
¡De nuevo aquí! Hoy sí que de verdad, espero no extenderme mucho, porque no os podéis imaginar la de cosas que tengo que hacer…¡No me da la vidaaaa!
Me pongo a escribir tardísimo y es que esta mañana, no me ha cundido el tiempo: hablar con una, con otra, quedar, concretar… ¡Buffff! Ni os lo cuento, que os mareo.

Además, para más inri, estoy buscando un cachorrito de perro que, de adulto, sea de tamaño medio, para adoptarlo. No es para mí (me echarían de casa), pero estoy tan contenta de poder salvar a uno del infierno en el que viven…
Pensaréis que estoy loca, pero me apasionan los animales y no me gustan muchas personas…


Lo que pasa es que no es tan fácil adoptarlo, aunque lo parezca, pero yo sigo y sigo preguntando y no pararé hasta que lo consiga. Ese perrito tendrá una vida feliz. Ya que no puedo salvar a todos, por lo menos, salvo el mundo del cachorro.
¡Ayyy! No sabéis lo que se sufre cuando te gustan tanto los animales y ves cosas increíbles por parte de los «llamados» humanos. Cada vez que entro en Facebook y lo veos, les maldigo a todos.

Así, que ¿cómo voy a estar tranquila? Soy un puro nervio todo el día. Mi hija me acaba de decir que le ha salido faltal el examen… Lógico, lo estudia la víspera… Ella, como todos los de su edad, lo niega. Dice que el profesor ha ido a “pillar”… Qué os voy a contar a muchas que no sepáis.

Mirad por dónde que a mí nunca me pasó eso. En nuestra época eramos mucho más sacrificadas. Me acuerdo que yo lo pasaba fatal en épocas de exámenes. Siempre me parecía que no me lo sabía… nervios, nervios y nervios.
Y mi hermana igual. Así que estos niños no sé de qué pasta están hechos, porque a ninguno de los tres les he visto jamás nerviosos por un examen. Digo yo que no es normal ¿no?
En fin, que ya empiezo a enrollarme y no quiero… no puedo, vamos.
Hoy sí que os voy a hablar de Comuniones…qué sí… Será el primer día de varios, porque no me da tiempo a poneros todo lo que quisiera.

Por eso, hoy os voy a contar cosas de dos marcas muy diferentes, como diferentes son los gustos. Una es más sencilla, pero fantástica para mi gusto, y la segunda, es, como yo digo, de princesas, de sentirse que por un día, eres la reina del mundo.

Bueno, Pikiliki es la primera de la que os enseño cosas. Ya os hablé de ella el año pasado y me consta, que niñas conocidas hicieron la Primera Comunión con unos vestidos que yo les recomendé. Preciosos es poco.

Y digo que ya os hablé de ellos, pero hoy vuelvo un poco, ya que en este sitio común en el que cada vez somos más, hay mucha gente que no los ha visto y eso no lo puedo consentir.
Es una marca sevillana de ropa infantil a medida, con un estilo sencillo, pero especial, con clase, con ese “algo” que falta en muchos otros.

Tiene siempre los mismos modelos de Comunión, a los que cada año, va añadiendo alguna novedad.

Dentro de los modelos, tú puedes cambiar alguna cosa, como el escote, las mangas, el bajo… es decir, cada Pikiliki es único.
Todos somos conscientes (creo yo…) de que no a todas las niñas les favorece el mismo tipo de vestido, ni mucho menos.

Pasa igual que con los adultos. Unas niñas parecen más pequeñas de lo que son, lo cual para la Comunión es una maravilla, ya que a las edades que la hacen ahora, más bien muchas parecen Novias.
Pues una de las maravillas de vestido de Pikiliki es éste, que os he ido enseñando, el cual, no me canso jamás de mirar: románticón como él sólo, a la vez sencillo, delicado, con clase…

Me chifla su espalda escotada, su fajín rosa empolvado de tul precioso, super especial. Cómo sienta… viéndolo se comprende todo.

Ni pizca de vulgaridad, de recargamiento, de ordinariez. Me parece un vestido diez. Digno de una princesa o algo así, aunque ya sé que muchos consideráis que éstos son de otro estilo, pero yo ya me entiendo…

Los botones traseros, las mangas transparentes de plumetti… ¡es bárbaro! ¿No os parece? Es que yo soy de estos vestidos… incluso de más sencillos, pero con ese algo, que los hace únicos.

Bueno, que, desde que lo ví el año pasado, junto con algún otro que os iré diciendo, es de mis favoritos, sin duda alguna.

