¡No me da la vidaaaa!   Me teníais que ver… Aún en camisón y con unos pelos horribles. He querido salir esta mañana, porque tenía que hacer mil cosas, pero me ha sido imposible.

El teléfono me lo ha impedido. Llamadas y más llamadas… estoy agotada sólo de hablar.

Todo relacionado con FIMI, la Feria Internacional de Moda Infantil, que se celebra este

fin de semana, aquí, en Madrid y donde yo estaré con la marca Marina´s, una marca nueva para ocasiones especiales que me robó el corazón y de la que ahora formo parte.

Me siento  ahora mismo, como ya os he dicho más veces, como la protagonista de «Mujercitas”, Jo, que le encantaba escribir. Ese libro y película marcó mi infancia.

Todos tenemos algún libro que nos ha dejado huella. Pues para mí, fue ese. Ni sé las veces que lo he leído o he visto la película…

Cada personaje con su carácter: la mayor y responsable Meg, la rebelde e insatisfecha Jo, la presumida y frívola Amy y la dulce y buena Beth…Diréis, que a qué viene todo ésto. Ya sabéis que mientras escribo, pienso y sueño, como todo lo que os enseño aquí, que es un sueño.

Pues tan distintas como esas cuatro hermanas, somos nosotras. Cada una de nuestro padre y madre, como digo yo, y eso se nota en todo y desde luego, en gustos…

Hoy he decidido dar una tregua a las Comuniones, porque además, tengo cientos de mensajes pidiendo que, por favor, hable de los trajes de Comunión de niño. ¡Y me

riñen!

Yo no tengo la culpa de que no me guste casi nada de lo que veo de chicos.

Soy muy clara y lo que más me gusta es un niño vestido con americana, camisa, corbata y bermudas.

O con algún traje marinero, pero de esos con estilazo,  con telas blandas, flexibles, que se arrugen, muy lejos de esos almidonados marineros de siempre.

Y no hablemos ya de Almirantes y demás. Lo siento, pero no puedo con ellos. También me encanta una casaca mona en marino con bermudas beige y cruz de madera. Cosas sencillas, estilosas… No os creáis que hay mucho, pero prometo enseñaros algo el próximo día.

Hoy he decidido adentrarme de nuevo en el mundo del bebé, y más concretamente, en cómo vestir sus cochecitos y sillas de paseo.

¡Es todo un mundo, no os creáis!  De fácil para mí, nada de nada.

Bueno, difícil encontrar lo que me gusta. Odio esos cochecitos con estampados horribles donde el niño además, es inexistente.

Si te asomas, lo suelen llevar hecho un “burruño” debajo de una manta “moderna” y sin almohada…

¡Bufff!  No puedo con ellos…

“Baby Luna” es hoy la encargada de vestir nuestros cochecitos. Verdaderas maravillas se encuentran en esta marca. Una dedicación absoluta y un primor y detalles, que difícilmente encontraréis en otro sitio. Con sus diseños, encuentras todo lo que quieres, con lo que sueñas. Cochecitos y sillas con estilo y llenos de gusto, que seguro harán las delicias de muchas de vosotras.

Además, me encanta que puedas elegir tú el diseño, dentro de un orden. Lo puedes pedir más modernito, más clásico, más recargado, más sencillo… todo hecho por encargo, que es como me encantan las cosas, porque así las dejo a mi gusto y no como me impone nadie.

Conozco algunas marcas que he obviado traer aquí, ya que son demasiado recargadas, emperifolladas y para mi gusto, inadecuadas para la vida normal de una madre de familia.

En fin, que aquí escribo lo que me apetece y me gusta y creo que os puede gustar, ya lo sabéis. No voy a cambiar a estas alturas.

Yo sólo conocí 3 ó 4 tipos de cochecitos y tenía clarísimo cuál me gustaba y cuál me horrorizaba. Ahora hay tantísimos, que tanto el Bugaboo Buffalo, como el Bebecar Sport o Classic, los del grupo 0, Jané y demás, los dejo aparte y hablo de cómo se visten en general.

