
¡Por fin me reincorporoooo! Han sido unas vacaciones un poco atropelladas y muy diferentes de lo que en principio pensábamos.
Al menos, la segunda parte, que ha durado hasta hace 4 días y han sido unas señoras vacaciones.
Fuimos con unos amigos, alquilamos un chalet estupendo con piscina (que me ha sabido a

gloria bendita, sobre todo a las 4 de la mañana), etc…
Pues sí, estos quince últimos días nos fuimos a Cádiz con unos amigos y no se me olvidarán jamás, porque he estado feliz, con un clima y un paisaje idílicos. Buena compañía, buen tiempo, comida exquisita, un vino blanco fresco de lujo y sin horarios. ¿Qué más se puede pedir?

Bueno, me ha chiflado Cádiz. Que lo sepan mis lectoras, como Chelo Esparragosa y Ana Rosso de las que me acordé mucho en la isla de San Fernando y en el Puerto de Santa María. Desde luego que vivís en un sitio privilegiado…

Intentamos ver lo más posible, pero se estaba tan bien en el chalet que, a veces, nos podía la pereza… sobre todo, con la ola de calor de los últimos días.
¡No me extraña nada que la gente de allí sea tan optimista, siempre de buen humor! Muchos dicen que son exagerados (que lo son), cuentistas (como los hay en todas partes) y que viven la vida de otra manera. ¡Pero cómo no la van a vivir, si el clima te invita a ello!

Un día, a mi marido, se le antojó comer un arroz caldoso con atún de Barbate. Íbamos mirando sitios, recién subidos de la playa, y se acerca un camarero, recitando: “aquí, lo mejor de lo mejor, todo exquisito, tenemos de todo, bla, bla, bla, bla…”.
Como él estaba empeñado en ese arroz, yo dije: “pero es que hace muchísimo calor” y el camarero: “pero quilla, si tengo una mesa a la sombra, que es gloria bendita”. Jajajaja, de traca.

La tal mesa era una más, a los mismos 40 grados que las demás, pero son tan simpáticos, que allí fuimos de cabeza. Ellos hablan y hablan y parece que te han llevado al más lujoso rincón con aire acondicionado de todo Cádiz…

Como vio que yo no aguantaba, sólo se le ocurrió decirme: “pero guapa, si allí tienes las duchas. Cuando tengas calor, te pegas una ducha y vuelves”. Yo ya me reía, porque, qué le voy a decir.

El calor era insoportable, pero mi querido marido sólo estaba para el exquisito arroz con atún que nos habían puesto. Yo, poco a poco, me fui metiendo un hielo tras otro por el escote (llevaba el traje de baño, claro) y así, apacigüé un poco el terrible calorazo que hacía… Un número, vamos.

Ahora, me río al acordarme. Bueno, que las vacaciones, genial. No conocía Cádiz (ya sabéis que soy más del frío) pero me encantó: Conil de la Frontera, el Puerto de Santa María, Chiclana, Sanlúcar de Barrameda, Vejer, y el mismo Cádiz. ¡Una maravilla!

Bueno, os tenía que contar esto, porque me salía del alma de lo que me gustó. Por deformación profesional, sí que me extrañó, a excepción de Paqui Barroso, que no hubiera ninguna tienda multimarca de niños, de esas con las que se me hace la boca agua… ¡Ni una vi!

Si hay alguna, que me perdone, pero tampoco recorrimos cada trocito de Cádiz, aunque sí lo principal… ¡Vamos, que quien ponga allí una tienda de éstas, se forra! Jajajaja.
Y bueno, pues ya estamos aquí. Vuelta a la rutina. Me ha sorprendido ver ya casi todo lo de invierno (bueno, faltan muchas cosas), y como es el primer día,
He pensado hablaros de lo que he visto que más me ha llamado la atención o me ha gustado especialmente.
Siempre lo suelo hacer al final de la temporada, porque, como os digo, aún no está todo, pero sí muchas cosas, y como ya me estáis preguntando, pues allá voy:

Sin duda alguna, me ha enloquecido el vestido Vega de “Noma Fernández”. El diseño, el color… ¡chiflante! Uno de mis favoritos, de los que he visto. Me parece difícil superarlo.