La media corona que lleva en el pelo es divina, nada recargada, a juego con el color del fajín… una auténtica monería.
Otro pirrante del todo: el de piqué blanco con encajes crudo en el talle y en la manga corta. ¿Cómo es? ¡Uhmm! También fantástico absolutamente.

Ves entrar a la niña con cualquiera de estos dos vestidos y te quedas mirándola, sí o sí. Eso está claro.
Me chiflan las manguitas cortas y el talle tan alto, con la pechera llenita de encajes en crudo, totalmente romántico. También rematado con el extraordinario fajín de tul, que queda impecable. En el mismo, idéntico color que el encaje, por supuesto.

La espalda divina, en pico, bordeada de encaje y la media corona. Preciosa la veo. Bárbarísima.

Si a esto le añades lo que me apasiona el piqué… nada pomposo, nada de “Menina”, que llamo yo a las que, como os imagináis, van con la falda llenita de vuelo…
Yo, cuando la hizo mi hija, lo tenía claro. En Burgos sólo había una tienda más o menos bonita en la que vendían Vestidos de Comunión, distintos diseños, pero todos de “Menina”.

Y me negué. Me vine a Madrid y le hicieron una maravilla de piqué con banda de puntillas y lazadota. Muy sencillo, pero delicioso.
Mira que no me gusta llamar la atención, es decir, que la niña fuera diferente a las demás, pero no me quedó otro remedio… En vez de tocados, coronas, capotas y mil cosas, Almudena iba con su lazote blanco a un lado, como iba todos los días.
Reconozco que me emociono cuando lo pienso, porque, no es porque yo lo diga, pero iba, con mucha diferencia, la más mona de todas. ¡He dicho! Y os juro que es verdad.

Y ahora, os enseño, la maravilla que ha incorporado este año a la colección: de lino en color crudo y tul color paja, con corte imperio y fajín de tul igual que la falda, que lleva doble caída.

Me encanta el escote, tanto por delante, como por detrás, que es más pronunciado. Bueno, decidme cómo lo veis… A mí me fascina, pero, claro, es mi gusto…

Las mangas, también de tul y la media corona, que más no me puede privar. ¡Qué tono! ¡Qué escote! Cómo sienta, por Dios…
Los botoncitos, detalles que me enloquecen, las manguitas tan delicadas… todo en sí es pura delicadeza, parece como si se fuera a romper… ¡Fantástico Beatriz!
Beatriz Aguilera es la diseñadora y más no me puede gustar lo que hace, ya se me nota.

Preciosísimo también el blanco, con cuello y mangas de volantones… No tiene nada más que eso y cómo es… Sin más adorno que el estilo de la niña para llevarlo.

Lo veo divino, como divino también el de jaretas con plumetti que os enseño aquí. Todo el cuerpo de jaretitas, con tul de plumetti en la falda y las mangas y el fajín de rigor…
La media corona con flores blancas y ¡voilà! Maravilloso.

Termino con Pikiliki, con este vestido de mangas fruncidas. Largo, con el fajín y el detalle espectacular de esas mangas tan soberbias hacen todo. Ningún adorno más, por favor.
Escote redondo, coronita de flores y ya está. Un vestido para recordar…

Entrad en su página y ved… aunque lo más bonito ya lo habéis visto, no es por nada… Beatriz, quiero colección de verano, de invierno, de todo…
Y damos un giro de 360 grados para enseñaros los Vestidos de Comunión de la marca “Bebés Chic”, a los que tengo que reconocer un mérito increíble, una fantasía y un talento fuera de toda duda.

Logra que, con sus vestidos, las niñas no sólo parezcan princesas, sino que te quedas mirándo los diseños, como pensando: ¿Y cómo demonios se les ha podido ocurrir semejante detalle, telas, diseños, etc…?

Yo, con cara de boba me he quedado. Es otro estilo al de antes, no cabe duda. Más espectaculares, más llamativos…. De princesas totalmente. De cuento hecho realidad.

La imaginación que tienen algunos diseñadores me deja apabullada. Y no me cabe duda de que las niñas estarán super chifladas de llevar un vestido de cuento. De sus cuentos de princesas…
Voy con el primero: el vestido Hada. No sé ni cómo describirlo. Me recuerda a mis cuentos de cuando era pequeña, en el que salían princesas, siempre rubias y yo me quedaba con la boca abierta de pensar en lo guapas que eran…
Pues algo parecido pasa con esta niña que lo lleva. ¡Qué no olvidéis que eso también hace! No van a poner aquí a una niña a la que no le pegue el vestido nada o a una niña sin gracia… Cómo siempre os digo, ojito a eso.