Después vosotras podéis adaptar lo que os voy a enseñar a vuestro cochecito particular… ¡Qué lío de nombres, madre mía! Desde luego, por ofertas en modelos, no lloréis…

Marta es el alma de «Baby Luna». Hija y nieta de modistas, su andadura comenzó cuando, con la ayuda de su abuela, hizo todo el equipo para su hija.

La gente le iba parando por la calle y así decidió dedicarse a ello, con toda su alma, hasta llegar a dónde ha llegado.

Todo por encargo y artesanal, con unos detalles y acabados exquisitos,  a gusto de la mamá que lo encarga.

Pionera absoluta en todos los diseños que saca, son muchas (como pasa siempre), las que le quieren copiar.

¡Qué gente, que se aprovecha de los años, la creatividad y el trabajo de los demás! Me pone enferma, es algo que no puedo soportar.

Os enseño sus preciosas vestiduras de coche, como las que vais viendo.

Los de punto con ochos, con embozo lencero, detalle de aberturas en encaje rosa, combinado con plumetti, es una deliciaa absoluta. Un rosa bebé  y bolsa a juego que quita el sentido.

Me parece de enamorar. Estiloso y sencillo. Puede ser con pelo por dentro forrado, como tú decidas…

Fijaos en la bolsa (arriba) qué delicadeza y qué ideal, con detalles como la perlita en los cierres, los lazotes de plumetti…¡Me privó en cuanto la vi!

Para todo poner en invierno y primavera, desde luego. No vamos a tener ochenta sacos…

Más modernito, pero modernito de los míos… éste en punto con ochos en gris, combinado con azul y con los pompones. característicos de la marca.

Otra monada y súper práctico. Me encantan los sacos de punto. Y no me digáis que no son estilosos. Sí, hasta para los sacos hay que tener estilo, hijas mías.

También monísimo éste con bodoques bordados en arena y azul bebé, combinados con labrado y tela de vichy.

Tres telas diferentes que encajan a la perfección.

Aquí lo apreciáis mejor. Fijaos bien en qué trabajo tiene, qué maravilla de coordinado, no le falta detalle, todo es puro mimo. Éste sí que es mi gusto totalmente, vamos.

Y precioso también (me chiflan todos), el saco de punto, en este caso para gemelos, en color arena, con los pompones, delicada puntilla y pelo natural en las capotas. Un acierto pleno, con el que la madre, no pudo estar más contenta. ¡Cómo son! Marta crea lo que nadie, es única y cuenta con un equipo excepcional que hace de cada una de sus creaciones una auténtica obra de arte.

Ya los veis. ¡Qué delicia! Ideal para niña o niño ¡Qué detalles y qué coquetones! ¡Me pirran!

No me extraña que en su San Sebastián natal, sea donde más cochecitos deliciosos he visto yo siempre. Eso se ve y se siente desde pequeña, el buen gusto, la perfección y delicadeza, el empeño y lo impecable de todos sus trabajos.

No me digáis qué cosas hace…

Lencero y maravilloso el  conjunto de Donkey y maxicosi azul bebé con chupetero y cestito a juego de arriba. Lo que os digo, si les pedís la luna y nunca mejor dicho, Marta os la da.

Os voy enseñando detalles de sus trabajos como éste de piqué azul bebé con piqué marfil y puntilla delicada con pasacintas. Limpito, precioso, llevas al bebé como un sol, desde luego…

Además, todos muy ponibles, vamos de mucho trote, aunque parezcan tan delicados. Yo los llevaría cualquier día.  ¡Hay que lucir estas joyas!

Ideal de nuevo este saco de estrellas en rosa con pelo rosa por dentro, para que los bebés vayan bien calentitos.

De nuevo, pionera en los pompones con forma de estrella.

Es una algodón rosa empolvado con la panera a juego. Otra delicatessen.

Otra innovación absoluta de Marta con este carrito con funda de tela de sudadera, original y práctica a partes iguales.