Sencillo, sin grandes adornos, habla por sí sólo el cuello y los puños blancos, el lazo chocolate… Bueno, que me pirra absolutamente.
¿Cómo lo veis? Yo muero por este color, sobre todo con cosas así… Me parece elegante, sobrio, sencillo, ideal, todo a la vez. Sin encajes, vuelos imposibles y demás cosas que me espantan.
Bueno, otros de mis favoritos, sin duda alguna, se encuentran en la marca “Kids Chocolate”, por no nombrarla entera.

Los conjuntos de cuadros granates y verdes de niño y niña me han robado el corazón. ¡Y fijaos qué simplicidad, qué maravilla de detalles, qué buen gusto sin tener que recurrir a cosas raras, mezclas imposibles y cursiladas de domingo!

El conjunto del niño me apasiona. Ya lo veis. Los niños de siempre, bonitos, preciosotes… Es una pena que sólo lo hayan hecho hasta la talla 5, porque yo lo veo perfectamente hasta la 8…
¿Y el vestido? Pues sencillo, divino, con el cuellito y puños blancos como todo detalle. ¡Ayyyy! Victoria Vallaure sí que sabe…

Más versiones de este precioso modelo es la falda, con blusa divina en azul y sudadera mostaza. ¡Mezcla de colores deliciosa! ¡Bufff, me tienen boba perdida!

Y el vestido medio granate, medio rojo (lo tuve ayer en la mano) con el cuello y los puños en azul claro, es un canto total a la sencillez y al buen gusto. Súper combinable, ponible, lo tiene todo… ¡Divino Victoria! Más no te puedo decir. Una exquisitez todo.

En “Artesanía Amaya”, quiero destacar la capa marino con pelo, que también me dejó sin habla cuando la vi. Elegante, señorial, divina… Las capas no me pueden gustar más, la verdad, pero ésta en concreto, me dejó mirándola un buen rato… Y eso que no he podido ver ni la mitad de la mitad… ¡Majestuosa! Acierto seguro.

Una gratísima sorpresa también ha sido esta maravilla de abrigo de la marca “Foque”, que más no me puede gustar. Lo tiene todo: el diseño, el color, la chispa de atrevimiento…. Me parece totalmente fascinante. ¡Qué mangas! Vamos, una joya. Y además, ponible, para lucirlo bien, pero requetebién…. ¡Fantástico!
Y aún más sorpresa me he llevado con algunos conjuntos de “Kauli”, que dicho sea de paso, no me suelen entusiasmar en general, pero siempre tienen algo, con lo que digo: ¡Ohhhh!

Bueno, pues ese ¡Ohhh! lo veis aquí, en este maravilloso conjunto de niño vestido de rojo, con ese chaquetón con pelo, que no tiene desperdicio… ¿Cómo está, no? Superior, para mi gusto…

¿Y el pequeño acompañante? ¡Me lo comoooooo. Precioso, han dado totalmente en el clavo del buen gusto. Sin pasarse, sin excesivos adornos, todo muy normal, pero todo adorable.
Con el gorro de pompón, tan preciosote, me recuerda tanto a mi hijo Juan de pequeño… Lo veo tan sumamente ideal, que no me salen las palabras.

Exquisita la sudadera gris del niño mayor, también con pelo. ¡Estilazo absoluto! Los niños, para mi gusto, un acierto increíble… Y hay más…

Originales y bonitas, las sudaderas de “Nueces”. Me chifla la negra, que no sé si gustará mucho por el color, pero a mí me parece un bombón.

Y por supuesto, las de colores más alegres, con las que puedes hacer un conjunto realmente delicioso, con los complementos adecuados.
¿Qué os parecen? La verdad es que las niñas están divinas, en el color que sea o en el que mejor les vaya.

Y no me dejo su abrigo sobrio, gris, con cuello de pelo, que me ha enamorado también. Me chiflan las cosas serias para niñas. Luego, dan mucho juego. Pero, éste, así, tal cual, es de una clase fuera de toda duda… ¡Bárbaro!
Vamos con “La Martinica” y su colección Nautik. Porque no me puedo extender mucho, que si no, ya sabéis que muchos conjuntos de cuadros habrían desfilado ya por aquí.

Como me tengo que quedar con algo, me quedo con esta colección divina, en cuadros rojos y blancos y en concreto, con sus monos. Tan ideales, tan estilosos, tan… todo.

