
Hoy, día soleado, a pesar de que va a terminar lloviendo como estos días pasados. Esta semana que viene, ya empiezan a llevarse cosas a la otra casa y no veo el momento de estar instalada y ver qué tal todo.

Sigo mal. No sé cuál será mi destino final, pero de momento, parece ser que va a ser esta casita en la que tantos momentos felices viví…

Ahora me voy con unos amigos a tomar un “vino”, a ver si me alegro un poco…
Por la tarde, me toca seguir con cajas y separar lo que se llevan unos y otros, etc.

Si para cualquiera, una mudanza de estas características supone un trastorno en su vida, imaginaos lo que está suponiendo en la mía, que muy sana no está… Me ha tocado todo y todo a la vez. No quiero dar el rollo, pero es mi monotema.
En fin, dado que muchas siguen pensando (lo sé porque lo oigo y porque algunas me lo habéis escrito) que los cuadros ya están muy vistos, les diré veinte mil veces que no están muy vistos. Que los cuadros se llevan desde hace mil años porque son atemporales. Los hay de diferentes tamaños, colores… y si son bonitos, no hay nada que los supere. Son un clásico en la moda. Todo niño tendría que tener alguna prenda de cuadros en su armario.

Así que lo de que están muy vistos es prácticamente una aberración, en cuanto a moda se refiere.

Marcas que se han asentado y muy bien, como “Eve Children”, nos los enseñan en sus colecciones Scottish y Casilda.
La primera, de tartán rojo, como veis y preciosa. A mí no me pueden gustar más los cuadros bonitos. Es como si a un conejo le pones una zanahoria delante. Enseguida me lanzo a ellos.
Ideal el blusón Scottish, el clásico rojo con negro y cuello de bebé. Súper versátil. Para falda o pantalón, una niña deliciosa.

La sudadera con capucha, también es bárbara y practiquísimaaa… Los conjuntos de niño, imponentes, con bermudas, que es como más guapos están. También para el bebé, como os he dejado foto arriba.

¿Y qué me decís del Jesusito para las más pequeñas? Además, se acercan unas fechas en las que esta colección no puede pegar más. Una navidad diferente, más cercana, más familiar que nunca y con la misma tradición del tartán rojo.

“Baby París”, con un estilazo impecable, también nos propone cuadros en varias de sus colecciones, como el vichy blanco y negro tan ideal del conjunto de blusita y braguita de volantes para las más bebés, que ya veis qué resultado tan increíble consigue…¡Para comérselaa!


Estilazo bárbaro con el vestido de cuello bebé, que combinan, bien con turbante o con cuello… La imaginación al poder, como siempre os digo. Y también podéis incluir otro color chillón, para las que sois más arriesgadas. También

queda cañón.
Los niños de esta colección, los mejores. Han conseguido unos looks de matrícula de honor… La sudadera jogging, tan estilosa con los pantalones de cuadros con botones y las botas mohicanas me parece un señor conjuntazo.

¡Cómo está este bombonazo! Y ya veis, es cuestión de pequeños detalles, que al final, se convierten en verdaderas maravillas.

El peto, también chiflante. Con el gorro de pompón o con boina, cuellos, miles de complementos que admiten estos cuadros y que combinan con infinidad de colores.

Otra de sus colecciones es la tartán azul, de cuya tela ni hablo, porque sólo tenéis que mirarla para apreciar lo bonita que es.
Mirad la exquisitez del Baby Tartán, un Jesusito atemporal

que, por muchos años que pasen, siempre será un fondo de armario increíble.

También el conjunto de la braguita de volantes para las bebés, divino. Y si ya tienes dos niñas, pues fijáos qué gozada… ¿Dónde se me quedaron esos tiempos? Daos prisa en vestirlos así, que la vida pasa en un

suspiro y no siempre con cosas gratas, ni mucho menos.
Ideal también la camisa con cuello mao del niño para coordinar con hermanas, primas y demás familia.

Y el vestido marino combinado…¡Cómo es, por Dios! Lo clásico, siempre, siempre será bonito.