Con estampados en bambis (de dónde sacará tantas ideas), en glitter dorado con plumetti beige y rematado con tul en bodoques oro y puntillas italianas.

¡Increíble, pero cierto, para los gustos más exigentes y originales!

Miradlo bien, no sabéis el trabajo que lleva todo esto… Mira que yo no soy de colores oscuros, pero me rindo ante la evidencia de las cosas bien hechas. Y este detalle del bolsitllito fruncido con tul de bodoques y lacito con estrella de nácar, no refleja nada más que eso: una perfección y dedicación a su trabajo como nadie.

Más veraniego, para madres que lo están encargando ahora, porque van a tener un niño y no pueden esperar, este conjunto de florecitas en algodones y piqué. Romántico, femenino, coquetón…

 bodoques…

¡De nuevo, una maravilla! No me extraña que tengáis dudas entre todos ellos.

Pensar en que hay marcas carísimas con auténticas horteradas…

Perdonad, ya sabéis cómo soy, pero es que creo que al haber tan poca oferta en estas cosas, la gente va a lo primero que más o menos le gusta y no. Hay que buscar, que al final, lo encuentras, como yo.

Un cochecito más moderno, al ser marino estampado, pero ideal: diferente de los lenceros, con zorro natural , elegante, también con puntillas y bolso a juego.

Yo elegiría otro color, pero con éste me vale. Está todo tan bien hecho y es todo tan lencero, pese al color…Hay para todas ¿eh?. Después no digáis…

Otro modernito, pero también coquetón, es el de estampado de Pinocho. ¡Esta Marta es única!

En rojos y beige, para madres más modernas. Lleva una puntilla rematando todo el carrito y los tonos en beige, suavizan el contraste . ¿Qué os parece?

Delicadísimo y femenino todo este maxicosi, en plumetti de flores y piqué rosa. No puedo decir nada… tan sólo que lo miréis…

¡Muero de tanta maravilla!  Ya era hora de ver cosas así.

También fantástico, éste, que os explico en qué consiste: cuando las madres quieren conservar sus embozos de puntillas, encajes, etc… Marta confecciona mantitas interiores invisibles, de chenilla, moutón, tejidos polares y demás, con el fin de que los bebés vayan siempre calentitos y más en esta época. ¡Cuánta perfección! Y éste es el resultado. Además, no pesan.

En espiga azul empolvado, también invernal y elegantísimo, este saco y capota.

Estaréis comprobando que en «Baby Luna», nada se les resiste, nada.

Puede ser más o menos moderno, pero siempre tienen un toque lencero. Una madre moderna no lleva este embozo ni muerta..

Sofisticado y lleno de matices, éste, de terciopelo camel con moutón marfil y lazada en grosgrain entrelazada en un encaje de algodón italiano.

Para gustos exigentes y que saben lo que quieren.

Los exquisitos sacos de lana bordada, han marcado también un antes y un después en «Baby Luna».

Han encantado y no es para menos. Estoy chiflada con este descubrimiento, la verdad. ¡Todo divinísimoooo! Si eres más moderna, pues eliges el verde. Si no, lo llevas dulce y lencero como nada. Eso sí, tienen unos baberos, como veis, con pasamanería, hechos al detalle, después de horas y horas de trabajo.¡Uhmmmm!

Auténticas maravillas , en muchos casos muy sofisticadas, ya que tiene tanta variedad y clientela de postín, que cada día diseña modelos más increíbles.

Una de sus clientas más fieles es Paloma Cuevas, la mujer de Enrique Ponce, el torero.

Os lo digo por si hay alguna pija por ahí… jajaja. Os juro que basta que sepa cuál es el modelo que lleva ella para que no sea el que yo encargue. Lo contrario de lo que haría una pija. ¿Os dais cuenta qué ejemplo tan bueno para que entendáis que no lo soy? Jajaja.

Si entráis en su página, veréis que hace para todo tipo de cochecitos, donde ya me pierdo…

Para la maxicosi, fundas delicadas y con todo detalle, como ésta, en azul que yo llamo plumetti de invierno.