Divinos, los mires por donde los mires… Con el calzado adecuado pueden causar estragos y por supuesto, con estas increíbles capas rojas de la misma colección. ¡Yo no sé cómo no se visten más niñas así! Por Dios, si no hay nada más que verlas…
Las demás colecciones tampoco tienen desperdicio, pero estoy poniendo lo que me ha superado nada más llegar de las vacaciones… Ya seguiré enseñándo maravillas…

“ Mi Canesú” no podía faltar en mi selección y es que no creo ni que haga falta hablar de esta marca, que, como ayer, me decía la dueña de una tienda, se vende sola… Para los pequeños de la casa, no hay nada igual.

Por elegir algo, me quedo con la colección La Haya, en la que el gusto y el estilo están servidos. Divino el jogging color caramelo con lacitos de cuadros en la espalda…¡Cuántas posibilidades para ponérselo a una niña y que vaya como los ángeles!

Fijaos en la espalda bien… Me parece una maravilla, al igual que el conjunto del niño, que tampoco tiene desperdicio.

¡Estilazo brutal! ¿No lo veis así? Pues aunque no lo veáis, lo es. Jajaja…
Preciosa también la falda de cuadros con el jubón caramelo con volante que lleva esta niña. Con verdes, queda de morir…

Y no puedo resistirme a enseñaros la capa de terciopelo, también en color caramelo (un color delicioso para el otoño), con una exquisita lazada blanca de plumetti a modo de cierre.

¡Vamos, todo un lujo! Ya sabéis que lloro por ver a niñas así vestidas… ¡Buaaaaaaaaaaaa! ¿Pero es que nadie se da cuenta de la maravilla que es? Perdonadme, sé que muchas sí, pero yo no las veo en Madrid…

Maravilla sin igual. Estas chicas de Mi Canesú no sabían dónde se metían al crear la marca… Cada vez ponen el listón más y más alto.
Y como no podía ser menos, en mi primer artículo, no pueden faltar mis “Gansetes”. Ya sabéis que es una de mis marcas preferidas y ayer tuve la suerte inmensa de verlo, tocarlo y disfrutar como una enana viendo cómo una niña se iba probando todo.

Conocí a la mitad de la marca, Debora, tan encantadora como me la imaginaba. Ya le dije que tenían que vender a toda España, porque lo diseñan tan absolutamente divino que no lo concibo. Es que no hay nada que no me guste. Me chifla todo, pero todo.

Y como casi no me puedo decidir y además, aún no han sacado todas sus colecciones, os dejo con alguna foto de sus maravillas, como siempre coordinando a la perfección niña y niño. ¡Fetén!
Por ejemplo, la colección Salvia, una maravilla y en la mano, aún más. El estampado es delicioso, el colorido impresionante y el cuello blanco favorece de morir.
Os enseño el vestido que tuve en la mano y que, como os digo, es increíble. ¿Cómo lo veis? Ya sé que os encanta.

Otra colección divina, estilo college, es la Cilantro. ¡Cómo me puede enamorar tanto algo!. Vestidos sencillos, pero con el encanto de Gansetes, con el cuello blanco… Bueno, miradlo vosotras mismas…
Y el niño, por supuesto, a juego. No os lo perdáis, por favor…


La colección Menta, de la que os dejo una foto, pero entrad por favor en su página web y examinad todo con detalle…

Y con la Hierbabuena, me voy a despedir, aunque sabéis que seguiría eternamente…

Fijaos en la maravilla de vestido y en los conjuntos de rayas, tan, pero tan bonitos. Debora, ahora que ya te conozco, acuérdate bien de lo que te dije…
Como comprenderéis, esto ha sido un pequeño avance de todo lo que os tengo que enseñar aún, así que, coged carrerilla, que esto no ha hecho más que empezar…
Un beso de bienvenida
Me encanta tu página y tus relatos.Incomparables.
Espero recivir vuestros mo delitos . Un saludo.
Por fin artículo que bien pero entiendo que también hay que descansar, y te lo mereces, me encanta como siempre, todo lo que nos has enseñado en este artículo , me chifla, ya he cogido algo , y estoy a la espera del jersey azul de Eva Castro, pero creo que no puede ser solo, sino con pantalón corto y en Burgos, aunque me chifla, y encima este año uniforme , si mi nieto ya va al colegio, hoy su primer día , estaba de mordisco, con el pantalón corto azul y su polo blanco con el anagrama de La Salle.Ana está detrás de intentar conseguírmelo , pero ya me adelantó que difícil, bueno gracias de nuevo , tus artículos son siempre un deleite, y buen gusto a paladas, así que Bienvenidos y muuuuuuchas gracias, un besazo enorme