.
A veces, una pequeña ilusión, un pequeño motivo, me hace pensar que todavía me queda vida por vivir. Pero otras veces lo veo todo negro e imposible.

Dentro de nada, ya estaremos vestidos de primavera-verano. Eso es así. Por eso, hoy os hablo de un color que es sin duda, un color sólo de verano.
Un color que, sin ser mi preferido, reconozco que ilumina, da luz y sobre todo, favorece que es una barbaridad. La fuerza que tiene es inmensa y hace verdaderos estragos con los diseños.
Es como si un rayo de luz iluminara el camino de estos niños así vestidos…

Hablo del color coral. También los mandarinas, anaranjados, etc, son colores que sólo me gustan en verano.

Yo soy muy de la gama de los beige y camel y me cuesta comprarme algo de color coral y eso que me favorece, al ser tan morena. Lo mismo les pasa a los niños. Los morenitos están divinos con estos tonos tan alegres.

Una de las que ha apostado por este color para este verano es “Pilar Batanero”, que con su colección de calaveras me ha conquistado por completo.

Y como veis, para todos, ya que es una familia muy completa. Desde el bebé, hasta los mayores, pueden ir vestidos con ella.

El Jesusito puede ser con volante y manguitas o de tirantes, el que más os guste. Para el calorazo, mejor el segundo.

Ideal también el conjunto de falda con blusa oversize. ¡Qué estilazo de niña! No me puede gustar más.

Coquetón el conjunto de pololos para más pequeñas… Ideal, con la blusita con el cuello de volante.

Por supuesto, el vestido, sencillo y precioso. Tenéis también la camisa sin tirantes, el canguro para niños pequeños, la ranita de volantes, la sudadera, etc.


Colosal la colección. Mona, sencilla y ponible. Las calaveras y demás adornos, van en negro me parece un acierto absoluto para este verano.

En “Tul y Pompón”, siempre cuentan con este color para la temporada primavera-verano, y es que, hay que reconocer que es

una buena baza.
Por mucho que nos guste un color, a ellos puede que les favorezca más otro. Es lo que me ha pasado a mí siempre con Almudena y el azul marino. Como con ese color, no está con ninguno.

Cada madre conoce a sus hijos y estoy segura de que intentaréis combinarles lo mejor que se pueda y utilizaréis los colores que más les favorezcan.

La familia de cuadros vichy en coral, no puede ser más favorecedora. Y, de nuevo, para todas las edades.


Desde el conjunto de braguita con blusa de volante hasta el conjunto de falda de la niña mayor. Y si tenéis más de un hijo, es una maravilla para coordinarlos a todos, como hacía yo siempre y hasta que pude.

Hay ropa realmente bonita y que merece la pena. Sé que ahora estamos viviendo un momento difícil, que todos tenemos otras preocupaciones, etc, pero no tenemos que dejar que nos pueda la desgana. Hay que seguir adelante como si pasara nada, porque puede que se tarde mucho en volver a la “normalidad”.

Tantas ceremonias aplazadas el año pasado y ya veis que en éste, va a pasar exactamente lo mismo y hay cosas que no se pueden ni deben aplazar. Hay que vivirlas y disfrutarlas como sea, a pesar de la pandemia.

La mascarilla ya forma parte de nuestras vidas y se confeccionan monísimas, a juego si hace falta o de “vestir”, para una boda o evento.

Esta noche ha sido el cambio de hora y vamos un poco a la carrera… Ya vienen los días largos y bonitos. La gente estará mucho más animada, todo se ve un poco mejor, con más alegría.

Me voy con Tess a comer a una terraza y después, sigo con los corales…

Ya de vuelta. ¡Qué día más bonito hace! Tess y yo en una terraza como si fuera pleno verano en Burgos. La verdad es que la primavera en Madrid es una gozada. Aunque me falten las fuerzas y aun con desgana, hay que intentar ver algo bueno en esta vida, porque quieras o no, ella sigue y no pregunta jamás.


En “Mi Canesú”, también es muy frecuente encontrar el color coral o “primo hermano” del coral, como los mandarina, melocotón, etc.

En su colección para este verano, nos deja claro que se lleva más que nunca, así como las florecitas tipo liberty, que son lo más de lo más.

La blusa con baberola de la niña es tendencia total y también para nosotras. Vestidos y camisas con cuellos grandes vuelven a la palestra.

Para el niño, la camisa con cuello mao, monísima también. Para conjuntar a hermanos, una opción superior.
Y de nuevo el vichy, esta vez combinado con la tela de liberty y ¡cómo le queda de ideal el peto a esta niña! También súper tendencia para nosotras, así que estad al loro.

Ya veis que para todas las edades tenéis monerías, como los petos, pinochos, jesusitos bordados, otros jesusitos más informales, etc…
Parece que durante la pandemia, ha habido mentes prodigiosas que han sabido sacar lo mejor de cada cuál para enseñarnos ahora estas maravillas.

Tonos favorecedores e intensos en las colecciones y lo cierto es que no sabes cuál elegir, porque te quedarías con todos los modelos.

Nos podemos sentir orgullosos de las marcas “made in Spain”. No tenemos nada que envidiar a las extranjeras. Al revés, muchos de ellos se vuelven locos con nuestra moda infantil.

Por eso, yo insisto en que vistáis bien a los niños. Claro que hay cosas más importantes en la vida, pero esto es algo bonito que hay que fomentar y no dejaros caer en la comodidad de ponerles un chándal y a correr…


Bastante tenemos con estar todo el día con la mascarilla puesta, como os he dicho. Hay que intentar que la vida sea un poco bonita con los medios que tengamos a nuestro alcance y yo lo intento, al enseñaros ropa tan bonita. Espero que contribuya a que paséis un ratito leyéndome y aconsejaros lo que más se lleva y ante todo, lo que más me gusta.

Pablo acaba de comunicarme que se va a Burgos en Semana Santa y ya me he quedado preocupada. Él puede ir pero no sé si es buena idea que vaya a casa de mi madre con este panorama que tenemos.

En fin, voy a meditarlo un poco, aunque me temo que la decisión ya la tiene tomada. ¡Ayyy! No tengo un segundo de tranquilidad.
Espero que lo paséis lo mejor que podáis y que tengáis cuidado, ya que este virus no es ninguna broma pesada, aunque a veces lo parezca.
Aquí nos quedaremos Tess y yo para seguir con nuestra lucha diaria, para que pase el tiempo y me vayan cicatrizando las heridas.

Espero que os hayan gustado las colecciones y que llevéis a vuestros niños lo más bonitos que podáis.
Mucho cuidado con todo que, ahí afuera, no reparten golosinas.
El domingo de Ramos se está terminando y no he estrenado nada…
Un beso de Pascua.