
¡Ya dicen que llega el fríooooo! No es que os quiera fastidiar en absoluto, pero estas temperaturas en noviembre, ya no son normales. Me preocupa el calentamiento del planeta, el cambio climático y todo eso… es que ¡no es normal que aún no me haya puesto medias!
Claro, todo el mundo encantado, pero no se paran a pensar en por qué… Yo, además de que adoro el frío, la chimenea, abrigarte con una mantita, etc… que es lo propio de estas épocas, estoy

realmente preocupada porque dicen que cada año va a hacer mejor y supongo que alguna repercusión tendrá ¿no?

Así que no os preocupéis tanto de estar escarchadas y veréis como la Navidad es Navidad, el invierno es invierno, etc…
Además, ¿cuándo pensáis estrenar esas maravillas que habéis comprado? Jajaja. Me río, porque mi amiga Adela estará enfadándose conmigo. Por ella, como si no las estrenara nunca…
Ella quiere que sea eternamente verano… Yo la chincho y ella a mí, claro.

Es la mayor friolera de este mundo. De Burgos tenía que ser… jajaja.¡Qué peleas con ella por el maldito tiempo, por Dios!

Bueno, pues en Madrid, por lo menos, el sábado, diez grados menos. A ver si es verdad… Hoy en absoluto pensaba hablar de lo que voy a hablar, pero como tengo mucha vida interior… pues he pensado que mucha gente me pregunta que qué color elige para los días de Navidad. Tanto para ellas, como para sus niños…

Yo, hablando esta mañana conmigo misma, he pensado que nunca recomendaba nada que fuera azul marino, hasta que he recibido un mensaje, en el que me enseñaban un vestido precioso de seda (como para nosotras) y era enterito de este color.
He estado dándole vueltas y es que, para mí, el azul marino es un color de verano. No me digáis por qué, pero siempre lo he pensado así.

Sé que estoy equivocada, porque luego veréis que se lleva y es ideal también en invierno, pero el caso es que yo, nunca voy de marino en invierno, porque creo que no me favorece nada, al ser morena de piel.

En cambio, a mi hija (en verano), es el color que más le he puesto, ya que es rubia. No sé qué tengo con este color, que desde luego, me chifla y es, junto con los beige y camel, sinónimo de elegancia total.

Ya veis que cada uno tiene sus manías… En una tienda de Burgos, una chica encantadora de Bilbao, que puso una tienda ideal, y que había estudiado el cómo iban los colores según la piel, etc… me dijo que estaba equivocada, que el marino me sentaba de maravilla…
Yo, está claro, que la dejé hablar, pero seguí sin comprarme nada en este color. Mejor que yo, nadie sabe lo que me va… (pensé). A lo mejor estoy confundida, ya que con el chocolate, me veo monísima, jajaja y soy igual de morena que con el marino, está claro.

Me super encanta el azul marino, pero no para mí, ni para las morenas como yo. En niños, puede que sea distinto, porque lo he visto con mis propios ojos, pero sigo pensando que es un color más para rubias.

Desde luego, a mi hija es el color que más le favorecía de pequeña, y sigo pensando lo mismo, si bien, como siempre os digo, si es un modelo divino, todo puede combinarse y quedar perfecto en cualquiera.
El caso es que hoy os voy a hablar de este color y os voy a pedir un favor: que me dejéis vuestra opinión si lo leéis, ya que no lo tengo del todo claro.
Por un lado, no me puede requetechiflar más, pero por otro, veo que no favorece como pienso a determinadas personas. ¡Ayyy, qué lío os voy a hacer!
El caso es que mirando las propuestas del invierno, por supuesto que se ve el azul marino. ¡Cómo no! Si, como os digo, es sinónimo de buen gusto, siempre…

Así que, todo el mundo a echarme un cable (esta expresión debe de ser madrileña, es la primera vez que la digo, jajaja) y a decirme su opinión sobre esta maravilla de color.

Mi uniforme del colegio era azul marino entero y no es por nada, pero era precioso… Lo recuerdo con muchísimo cariño y bien morena era entonces, claro. Jajaja…
Bueno, pues la primera en la frente: la marca “Gansetes”, por la que tengo debilidad total y absoluta nos propone este color en su colección Plumetti. Vestidos, faldas y jerseys en azul marino, todos divinos de la muerte.

El vestido y la falda es un tono más claro de azul, pero con los topitos del plumetti en marino y desde luego, con marino combinado todo. Unicamente las blusas blancas, deliciosas, rompen la armonía del azul. Hasta los lazos del pelo, en marino. En rojo ya no sería tan elegante…

Los niños, también monísimos, con su jersey de pico. ¿ Qué me decís? ¿Cómo los veis? Yo, paso palabra ante la maravilla que me parecen, por esto os digo que estoy equivocada. Pero también os digo: ¿cómo son las niñas? Rubias. No sé… Bueno, hay una no tan rubia y los niños son castaños.