Y otra, que me entusiasma también es la vichy verde y azul. También con su conjunto de braguita de volantes, el Baby vichy bombón y el vestido falda largo, que, para mí, es su mejor baza en esta colección. ¡Estilazo en estado puro!


Qué diseño tan sencillo, con una camiseta blanca de manga larga y qué logrado está…

Ya sabéis, complementos a go gó bien coordinados y una niña de revista. Sin mucho adorno y con mucho, muchísimo gusto.

Ya sé que a muchas no os gusta tan sencillo y por eso, quiero enseñaros la colección Shields de “La Amapola”, que ya sabéis, que tendrá de todo, menos sencillez.

Esta vez, se trata de un tartán marfil, botella y burdeos, tonos ideales y adornos heráldicos, que tan de moda están ahora. Ellos, siempre a la última, siempre arregladitos como para ir de boda, aunque lo llaman un vestir-sport, que es como se lo ponéis muchas. Es decir, para salir a la calle.
El Jesusito con capota, una monería arreglada. La falda lleva el volante de abajo en tono burdeos liso y le da un

efecto original, como veis.
El vestido de vuelo, con los adornos heráldicos en mangas y hombros, así como todos los detalles a los que nos tiene acostumbrados Beatriz Bustamante, su diseñadora.

Yo les pondría bailarinas o zapatos en lugar de las pascualas, que nunca me han gustado, pero eso ya es el gusto de cada una. Incluso, hay veces, que bien puestas, he visto a niñas divinas.

Sin duda alguna, para mí, la estrella de la colección es el pichi con la blusa burdeos y todos los detalles que os he comentado. Martina está de impresión con él. Como os digo, para las fechas que se acercan y pese a que muchos estamos tristes, con este conjunto, se hace más llevadero todo…

La marca “Levantelier” nos muestra también cuadros en un verde seco exquisito para la otoñada. La braguita Madrid para las bebés, es una cucada, así como la blusa con volumen en las mangas del niño. No me digáis que no están bonitos…

Preciosa la camisa Madrid, con cuello de volante. Tanto si se la queréis poner más arregladita, o también ideal con unos tejanos y un buen lazo en el pelo.
En ambos casos, niñas clásicas, de las mías…


Los niños, a juego, con las camisas normales y corrientes de manga larga, que es como más guapos les veo y para las pequeñas, también es brutal el pelele Madrid. Se combina con unos letotardos abrigados y una pelliza y fijaos qué niña…


Me da un gusto ver a las marcas que apuestan por lo de siempre, que no los sabéis bien.
No sé para qué tanta innovación. A veces, un capricho que te enamora, pues claro que lo compras, pero como lo clásico, repito, poco.

“Yoedu”, en su colección Atelier, nos muestra este tartán tan sumamente bonito y diferente a los anteriores… Negro, mostaza y rojo. ¡Me pirraaaa!

Monísimo el vestido, con manga larga recta y terminada en un volante precioso. Ya veis, simplemente con el gorro de pompón mostaza, qué toque tan ideal le da. Abrigo rojo o negro, leotardos y el calzado adecuado, harán el resto.

Para el niño, las bermudas a juego y así es como les puedes igualar sin que los niños parezcan siempre ridículos…

Y ya veis el conjunto de falda. Me parece de escándalo con esta blusa blanca tan preciosa, la falda tan cortita (contraste perfecto) y la maxi bufanda con bolsillo gris. ¡Bufff! Mamma mía, cómo está de bonita…
Muchas marcas más apuestan por los cuadros, pero no tengo ni sitio ni tiempo, así que os dejo con éstas, esperando no oír nunca más que los cuadros “no se llevan”.

Lo que se lleva es el buen gusto, sean cuadros o no.
La tienda Friki que lleva ni sé los años y comenzó su andadura en San Sebastián (yo crecí con ella) es un ejemplo de calidad, materiales inmejorables, distinción y clase. Y por supuesto, los deliciosos cuadros ingleses, que, año tras año, tienen en sus faldas, bermudas y demás conjuntos.
Un beso redondo