Agradecida, emocionada, solamente puedo decir…

Diréis que estoy loca, pero hoy me siento así. Por la enorme cantidad de mensajes que estoy recibiendo con preguntas de todo tipo, por el interés por la nueva marca para ocasiones especiales Marina´s, a la cuál represento y por tantísimas cosas más…

También un poco avergonzada porque algunas, como la pobre Patricia, que se lee todos mis artículos, me escribió ayer diciendo que si los leotardos y zapatos blancos estaban prohibidos…

Sé que soy muy vehemente en

mis afirmaciones y siempre digo claramente lo que me gusta y lo que no.

Pero tampoco quiero que algunas me hagan caso si a ellas les gusta, aunque a Patricia, le agradezco infinito que confíe tanto en mí. ¡Un beso Patricia!

Pues estas cosas me llenan de alegría, como comprenderéis… Lo mismo que las críticas.

Me encantan, porque, como soy cabezota y estoy convencida de que el buen gusto es el mío… pues como que me resbalan, sobre todo cuando me lo dicen de manera desagradable llamándome pija.  ¡Y dale con pija!

Si al final, va a ser un halago y todo. Si supierais lo que es ser pija para mí, os daría la risa.

Bueno, pues todas estas cosas me pasan. Hasta una chica asturiana (como podía haber sido cordobesa) a la que reservé dos vestidos en dos tiendas porque así me lo pidió, al ver que pasaban dos días y no me decía nada, se lo recordé y me contestó tan campante diciendo: “Ahhh, es que ya los encontré en otro sitio».

¡Pero bueno! Cuando le recriminé su falta de educación, ya que yo había quedado fatal con esas dos tiendas de confianza, me dijo que lo que yo era, era una pija y que me creía no se qué y no sé cuál… Me dijo que ya no pensaba seguirme y de todo.

Ya os digo que mala educación hay en todas partes: asturianos, sevillanos y burgaleses…

Bueno, vamos al tema de hoy, que me gusta mucho más. Es más, me apasiona. Si estos días estoy hablando de Comunión, hoy no va a ser menos.

La Comunión no sólo es el vestido o el traje. Es mucho más. ¡Me encanta la parafernalia de todo lo que envuelve a este día mágico!

Ya sabéis que me chifla todo lo que sea ropita de casa mona, y que los camisones, pijamas y batas son mi regalo estrella en las Comuniones.

Os lo habré dicho cientos de veces, pero es que es la verdad.

Pues os hablo de eso, concretamente de

“Artesanía Maria Luisa”, que, con su gusto exquisito, hace que me quede mirando siempre sus monerías con la boca abierta. Un desfile de camisones, pijamas, albornoces, batas, espardeñas, toallas y muchas cosas más… Todo pensado para la niña o niño en su día de Primera Comunión. Lo mejor y con el gusto más desbordante de todo, lo encontraréis aquí.

Fijaos en cada cosa que os enseño. Merece la pena y es un regalo bárbaro. Detalles, delicadeza, mimo… y todo o casi todo personalizado, si queréis. Un lujazo, vamos.

Esto de que me gusten tanto los niños bien vestidos en casa, lo he vivido desde pequeña. Mi madre nos hacía unos camisones a mi hermana y a mí, que daba gloria verlos. Los clásicos, con nidos de abeja y lazotes en los hombros, con unas telas ideales…

Eran una maravilla. Y claro, mis hijos han ido igual. Estar en casa de dulce es igual de importante que estarlo en la calle. Para mí, por lo menos.

¡Qué gusto da cuando vas a una casa y los niños están con

pijamas bonitos!  Por desgracia, qué poco se ve…

Mirad qué chiflantes este pijama y camisón en celeste con estampado de cachemir (abajo).

¿No son una joya? El escote, la espalda con volantes, el lazote de raso, los pololos… Todo es un puro detalle.

¡Hasta dan ganas de ponerles los adornos del pelo!  ¡Qué niñas y qué conjuntos!