Desde luego, toda la colección es absolutamente fantástica. Imagino que con este gusto delicioso, da igual el color de piel, pelo o lo que sea. Yo, desde luego, compraría todo.

Porque los chaquetones de punto... muero porque no muero, ya sabéis. Y con pelo, que además de ideales, están a la última.
Otra marca que me parece ideal, también he visto que tiene bastantes cosas en este divino color. Es «Aiana Larocca».

¿Qué os parece este vestido, en el que la tela dibujada con flores, es entera en marino? Es una monería para un día especial, con el cuello, puños y lazada en crudo en el talle bajo. Y morena del todo la niña. La veo divina.

Como os digo, para estar más elegante, todos los complementos, también en marino: lazo del pelo, medias y bailarinas. ¡Perfecta! Si no, no sería ni parecido. Este color me encanta consigo mismo combinado. Como mucho, con rojo, pero en conjuntos más de sport.

La chaquetilla, de la misma tela, otra coquetada. Me pirra la mezcla de la chaqueta arregladita, entallada, con ese vuelo, contrastando con los pantalones de montar. Deliciosa, no es por nada.

Los jerseys de sport, preciosos, con vaqueros… En realidad, es uno de mis colores favoritos (no para mí). ¿Cómo está la niña? Con un poco de estilo, como lo lleva ella…¡Chapeau!

Y otro conjunto precioso es el chaleco acolchado tipo barbour con los pantalones de montar. También, de estilazo total. Y ya, de morir de gusto, la

blusa de cuadros vichy marino. Totalmente acorde con mi gusto, con el cuello, canesú y puños con un volantito crudo, y lazote a la altura del canesú. ¡Uhmmmm! Cómo es, por Dios… Desde luego, con todo lo

demás en marino.
También monísimo para un abrigo marino, el vestido de cuadritos vichy, con lazada cruda en el talle bajo y mismo diseño que la blusa. Monísimooooo. Si me dais a elegir, me quedo con la blusa. Si nadie me da a elegir, ¿por qué me mojaré siempre? Ayyyy….
Me parecen extraordinarios. Aquí, ni morenas, ni rubias, ni pelirrojas. Es más, Elena (mi pobre prima), apunta…

Otra marca, más arregladita, en la que he visto mucho marino es “Artesanía Amaya”. Y dadas las fechas en las que estamos, creo que va a solucionar a muchas estas cuestiones tan duras por las que pasamos las madres…
Por ejemplo, y para más modernitas, veo muy mono el vestido de punto en el cuerpo y tul en la falda. Para un poco mayorcitas y un día especial, monísimo. ¿Cómo lo veis? El toque de la flor, el cuello y el tocado le da un aire festivo.

Monísimo con el abrigo de paño clásico en marino. ¿No? Va cualquier día de fiesta, impecable. Ya sabéis, que le cambiaría el tocado por un lazote, pero eso son cosas mías…

Otro conjunto, en marino, pero combinado con flores, es éste que veis aquí. La verdad es que hasta que no lo ves, no puedes opinar. La niña está monísima, aunque yo soy más clásica.

Pero para las que queréis un poco de alegría, con el chaquetón por encima en marino, claro, tachán… ¡Preparada para cualquier cosa!

Y el vestido cuya tela no sé explicar ahora mismo, abullonado en el talle bajo y con la falda de volantes, me parece soberbio para una preadolescente. ¡Qué monería! Lo mismo para Navidad que para una boda de invierno, que los que me conocen, saben que me apasionan.

Me chifla totalmente. Para una boda, con una abrigo bonito o una capa adecuada, va ideal de la muerte. Medias y bailarinas en marino ¿eh?
También una cucada el vestido de tul y punto que lleva esta niña. Mezcla de sport y arreglado. Pero para mí, es arregladito para cualquier ocasión. Ya veis si hay azul marino, por Dios…
No doy una… es un color que tengo metido en la cabeza que es de verano y punto.
«Pilar Batanero», nos demuestra que en invierno, se puede ir divino con este color. Una vez más, me tapan la boca.

Monísimo el vestido de esta niña, de manga larga, talle bajo y volantes en crudo con moneditas. Es arregladito, pero yo se lo pondría cualquier día. La niña es rubia ¿eh? Jajaja.

