Hoy, poquito y con buena letra, ya que he estado todo el día liada y no me da tiempo ni a escribir casi.

Jarrea de una manera increíble en Madrid. La casa se ha quedado a oscuras a las seis de la tarde…

Estos fenómenos que está habiendo en toda España por el cambio climático no me gustan un pimiento.

Un día están a bajo cero y al día siguiente, a veinte grados. Malo.

Y nosotros, que ya estamos todos pensando en la primavera, nos encontramos con un invierno intenso de repente.

Claro, así se están yendo al garete tantas tiendas.

Ayer, me aseguraba una chica, que cerraba, porque aunque no me lo creyera, este invierno, no había vendido absolutamente nada. ¡Pero nadaaa!

Y la gente ha aprovechado para comprar todo en rebajas. En fin, no sé yo. Lo siento muchísimo por tantas tiendas que se ponen con muchísima ilusión y no menos

dinero y acaban así. Porque ha sido una barbaridad las que han cerrado.

Y de las más bonitas… ¡Una pena!

No voy a ser agorera y vamos a pensar que todo puede cambiar, o al menos, vamos a desearlo y que esas tiendas con marcas ideales puedan seguir abiertas y los niños vistiendo cual príncipes.

De verdad, no sabéis qué rabia me da. Y con qué pena me lo dice la gente a la que le ha pasado.

Hoy os voy a hablar de “Los Besos de mamá”, una marca de Jerez de la Frontera donde fabrican y diseñan artículos de decoración para bebés y niños que me ha parecido una monada y como estamos en época de regalos, bien por Comuniones o por Bautizos, he pensado enseñároslo para que lo conozcáis y ayudaos con los regalos.

Básicamente, son artículos en madera, que pintan y personalizan para decoración de las habitaciones de los niños.

Esas monerías que me gustan tanto y que para regalo, son inigualables, porque lo pintan todo a mano, sin plantillas, tienen treinta y dos colores y lo hacen a tu gusto, como tú quieras.

Las perchas, monísimas, que siempre escasean en las casas, porque digamos que lo consideramos como algo «secundario”, cuando no lo es, porque abres un armario de un niño y da gloria ver perchitas monas, forradas, pintadas, como sea, pero monas.

¡Es un detalle bárbaro para un recién nacido!  A mí me encantaría.

Para estas cosas, soy muy ”pijotera”, que no pija, como se empeñan en llamarme algunas.

Pues bueno, como veis, las tenéis de mil colores, personalizadas con el nombre. Podéis elegir lunares, estrellitas…¡Coquetonas y un regalo precioso y original!

También sus nombres, en madera, para poner en cualquier lugar. No me digáis que no os encantan. Ya os he enseñado más veces cositas de estas, pero es que me chiflan.

Bien en la pared, en una estantería, en cualquier sitio… ya la habitación parece otra cosa.

Mis hijos, ni sé las que han podido tener, sobre todo Pablo, que fue al que más le regalaron cosas de este tipo.

Mirad qué monada las de Lola, que además de encantarme el nombre, me chifla el rosa clásico, el de toda la vida y las estrellitas…

Y por supuesto, fijaos qué detalle más ideal para los niños que hacen la Primera Comunión, con estas letras que pueden presidir el sitio donde se va a celebrar el banquete, el Candy Bar, etc.

A ellos les hace una ilusión tremenda sentirse tan importantes y a ti te queda de lujo con todo a juego.

Otro regalo bárbaro para un niño o recién nacido son las sillitas o mecedoritas infantiles para su habitación.

Juan tuvo una blanca con su nombre en celeste y unos dibujitos monísimos y aún la conservo, porque es una auténtica pocholada.

Como os digo, la podéis encargar en los colores con los que esté decorada su habitación y queda de lujo en un rinconcito. Le da calor, sabor, calidez…

Mirad éstas, en un verde agua con lunarcitos, con las que Olivia estará encantada y más su madre, claro.