Os puede chiflar el vestido, ser el vestido de vuestros sueños, pero si a la niña no le va, no le va. Os aconsejo que si dudáis, os decantéis por algo más sencillo.
El color es precioso, el plumetti, el diseño… hasta el tocadito como un sombrerito, puede resultar divino si lo llevas como hay que llevarlo…

Un lujo de vestido ¿qué voy a decir, si es la verdad?

Fijaos en la espalda, no le falta detalle. El escote en pico, las mangas transparentes con la terminación de ese encaje espectacular, a juego del que lleva en la cintura y en el bajo…
Otra maravilla, el vestido Grecia, al cual no le puede ir mejor el nombre. Como una diosa griega está la niña¿no?

Vestido color crudo, con flores bordadas, de tirantes, con pliegues en el cuerpo… y un tocado trenzado y con flores que más adecuado no puede ser.
¡Por Dios, qué maravillas diseñan!

Aquí no acaba todo. Para que “la diosa” entre en la Iglesia, a juego, esta impresionante capelina también de flores bordadas, con lazote de raso en tostado.

Seguridad ante todo con este vestido. Porque tiene lo suyo… Es una maravilla, pero, cuidado, según quién lo lleve.
Sigo con el país de los cuentos: le toca el turno al vestido Tilda, románticón como nada, de plumetti crudo, pero con colores en la banda y en el tocado, como son el celeste y el rosa.

¡La auténtica princesa! Vestido super, pero super especial. Los toques de color lo hacen único, diferente seguramente del de todas las niñas que hagan la Comunión con ella.
Por eso os digo: estudiad bien a vuestra hija y pensad…

Fijaos en la espalda, con ese dibujo tapando el escote en pico… En este caso, la banda es rosa, al igual que el tocado. ¡Increíblemente especial!

El vestido Ninfas, más de lo mismo. De tul bordado y con detalles que es imposible que pasen desapercibidos. Tonos rosa empolvado y arena, que combinados son una auténtica delicia, es lo que le hace otro vestido de ensueño.
La coronita, de flores pequeñas, al igual que la cinta finita de la cintura, con dos flores y anudada atrás… el increíble vuelo que se desparrama por el jardín como si de una novia se tratara…

Absolutamente todo, hace que sean vestidos de cuento, de fantasías que hemos tenido todas alguna vez… Desde luego, el don de la diseñadora es incuestionable.
Y por último os enseño, el vestido Pitiminí, de guipur, simulando rosas de pitiminí, espectacular de nuevo, como todos los que os voy enseñando.

Fijaos en los detalles, en ese escote de encaje, en la flor estratégicamente colocada, el tocado… es puro romanticismo.
Bebés Chic hace mucho hincapié en los detalles, y eso es algo, que, como sabéis, me apasiona.

Todos ellos están como inspirados en los cuentos de princesas, de hadas, de ninfas del bosque… y está claro que ha quedado demostrado perfectamente.
Y a mí me toca ir terminando… no sin pena, después de ver tanta maravilla y tanto talento.
Espero que algunas os decidáis por cualquiera de los vestidos de las dos marcas de las que os he hablado, tan diferentes, pero tan increíbles… Como sé que hay gustos para todo, os quiero poner variedad.
Otro día, más, muchoooo más.
Un beso en un día especial
Buenas noches Eva… acabo de descubrir tu página y me ha encantado el artículo. Quería preguntarte si sabes algún valor orientativo de los vestidos de Pikiliki que me han parecido una maravilla. Mil gracias!
¡Hola! Pues me alegro de que me hayas descubierto, pero en lo que respecta a Pikiliki, que eran unos vestidos preciosísimos, siento decirte que la marca cerró ya el año pasado por motivos personales y no sé si volverá, por lo que este año, tampoco hay colección de Comunión de Pikiliki. Una pena, eran impresionantes. ¡Un saludo!
Idealisimos los vestidos de comunión de Pikiliki, me quedo con ese estilo. Bebes Chic me encanta lo q hace pero para comunión elegiría a Pikiliki
¡Gracias Eva! Coincidimos plenamente….
Eva…Que bonitos son los vestidos de comunión de Pikiliki,ya sabes que mi sobrina gracias a ti fue con el vestido de plumeti tan ideal,y fue un exitazo,la niña monisima y la madre encantadisima,que ya es dificil darle gusto.Gracias otra vez ,ya te enviaré la foto..
Un besote