Preciosa, con su volantito en la capota y en el embozo, con otra tela en azules.

O este otro, de espiga rosa, combinado con tela de topitos pequeños en rosa.

¡Otra delicia!

Fijaos en los detalles porque merece la pena… Hasta las dos “agarraderas” a juego.

¿Qué os parece? ¿Sería el vuestro si es una niña que nace en pleno invierno?

¿Difícil, no? ¡Ya lo creoooo!

Caprichosísima esta funda, con la capota de punto con ochos y el saco con una tela de flores preciosa, si bien la veo menos ponible, menos de poder combinar.

Es para gente que tiene miles para cambiar… digo yo. Nunca encargaría ésta, porque es muy marcada, demasiado empachante para llevar todos los días.

Pero la clientela de Marta es la crème de la créme de la sociedad…(no te enfades Marta, es la verdad) y ella se lo ha ganado a pulso.

Fijaos en ésta de nuevo: camel, con puntillas, forrada con pelo crudo y pelo natural de adorno en la capota…¡Un lujazo para pleno invierno!

Manoplas para la madre y bolsa a juego… ¡Ni Carolina de Mónaco ha llevado así a sus niños! Y menos a sus nietos, que van hechos un cuadro…

Esa nuera que tiene tan forrada, bien podía aprender un poco de buen gusto. Va de bohemia millonaria y lo que es es una hortera… Lo siento, no me gusta nada. Me parece una snob total.

Otra divinidad, llena de detalles para el Arrue en este caso, pero lo puede amoldar a cualquiera, éste de espiga camel con otra tela beige de topitos, entredoses, puntillas, falda tableada… Y los mismos detalles en la capota. ¡Palabras mayores!

Mirad bien los detalles. Todo lo hace con un mimo y una perfección que me deja siempre pasmada…

¡Mato por estos cojínes antivuelco! Esos sí que me pirran…

Ha puesto el listón muy alto y tiene que estar al día en lo último de lo último, aunque a mí me gusta lo de siempre.

Sus bolsos, también maravillosos. Y es que mira que es difícil encontrar a una madre por la calle con un cochecito bonito y un bolso a juego.

La mayoría me parecen horribles. ¡Ayyy, no se puede ser tan exigente! Pero veo que muchas también lo sois, porque me preguntáis por estas cosas, con lo cuál, yo, encantada.

Escribiendo sobre estas joyas y escuchando a Sabina, no me puedo sentir más como Jo, la de Mujercitas, jajaja. Es verdad…

Mirad éste de piqué con lunares grandes tostados y lazote a juego. ¡Ideal para el verano, que se presta más a lo exagerado y vistoso!

O éste otro, beige, de piqué mezclado con esa tela de

florecitas tan ideal y el consabido lazote a juego. ¡Me priva!

El de cuadritos en gris y lazotes rosas, con el nombre de la niña, también un bombonazo.

En fin, ya veis… esto es un pellizquito de la inmensidad de diseños de «Baby Luna».

Si os ponéis en contacto con Marta, hará de vuestro cochecito, un sueño hecho realidad.

Tiene un gusto exquisito y ya veis qué cosas tan difíciles y sofisticadas diseña, si vosotras queréis, claro.

Está clarísimo lo que me pirra ¿no?

Yo, con uno bonito de ochos de punto para invierno y otro de piqué con florecitas o topitos para verano (eso sí, los dos con puntillas), me conformaba.

Así que, id eligiendo todas las que me habéis escrito que os aseguro que, como en «Baby Luna», no lo vais a encontrar .

Lo digo porque lo sé. Me conozco muchos y nadie como ella para que os deje el cochecito, cualquiera que sea su marca y tamaño, como un auténtico sol.

¡Ojitooo! No digo que no haya ninguna más que también sea bonita, pero con este mimo y detalles y a la carta, sólo ésta.

Me despido cantando y encantada de la vida. ¡Cómo disfruto con estas cosas!

Un beso encapotado