Aquí las veis de nuevo en una foto preciosa en el campo, con sus espardeñas a juego.

Me parecen fantásticos, de enamorar. Y como os digo, un regalo preciosísimo, diferente a los típicos pendientes o reloj, que ya sabes que alguien se lo va a regalar.

Especialísima también y súper favorecedora la colección Garden, en tela turquesa con flores. El pijama de la niña no puede ser más coquetón, de muñeca total. Y el niño, perfecto con sus pantalones cortos celestes y la camiseta personalizada con su nombre.

El turquesa es un color fetén para el verano. Con que estés un poco morenita, ya te favorece una barbaridad. Fijaos bien en la puntilla deliciosa del escote, en las manguitas de volantes tipo alitas, en el lazote… No tiene desperdicio, desde luego.

A cualquier niña, y más a esa edad, les chifla. Os lo digo por experiencia. A los niños, menos, pero a sus madres…

Aquí veis la colección al completo, que dan ganas de bailar y todo. El camisón sencillo pero bárbaro, el pijama de la mayorcita con camiseta, también pocholote, los de los niños…¡Vamos, que me los llevaba así por la calle!

La colección Snow Butterflies, una de mis favoritas, lencera, en blanco níveo, con el aspecto de los camisones y pijamas antiguos que vemos en las películas. Para soñar…

Lo veis en estas niñas tan preciosas. Con el escote, hombros y espalda de plumetti en pico y el resto blanco, con el volante en el bajo del camisón, así como en el cuerpo y bombachitos del pijama…¡Ayyy!  Me súper enamoran. Me los pondría ahora mismo.

La espalda más bonita y romántica, imposible. En este otro modelo, impresionante, atada con un botón y abertura hasta la cintura, terminando en un volantito de plumetti.

Todo el cuerpo, también de plumetti y lazos de raso, bien grandecitos, para realzar la belleza del modelo. ¡Cómo está la niña, por Dios!

Preciosas las alpargatas a juego, para rematar la maravilla. ¿Qué os parece? ¿No es de impresión? Con un regalo así, quedáis mejor que los Reyes Magos, hacedme caso.

Maravillosos también los almohadones de cada colección, personalizados y coquetones con puntilla alrededor. En la habitación de una niña, quedan de exposición.

Y más blanco para este día tan importante, como estos otros que quitan el hipo. ¿Qué os parecen estas dos niñas en la escalera? La foto es superior, pero el camisón y pijama…

Se ve hecho con tanto mimo, con tanta vocación… No les falta detalle. Puntillas exquisitas, plisados, volantes, manguitas alitas… Con las coronas de flores, parecen angelitos. ¡Pero si parecen ya de Comunión de lo bonitas que están!

No puedo de lo que me gustan estas cosas… ¡Ojo! Cuando son como estas ¿eh? Ya sabéis que soy muy exigente y me gusta rizar el rizo. Pero ya lo rizan bastante en «Artesanía María Luisa», que parece que me han leído el pensamiento.

Aquí los veis de espalda, hasta con el niño, con su pijama precioso con vainicas en la manga… Detalles que no todas saben apreciar; es una pena.

Más desenfadada, pero también coquetona, la colección Stars. Estrellas por todas partes, que están tan de moda.

Mirad qué mona en celeste. El detalle del camisón de estrellas con la estrella blanca cosida con su nombre, vuelve locas a las niñas… y a las madres.

La colección entera me encanta. Tanto los de niñas, con sus detalles, fruncidos, lazos en los hombros… como los de niño, que además de bonitos, son comodísimos.

Y ya es difícil encontrar pijamas monos de niño… ¡Pero que muy difícil!

En verde, miradles que ideales están también. El mayor con camisa y pantalón corto, conjugando los dos colores y el pequeño, con la camiseta. ¡Ideales!

O los dos con camiseta… ¡Aquí hay de todo y todo divino!