También la misma versión, en falda de volantes, con camiseta cruda con un corazón marino de lentejuelas y chaqueta marino informal. ¿Veis? Se le puede dar un toque estiloso y dejar de ser un modelo de fiesta. Con el cuello marino , precioso conjunto ¿no?

Otros conjuntos de sport en marino con algo rojo son éstos: la trenca del niño y el conjunto de falda escocesa de la niña, todo combinado con marino. Un clásico. Siempre acertarás.

Y en la línea más desenfadada de Pilar Batanero, Pihaluu, también vemos el marino en este vestido informal, sin cuello, con botoncitos en el escote y el detalle de unas flores en el bajo a juego con el cordón de la cintura. Para todos los días.
Combínalo bien y verás… A ellas les encanta este tipo de vestidos. Con botas queda ideal.
Y vamos con la archiconocida marca «Foque», donde quien más, quien menos ha picoteado alguna vez.

Yo reconozco que tienen cosas que me vuelven loca. Otras no tanto. Pero algunas…¡Impresionantes!
Super detallado y estudiado, este vestido de punto en marino, combinado con rosa. Hay que reconocer que es precioso: vestido combinando la parte de arriba en punto marino y rosa pálido, el talle bajo y la falda de vuelo, que hace un cuadrito pequeño en azules que prácticamente no se aprecian.

Este vestido, lo podéis encontrar también en Aiana Larocca. De hecho, esta foto de arriba, pertenece a ellas. Es un vestido caprichoso y muy difícil de no comprar. Un abrigo azul, un lazote rosa en el pelo, si es pequeña y preciosísima.

Estas dos pipiolas también llevan sus modelos en marino combinado con rosa. Uno es el mismo tejido, pero distinto diseño, y el otro es falda de volantes alternos, con poncho marino cuajadito de flores superpuestas en ambos tonos. Para mi gusto, demasiado recargado, pero sé que hay mucha gente en el mundo y que, desde luego, una niña mona puede estar graciosísima con ello.

Y no puede faltar el Jesusito de la bebota, con el mismo tejido y los volantitos rosas, en el cuello y en el bajo…
Monísimo para pleno invierno, con todos los complementos en marino.

El conjunto del bebé me priva…Bombachos de pana marino, blusita de cuadritos rosa y marino y chaquetita marino de nuevo. Lo clásico, lo ideal.

Ayyy, qué pena no poder vestir a niños pequeños… Si supierais lo que disfrutaba… Pero como una enana. Era y es mi pasión.

Cambio de tercio, para las más modernas: «Monnalisa». Ya sabéis que los italianos, siempre van por delante y el marino abunda entre sus colecciones de invierno.
Me he quedado impresionada con la cantidad de gente fiel a este estilo para los niños. No es el mío, pero reconozco su buen hacer, la calidad de todo lo que tienen, su puesta en escena, etc..
El año pasado estuve en su tienda y cambié un poco el concepto que tenía, si bien seguiría sin poner así a niños pequeños.

Pero como quiero dar gusto a todos, os enseño algunas cosas, como este abrigo de pelo en marino, que ha causado las delicias de algunas que yo me sé…
Sin cuello, sencillo y atado con un estrechísimo cinturón en la cintura. La niña está ideal, pero repito lo que he dicho. ¿No estaría más ideal a los 30 años? Admito todo tipo de opiniones, ya lo sabéis.

Otra maravilla (si los ves de cerca, son auténticas obras de arte), es este vestido de talle bajo y falda de tul con hojas… Fijaos en el cuello de pelo. Sin desperdicio para las amantes de este estilo. Bueno, y también para las que puedan pagar dinerales, ya que es una marca cara, qué tontería.

Más normalito el plumas con el lazo atrás, es un plumas mono, de siempre, abrigadito…

Y el caprichazo de vestido de punto, con franja de lunares blancos y una muñeca Gilda dibujada a uno de los lados. Cuello crudo… En fin, vosotras me diréis… La niña está mona para una revista porque lo es.
Pero si somos realistas, yo me la encuentro por la calle y lo siento, pero me doy la vuelta y no precisamente porque me guste.
Sé que a muchas las he dejado contentas. Oye… que para gustos, los colores. Eso está clarísimo.
Ahora os voy a enseñar un diseño de «Belcoquet», en marino, que ya es raro, ya que siempre apuesta por colores pasteles y dulces.

Se trata de su colección Melodía, en la que combina el azul marino con el pelo (indispensable este invierno) crudo.
El vestido de vuelo es una monada. Para niñas pequeñas, con el cuello, puños y lazote enorme de pelo crudo en el talle alto, resulta encantador.