Con lunarcitos pequeños y el nombre tan bonito escrito, queda chapeau. ¡Cómo me gustarán tanto estas cosas!

O la de Eva, que pongo en mi honor, rosa y con estrellas…

Ya os digo: treinta y dos colores, que se dice pronto… Aunque yo soy muy de rosa y azul para bebés.

También el camel, que ahora es tan demandado y queda de lujo en habitación decoradas en blanco con tostados.

Como, por ejemplo, este caballito en tostado y blanco, de los de toda la vida y que decora la habitación de dos hermanitos, niño y niña, con lo cual, es un color fantástico.

¡Qué monería!  Es que ya te va decorando poco a poco la habitación. Y como regalo, no tiene precio. Nadie se lo espera y a todo el mundo le encantará. ¡Fijo!

El de Germán, en un azul precioso con blanco, también. No es el típico celeste de bebé, como veis. Es más subido y francamente bonito.

Monísimos también los mini caballitos decorativos para cualquier estantería o balda. Un detalle exquisito, no es por nada.

Si yo fuera la madre y regalaran esto a mi bebote, me quedaría encantadísima, como una niña pequeña.

Muchísimas cosas y regalos, como las cajas de pañales, que son una idea brutal, ya que los míos siempre anduvieron por en medio y la verdad, son bastante poco estéticos…

En estas cajitas, los guardas fenomenal, es comodísima y además, decora. ¿Qué más queremos?

Y no me digáis que no vuelve a ser un regalo original y bonito. ¡Pues clarooo que siiii!

Los carritos jugueteros, otra monería y más decoración. Al principio, cuando son pequeños, recoges los peluches, trastos y tantas cosas que siempre dejan por el suelo.

Pero después, como lo tiene mi hija que ha ido poniendo mantitas, libros… Y sigue quedando pocholo en su habitación.

Os lo enseño en rosa, porque me encanta, pero ya sabéis… ¡Treinta y dos colores!  ¿Y para qué tantos? Jajaja.

También cojines preciosos, como éstos de liberty, ideal para la silla, para la cuna… El antivuelco, que es fundamental y los demás, con forma de luna, más de adorno.

O estos, también en forma de luna, de nube, de gota, de corazón… Me encantan, con carita y los ojitos cerrados.

Yo los elegiría todos coordinados, por ejemplo, en celeste liso mezclado con celeste y blanco con lunares, estrellas… Ya me vais conociendo.

Y te queda la cunita, que es un primor.

O el del osito de cuadros, que más mono no puede ser y es como un muñeco para el bebote, a la vez. Decoración, cojín, juguete, todo.

El caballito de palo de toda la vida, también lo hacen y mirad qué monada, cómo es. Además, ayuda con la psicomotricidad de los bebés.

¡Otra idea genial para regalo!

Las mesitas pizarra, que a ellos les pirra, y con las que se pueden tirar horas.  A mí lo que más me gustaba del colegio era pintar con la tiza en la pizarra.

Lo hacía una y otra vez y después, borrar. ¿No os ha pasado?

Pues fijaos qué fácil lo tienen ahora, con las mesitas. Sentaditos con su tiza y pintando o escribiendo… ¡Un lujazo!

Personalizas las patas de la mesa y ya… ¡la bomba!

Esto sí que es un regalazooooo….

Bueno, como os he dicho, tengo poco tiempo, pero hay mil ideas y mil monerías en “Los Besos de mamá”.

Que en estas épocas, hay muchos bautizos y, desde luego, seréis los más originales si regaláis algo de esto.

No tenéis nada más que buscar en google el nombre y os sale su página de Facebook, donde podéis enviar un mensaje y hacer vuestro pedido. Además, también viene un WhatsApp y todo tipo de facilidades.

¡Animaos, que ya os he resuelto el regalo a unos cuántos!

Un beso pintado