
Hoy no sé si soy yo misma. He dormido tres horas, ya que ayer, el servidor, o lo que demonios sea, se estropeó y no me dejó publicar el post hasta las tantas. Le había prometido a la marca publicarlo y ahí estuve, al pie del cañón. Jurando en hebreo, pero estuve.
Seguir leyendo Enamórate de la habitación de tus hijos: regalos muy especiales