No a todas las niñas les va. Creo que tienen que ser delgaditas, porque el vestido abulta mucho. Fijaos que también tiene lazada atrás… Y con abrigo de pelo crudo, no me gusta, así que tendría que ser un abrigo marino especial…
Para más mayorcitas, el mismo, pero con talle bajo. Y esta vez, con turbante de pelo… Están a la última, desde luego. Precisamente, lo que les hace bonito, es que son marino. Si fuera otro color, sería demasiado rimbombante todo junto.

La bebota tiene el Jesusito, cómo no… Puede estar monísima, pero qué queréis que os diga, aparte de que, como os he dicho, no es para todo el mundo, lo veo más mono en una niñita rubia.

Y por supuesto, el bebote, su jersey o sudadera a juego con toda la colección, que quizás sea el que más me guste…
Ya veis que aquí, como en botica. No digáis luego que no os enseño cosas diferentes ¿eh?
«Coccó Rose» es una marca recurrente ya en mis artículos. Ni les conozco (sólo por teléfono), ni nada de nada, no os vayáis a creer que son de mi familia, jajaja.

Pero por una cosa o por otra, les está tocando salir… Y es que no puedo dejar de enseñaros su abrigo, con los puños de piel, con su aire retro, vintage… que tanta sensación ha despertado en toda España.
Su cuellote, los botones grandes forrados y la lazada de atrás le da el aire vintage. Pero a mí personalmente éste me encanta. Bien combinado, con unas botas bonitas o zapatos, es precioso. ¿Qué os parece?

Aquí, la niña lo lleva con medias y bailarinas, monísima. Pero en Burgos y muchos más sitios, no se puede ir así, por lo que os propongo leotardos con botas camel. ¡Queda de diez!

El mismo modelo, sin pelo en los puños, pero con botones grandes en blanco y lazadota atrás, lo veo muy mono, pero menos ponible, aunque si sólo tenéis una niña, yo entiendo todo… Con el gorro de pompón, una muñeca.

Monísimo el vestido Liria, con su manguita al codo y puntillita blanca. Ya os digo que me chifla su aire antiguo…
La parte de arriba, como una chaquetita con botones metalizados y la unión con la puntilla blanca allí donde es preciso…

Por cierto, podéis encontrar tanto el abrigo como el vestido en Malva Rosa y esta niña rubia de la izquierda, no es sino la hija de la dueña. Se llama Alejandra y es preciosa… Y rubísima.

Y el Jesusito Liria no puede faltar… Me hace muchísima gracia ver a esta bebé con esa capotona tan grande y la lazadota… Yo sí que me atrevería con ella. La blusa, como antigua, en crudo, una delicia. Y el culotte marino. ¡Atreveos y presumid de bebota!
Monísimo y clásico el vestido de «Ancar»: ya veis, de punto y con el cuello de volantito en crudo. Punto. Una niña como a mí me gustan. Le acompañan dos niñitos de azul, pero ya no es marino del todo.
El vestido, sin nada especial, me llama la atención ¿veis?, si a lo mejor, la rara soy yo…



También lo podéis encontrar en Aiana Larocca, a quien pertenece la foto que os pongo aquí arriba, de nuevo con el mismo vestido.
Y preciosas estas dos niñas de al lado, también con vestidos en marino, uno de tweed y otro con manga al codo y con puntillas y vivos en crudo. ¡Me chiflannn!

No me lo puedo creer, pero ya me he pasado de líneas, jajaja. Me pongo y no paro. Os dejo fotos si puedo de algo más que os quería enseñar y si no, ya sabéis, haremos, segunda parte.
Madre mía… Un día me dan el Nobel por plasta.
Un beso de zafiro (a ver si cae en los Reyes)
Me encanta el azul marino, es un color que predomina en mi armario y en el de mis hijos. Es un color clásico, elegante y también actual. Me gusta mucho tu blog tienes cosas importantes y ayudas a combinar y dar Buenas ideas
¡Muchas gracias Sonia! A mi también me encanta, es un color que nunca pasará de moda, pero yo, al ser morena de piel, no me veo favorecida…Ahora, me chifla… De nuevo, gracias por tu comentario. Un abrazo, Eva.
Muchas gracias Eva por incluirnos en este estupendo post.
El marino es un color maravilloso, tanto para verano como para invierno y si me apuras, lo prefiero en invierno.
Muchas gracias de nuevo y un beso grande
Marta.
LA CALILA AZUL
¡Gracias Marta! Me encanta que participes… a ver si me entra en la cabeza, porque a mí me sigue gustando más para verano y para rubias… jajaja. Un besoooo.
Cada dia te supera mas. Felicidades
Muchísimas gracias Yolanda! Un placer que te guste.