Mirad el almohadón tan ideal del niño. Y por supuesto, las niñas,

con camisón y bata a juego, qué os voy a contar. Miradlos sencillamente.

Para niña, bordado en verde, también otra maravilla de almohadón, con la puntilla alrededor y su nombre. Son detalles que no a todo el mundo se le ocurren y es una de las claves de su éxito.

Fundamentales siempre los detalles, siempre.

Divinísima de la muerte y otra de mis favoritas, la colección Sand. De mil rayas en tostado y crudo, con lazotes en los hombros y una puntilla de morir en cruda y dos tonos de rosa.

Románticos, preciosos y de nuevo, con un gusto sobrecogedor. ¿Cómo están las niñas? De rapto total.

Los lazotes de los hombros, que favorecen de muerte y la puntilla en el bajo del camisón y del cuerpo y bombachos del pijama, en un rosa antiguo, deliciosos.

Mirad el detalle, por si no lo veis bien. No tiene desperdicio. ¡Qué le vamos a hacer si todo lo hacen requetechiflante!

Otra idea es regalar el pijama o camisón con la toalla a juego, que veis aquí tan ideal. La colocan en su cuarto de baño y es su mundo, hecho a medida.

Y otra colección, Dots, como no, también preciosa. Alegre, pero delicada y romántica.

Con florecitas rosas (dos tonos de rosa) y sus ramitas verdes sobre fondo crudo y una pechera en un verde claro precioso en el que pone su nombre en una nube… ¡Madre mía, no sé en qué árbol ahorcarme!

Seguro que es de las más comerciales, porque tiene chispa, encanto y ese no sé qué que gusta tanto a las niñas.

Los niños, a juego, van ideales con sus pijamas con pantalón verde claro y sus camisetas.

De las niñas, en este caso, me quedo con el pijama. Es exquisito en todos los sentidos. ¡Coquetón como nada!

Podéis como os he dicho, encargar el almohadón a juego y ya, un completo de morir. Con el nombre bordado en rosa, para qué queremos más.

Fijaos en este otro modelo de florecitas, con puntilla crema en el escote y lazos de raso en verde. Pasmada me dejan. Es que no se puede tener más gusto.

No digo que se los compres para todo trapo, pero la Primera Comunión es el día apropiado para comprarlo.

Id eligiendo, porque es difícil…

Y albornoz y toalla a juego. ¿Cómo os quedáis? Picunelas, bordados, volantes… Lo que os decía, detalles.

La colección Little Stars, puede que sea la más moderna, por decirlo de algún modo, la más bohemia, con un estilazo único.

La tela, más informal, con estrellitas pequeñas de colores y esa espalda más atrevida, chiflante, con la estrella en la que se plasma el nombre de la niña, va a hacer las delicias de muchas.

Las espaldas cruzadas, los lacitos de los hombros estrechitos… Otro bombonazo de niñas.

¿Qué os parece? Hay mucha variedad. Para más clásicas y para más modernas, pero dentro de un orden, que aquí, de modernidades, poco.

Sencillamente yo las llamo innovaciones, motivos que lo hacen un poco más ponible, menos lenceros, claro, pero igualmente sensacionales.

Pues qué queréis que os diga… me quedo con ganas de más.

Pero toca el fin.

Ya sabéis que en Artesanía Maria Luisa, se esconden los sueños de muchas niñas, madres y también de niños, que tienen protagonismo en esta marca.

Aunque a ellos no les haga tanta ilusión, es un regalo magnífico y precioso. Un albornoz con su nombre, además, increíblemente práctico. Mis hijos no se lo quitan.

También capazos a juego y todo tipo de cosas que envuelven el día mágico de la Comunión. No dudéis en preguntarme cualquier cosa y seguidla en instagram en maria_luisa_artesania y en facebook en @Artesanía Maria Luisa S.L.

Pedid y se os dará…¡Ojalá os guste tantísimo como a mí!

Un beso de regalo